Análisis de Indicadores Económicos: 26 de septiembre

La inflación se ha convertido en la principal amenaza y los bancos centrales están dispuestos a acelerar el proceso de subida de tasas de interés, aunque esto suponga afectar el crecimiento económico. Haciendo eco de lo anterior, en la semana pasada hubo una sincronización de múltiples autoridades monetarias aumentando el costo del dinero, destacando los anuncios de la Reserva Federal de Estados Unidos.

Esta autoridad apoyó la tesis de tener un nivel más alto en la tasa de fondeo y mantenerla ahí por más tiempo, descartando bajas en 2023. El temor del mercado es que este endurecimiento monetario provoque una recesión el próximo año y su reacción así lo demostró, con fuertes episodios de volatilidad, con un comportamiento acorde a una auténtica montaña rusa. En el frente geopolítico, Rusia anuncia una militarización parcial y la Unión Europea un nuevo paquete de sanciones al gobierno de Putin. En México, la inflación no da tregua en la primera quincena de septiembre y la actividad económica, de acuerdo con el indicador oportuno, se estanca en agosto.

Aunque la Reserva Federal cumplió con el guion en términos de aumentar la tasa en 75 puntos base, hubo dos sorpresas relevantes en sus anuncios. Por un lado, en las nuevas proyecciones financieras. La autoridad estadounidense estima niveles más altos de cierre de año para la tasa de interés (dot plot), respecto a los proyectados en junio pasado. En particular, anticipa que podría cerrar el 2022 en 4.40%, desde el 3.38% anterior. Para 2023 concluiría en 4.6% y bajaría a 3.9% en 2024.

Así, la tasa alcanza ya máximos desde 2008, y por el dot plot se anticipa subidas adicionales de 125 puntos base en las dos reuniones que faltan hasta final de año (noviembre y diciembre).

Por otro, la actitud del presidente de la Reserva Federal durante su conferencia de prensa, ya que puso en duda la capacidad de la autoridad monetaria para lograr un aterrizaje suave de la economía estadounidense.

Se cumplan o no las nuevas expectativas de tasas de interés, algo que dependerá de cómo evolucione la inflación en los próximos trimestres, lo cierto es que el banco central estadounidense ha dejado claro que antepondrá el control de la inflación al crecimiento económico. El nivel de tasa de interés subirá hasta que sea lo suficientemente restrictivo para devolver la inflación al objetivo del 2.0%.

La institución aprovechó la cita para actualizar sus proyecciones económicas. La agresividad que viene mostrando Powell en los últimos nueve meses, la mayor desde principios de los 80, rebajará el crecimiento del PIB para 2022 y 2023.

En términos generales, la reacción de los mercados financieros fue negativa, principalmente las bolsas de valores. Sin embargo, otros activos riesgosos, como las monedas, particularmente el peso mexicano, lograron sortear inicialmente esta proyección de la necesidad de un mayor endurecimiento. Los inversionistas se notan cada vez más convencidos de la necesidad de subir las tasas de interés para controlar la inflación, y el no hacerlo o realizarlo de forma no contundente tendría todavía mayores implicaciones negativas.

Incluso, todavía restaría ver cómo actuaria la Reserva Federal, si la economía se desacelera muy por debajo de las proyecciones en 2023 y se vea atrapada en un aprieto entre una inflación aún elevada y un mayor desempleo. Si bien la Reserva Federal está hablando con dureza ahora, históricamente siempre se ha relajado en respuesta a las condiciones de recesión.

Por otro lado, también anunciaron decisiones de política monetaria instituciones importantes como el Banco de Japón, Suiza e Inglaterra, entre otros.

La autoridad japonesa mantuvo su política monetaria sin cambios, pero ante el fuerte debilitamiento del yen frente al dólar que en los últimos días lo llevó a ubicarse en un nuevo mínimo de 24 años, el gobierno decidió intervenir en el mercado de divisas por primera vez desde 1998 para apuntalar su moneda, a través de compras directas.

Por su parte el Banco de Inglaterra votó por unanimidad a favor de subir su tasa de interés de referencia en 50 puntos base. Esta es la séptima alza consecutiva, en su intento de combatir una inflación que sigue siendo cinco veces superior a su objetivo.

En el frente geopolítico, Rusia sigue tensionando el conflicto a través de referéndums para anexionarse los territorios ocupados, llamadas a reservistas y amenaza de armas nucleares. Por su lado, la Unión Europea aprobó la séptima ronda de sanciones contra Rusia, entre las que destacan una nueva ampliación de la lista de colaboradores del Kremlin y restricciones a las exportaciones tecnológicas hacia Rusia.

En México, la inflación se mantuvo en niveles muy altos durante la primera quincena de septiembre y no muestra signos claros de que pudo haber tocado un pico. Con estos datos de inflación y dada la nueva ruta de subidas de tasas de la Reserva Federal, el Banco de México (Banxico) tendría que aumentar en por lo menos 75pbs su tasa de fondeo en la reunión de la próxima semana. Incluso, crecen las voces de que el aumento debiera ser por 100pbs, situación que por el momento descartamos que suceda.

A pesar de los mensajes más restrictivos de la Reserva Federal y del incremento en las tensiones por la guerra en Ucrania, el peso mexicano tuvo una semana de ligera depreciación. La atención se gira ahora a lo que hará Banxico esta semana.

Principales referencias económicas y eventos de la semana

Las principales referencias para los mercados financieros globales serán las intervenciones de los funcionarios de la Reserva Federal y la revisión del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos del segundo trimestre del 2022.

En Estados Unidos se publicarán las órdenes de bienes duraderos y el ingreso y gasto personal (agosto); el índice y sentimiento de confianza de consumidor (septiembre); así como el cambio en inventarios de petróleo y solicitudes iniciales de subsidio por desempleo.

En Europa se dará a conocer la inflación preliminar de septiembre.

En México, conoceremos la decisión de Banxico, el IGAE del mes de julio y la tasa de desempleo de agosto.

Expectativa para el Tipo de cambio

El mercado cambiario mexicano seguirá muy influenciado por el tema de los recientes anuncios de la Reserva Federal y las crecientes preocupaciones de que será difícil evitar una recesión económica. En este sentido será relevante la serie de intervenciones a lo largo de la semana y por separado de los distintos integrantes del comité del Banco Central Estadounidense.

Además, las cifras económicas alrededor del mundo seguirán permitiendo evaluar la situación actual. Destaca los PMIs de China, la estimación de inflación de septiembre en la Eurozona y la confianza del consumidor en Estados Unidos. También la atención estará puesta en temas geopolíticos como el resultado de las elecciones en Italia, la situación del nuevo plan de emergencia en Reino Unido y la escalada en las tensiones en el conflicto de Ucrania. Localmente, lo más relevante será la decisión de política monetaria de Banxico, con la expectativa de que aumente su tasa de fondeo por 75 puntos base. Dado lo anterior, durante la semana la moneda mexicana podría fluctuar entre los 19.95 y 20.55 spot.

Expectativa para las Tasas de interés

En el mercado primario, la tasa de Cetes a 28 días podría registrar un aumento; por su parte, el rendimiento para los bonos de 10 años en el mercado secundario, podría moverse entre 9.30% – 9.55%.

Analista responsable:

Jorge Gordillo Arias

Síguenos en

Google News
Flipboard