Desde el Abierto de Australia hasta los mundiales de rugby, nuestros reporteros evalúan las posibilidades de que se produzcan los eventos deportivos más importantes del año.
Este año muchos confían en que eventos de gran relieve global se lleven a cabo. Composición: PA Images, Reuters, EPA, ECB, Shutterstock
Por Sean Ingle, Tumaini Carayol, Greg Wood , Ali Martin , David Hytner , Gerard Meagher y Aaron Bower/The Guardian
Ha sido catalogado como un año dorado del deporte. Pero, como ha descubierto nuestro equipo de reporteros, hay crecientes dudas sobre si las mayores joyas del calendario 2021 se llevarán a cabo en todo su esplendor o, en algunos casos, en absoluto.
Se espera que el formato de 12 ciudades para el torneo de futbol Euro 2020 se reduzca, quizá incluso a una sola ciudad, mientras que la UEFA ya ha comenzado a planificar partidos sin fanáticos. Existen grandes dudas sobre la gira de los Leones a Sudáfrica. Y, aunque los organizadores confían en que los Juegos Olímpicos y Paralímpicos seguirán adelante según lo planeado este verano, el aumento en los casos de Covid-19 los está poniendo nerviosos.
Sin embargo, en el miedo y la penumbra también hay varios hilos de luz. Entonces, ¿qué podemos esperar en 2021? Nuestros periodistas evalúan las posibilidades de que los eventos importantes se lleven a cabo según lo planeado.
Con la frontera del país aún cerrada a los no residentes, Tennis Australia ha realizado importantes esfuerzos para organizar el Abierto de Australia. Después de largas conversaciones en diciembre, se determinó recorrer el torneo casi un mes y más de 300 jugadores deben llegar el 15 de enero con los miembros de su equipo en vuelos chárter a cuarentena durante dos semanas. Se les permitirá cinco horas diarias fuera de sus habitaciones de hotel para entrenar. El estado de Victoria soportó un confinamiento de tres meses y medio hasta el 27 de octubre y registró un nuevo caso de coronavirus adquirido localmente el miércoles pasado, lo que hace que la situación sea aún más delicada que para otros eventos. De aumentar la cifra, la llegada de hasta 1,000 extranjeros no estará exenta de polémica. Si Tennis Australia no logra contener la llegada de contagios, podría afectar significativamente los intentos de Melbourne de contener el virus. Tumaini Carayol
Cheltenham sucederá, a menos que se tengan fuertes lluvias o heladas, pero la expectativa es que la reunión de cuatro días se lleve a cabo a puerta cerrada, sin siquiera la modesta multitud de 2,000 miembros anuales que asistieron a la reunión de dos días del curso en diciembre. La pérdida para la economía de la ciudad se calcula en 60 millones de libras. Si el último confinamiento en Inglaterra se extiende hasta marzo, es poco probable que se admita incluso a los propietarios de caballos que compiten en el evento más prestigioso de la temporada del National Hunt, mientras que las restricciones de viaje relacionadas con Covid entre Gran Bretaña e Irlanda podrían generar una reducción en el número de participantes irlandeses. Casi 40% de los corredores en festivales recientes han sido de Irlanda y los caballos entrenados en Irlanda han ganado la mayoría de las 28 carreras en cuatro de los últimos cinco años. Greg Wood
Al igual que en Cheltenham, se espera que la reunión del Grand National del 8 al 10 de abril, y la gran carrera del último día, se desarrolle a puerta cerrada o con una multitud limitada. Las tres semanas entre las dos reuniones del festival podrían traer una reducción en las restricciones de Covid-19, pero las perspectivas de una asistencia de cinco cifras para ver a Tiger Roll intentar convertirse en el segundo caballo en ganar la carrera tres veces parecen remotas. Tiger Roll también podría enfrentar problemas relacionados con los viajes si el bloqueo se extiende mucho más tiempo de lo previsto, mientras que la ubicación de Aintree cerca del centro de una ciudad importante también podría presentar problemas logísticos para mantener a las multitudes alejadas del mayor evento deportivo anual de Liverpool. Greg Wood
La UEFA sostiene que presiona para organizar el Campeonato de Europa como se había previsto originalmente en 12 ciudades, incluidas Londres, Glasgow y Dublín. Pero el organismo rector del fútbol europeo ha comenzado a planificar la ausencia parcial o total de aficionados. “El 5 de marzo se tomará una decisión sobre qué escenario se aplicará en cada ciudad”, dice la UEFA. Un gran problema no es solo si se puede acomodar a los partidarios, sino también si pueden cruzar las fronteras. De cualquier manera, parece probable que el formato de 12 ciudades se reduzca o incluso que una sola pueda actuar como anfitriona, como hizo Lisboa para las ocho finalistas de la Liga de Campeones de la temporada pasada. Londres es una opción o tal vez podría ser coanfitrión con Glasgow. Sigue existiendo la sensación de que el torneo sucederá porque el futbol ha demostrado ser capaz de continuar a pesar de la reciente interrupción. David Hytner
