El fracaso de la consulta
En contraste

Es senadora de la República, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y vicecoordinadora del Grupo Parlamentario de Acción Nacional; es la primera mujer que ocupa ese cargo.

X: @kenialopezr

El fracaso de la consulta
La consulta popular no alcanzó el 40% de participación necesaria para ser vinculante. Foto: Canal del Congreso

Esta semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador nos quiso recetar la madre de todas las mentiras. Afortunadamente, la gente no cayó en su trampa. El fracaso de la consulta ciudadana realizada el pasado domingo es un descalabro para el mandatario y para su movimiento.

El titular del Ejecutivo federal, mediante artimañas, engaños y presión, quiso utilizar a las instituciones, entre ellas al Congreso, al Instituto Nacional Electoral (INE) y a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Su objetivo no es hacer justicia, sino hacer de nuestras instituciones un circo para poder desacreditarlas y así seguir apoderándose de todo. En este tiempo utilizó la consulta para intentar amedrentar a quienes le son incómodos.

Es claro que la ley no se debe consultar. Si se tienen pruebas contra alguien que ha cometido un delito, se debe presentar la denuncia ante la autoridad competente. Eso es lo legal y lo moralmente correcto. 

Lee también: Una pregunta ‘sin razón’ y mesas ‘perdidas’ bajan la participación en la consulta popular

Para este gobierno, todo es un espectáculo mediático para desacreditar voces disidentes. Han caído en tal irresponsabilidad que les echan la culpa a los gobiernos anteriores de los nulos resultados que han tenido.

Lo que se le preguntó a la gente el domingo es inentendible. Fue una pregunta ambigua cuyo único fin fue cumplir con los caprichos del presidente. Una consulta que les costó a los ciudadanos más de 520 millones de pesos, como si México no tuviera otras prioridades. 

Se imprimieron 93 millones 529 mil papeletas, de las cuales únicamente se utilizaron 6 millones 663 mil 208, es decir, más de 86 millones de boletas se irán al basurero de la historia.

También se gastaron los tiempos de radio y televisión con la emisión de 377 mil comerciales. Estos espacios se debieron emplear para concientizar sobre las medidas sanitarias. Los comerciales no debieron haber versado sobre esta farsa, debieron ser utilizados para que los mexicanos sepan de la importancia de vacunarse, de usar cubrebocas o de guardar sana distancia. Al gobierno de Morena lo que menos le importa son los ciudadanos, está concentrado en generar distractores.

La ausencia de los votantes en las casillas demuestra que los mexicanos no tienen sed de venganza, sino sed de progreso, de salud, de seguridad y de trabajo. De todo lo que este gobierno no ha querido o no ha sabido dar.

No se puede dejar de lado que se desplegó una campaña mediática y millonaria en espectaculares, lonas, vallas publicitarias, anuncios en el metro de la Ciudad de México, en representaciones teatrales e incluso se atrevieron a utilizar datos personales de forma indebida para publicitar mediante mensajes de texto, mentiras sobre este espectáculo ridículo.

Esta consulta responde a la voluntad de un solo hombre, ese es López Obrador. El pueblo lo que realmente necesita no son consultas populistas, sino dinero en sus bolsillos, no morir durante esta pandemia y sentirse seguros, sin que los asalten o les quiten la vida. Esta consulta fue un fracaso como lo está siendo este gobierno.

Síguenos en

Google News
Flipboard