Hay una aceptación cada vez mayor de que la gira de los Lions no se llevará a cabo según lo programado, dado lo poco probable que puedan asistir 30,000 simpatizantes viajeros. En lo que respecta a Sudáfrica, organizar la gira a puerta cerrada no es comercialmente viable y hay pocos eventos deportivos que dependan más de los fanáticos que viajan para iluminarla. El problema es que no existe una solución de contingencia que se adapte a todas las partes. Sudáfrica preferiría un retraso hasta el verano de 2022, pero las uniones locales tienen giras organizadas y sus entrenadores en jefe no querrán tal interrupción tan cerca de la Copa del Mundo de 2023. Las uniones locales están abiertos a la idea de que la gira se lleve a cabo en el Reino Unido e Irlanda, un escenario que solo vale la pena considerar por razones financieras si los fanáticos pueden asistir y eso sigue en veremos. Hacerlo también iría en contra de más de 130 años de tradición. Se tomará una decisión en las próximas semanas. Gerard Meagher
Los organizadores del tour confían en que la carrera seguirá adelante. De hecho, la semana pasada anunciaron la ruta París-Niza para marzo, lo que demuestra su optimismo en que las carreras se reanudarán en Europa más temprano que tarde. Los clásicos belgas desde finales de febrero a abril han se harán todos a puerta cerrada como en octubre, lo que funcionó bien. Los Juegos de Tokio deben comenzar menos de una semana después del final del Tour y, dado que los organizadores no requieren que los atletas se pongan en cuarentena, los ciclistas podrán apuntar al Tour y los Juegos. Sean Ingle
Wimbledon fue el único grand slam que no se realizó en 2020, su primera cancelación desde la Segunda Guerra Mundial, por lo que no es deseable otro cierre. La inversión del All England Club en una póliza de seguro en el caso de una pandemia produjo un pago significativo que salvaguardará el torneo y la Lawn Tennis Association. El club anunció el comienzo de la planificación para el evento de 2021 en octubre pasado y es probable que el torneo se celebre a menos que lo impidan las pautas de salud pública. El torneo mantiene abiertas todas las opciones de tener público o no, incluida la posibilidad de un campeonato a puerta cerrada. Tumaini Carayol
Los organizadores de Tokio confían en que ambos Juegos se llevarán a cabo “de alguna forma”, aunque ese fraseo da mucho margen de maniobra, desde un evento completo frente a estadios repletos hasta una iniciativa más modesta con menos atletas y público. Hay que esperar a marzo para tener más detalles, aunque si el número de contagios se sale de control, todas las apuestas están cerradas. Ciertamente, no será fácil organizar un evento tan global en una pandemia con 11,000 competidores, 10,000 funcionarios y 20,000 periodistas en Japón. Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional tiene la esperanza de que las vacunas sean un cambio de juego. Si bien la vacuna no será obligatoria, el COI está presionando para que la mayoría de los atletas y el personal lo obtengan en la segunda ola, una vez que los trabajadores clave y los más vulnerables lo hayan tenido. Sean Ingle
Con ocho meses por delante es demasiado pronto para decir si estos eventos tendrán lugar, aunque la semana pasada la capitana de la Copa Solheim de Europa, Catriona Matthew, no dio indicios de que no se llevaría a cabo el evento. Sin embargo, existe un animado debate sobre si es correcto que la Ryder Cup siga adelante sin fanáticos, dado que son tan importantes para el evento. El capitán estadounidense, Steve Stricker, ha insistido: “No se ha hablado de planes de contingencia. Me imagino que estamos en el punto en el que jugaríamos pase lo que pase”. Kerry Haigh, el director de campeonatos de la PGA de EU, se mostró más pesimista. “Estamos hablando de un evento con un ambiente como ningún otro”, dijo. “Así que nuestra esperanza y expectativa es que seremos capaces de participar de la manera que se merece, con una multitud y un apoyo total. Si existe una situación que no lo va a permitir, supongo que probablemente no se jugará”. Sean Ingle
Dado el éxito de Nueva Zelanda en la lucha contra el virus (su último caso local se registró el 18 de noviembre), se espera que el torneo femenino se desarrolle según lo planeado. Nueva Zelanda ha celebrado numerosos eventos deportivos con gran capacidad desde que salió del encierro y la primera edición femenina de la Copa del Mundo celebrada en el hemisferio sur seguirá su ejemplo. En el sorteo de noviembre, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dijo: “Como uno de los pocos países del mundo donde el deporte puede incluso jugarse frente a estadios repletos de fanáticos, la Copa Mundial de Rugby 2021 ofrece una oportunidad para exhibir Nueva Zelanda a una audiencia global”. Sin embargo, queda por ver qué tan fácil es para un gran número de simpatizantes extranjeros asistir, si es que lo hacen, con los estrictos controles fronterizos del país que contribuyen a su éxito en el manejo del virus. Gerard Meagher
Los organizadores de la edición 16 de la Copa del Mundo de la Rugby League tienen la esperanza de que el evento se lleve a cabo en estadios llenos como estaba previsto, pero los planes de contingencia incluyen jugar a puerta cerrada. Sin embargo, una inversión significativa en el evento y los primeros informes de una aceptación positiva de las entradas por parte de los aficionados significa que la liga de rugby podría perderse una ganancia inesperada y lucrativa si no se permite que los aficionados asistan. No se tomará ninguna decisión al respecto hasta la primavera, pero es casi seguro que el torneo se lleve a cabo en 2021 de alguna manera. Posponerlo hasta 2022 sigue siendo un último recurso: aunque los organizadores confían en silencio que el inicio de otoño podría significar que la Copa del Mundo es el primer evento deportivo importante en el Reino Unido con una gran asistencia de público. Aaron Bower.
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