La Mexicana de Aviación de la Sedena iniciará vuelos el 1 de diciembre: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dio a conocer este lunes que la nueva aerolínea, la cual llevará el nombre de Mexicana de Aviación y estará a cargo del Ejército mexicano, iniciará operaciones el 1 de diciembre de 2023.

En conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, el mandatario federal confirmó la adquisición de la marca Mexicana de Aviación tras una resolución judicial que permitió su compra.

Además, destacó que, con ello, los trabajadores jubilados de la aerolínea podrán acceder al pago de pensiones que la empresa les debía.

“La nueva línea va a empezar a volar el 1 de diciembre de este año. Si no se arreglaba lo jurídico, pues íbamos a tener que utilizar otro nombre, ya se había pensado en Línea Maya, pero se logró hace unos días, a finales de la semana, se logró ya una resolución judicial, entonces es una muy buena noticia para los trabajadores. Ojalá les podamos entregar algunos de los cheques aquí, de manera simbólica”, comentó.

“Ahora, estos trabajadores van a tener una pequeña porción de lo que les corresponde. Y ahora, ya con la nueva marca, la línea que estamos haciendo va a lucir más”, expresó.

En ese sentido, el presidente detalló que tras el avalúo que se realizó, los extrabajadores de Mexicana de Aviación recibirán alrededor de 1 mil millones de pesos; por lo que a cada uno de los trabajadores les tocará de entre 60 mil y 100 mil pesos.

“Esto va a ser una recompensa a lo mucho que han padecido, sufrido, desde que, en los tiempos del neoliberalismo, desde que (Vicente) Fox tomó la decisión de entregarle, casi regalarle, Mexicana de Aviación a uno de sus allegados, que luego la quebró y quedo sin responsabilidad. Hubo impunidad, que siempre se protegía a los de arriba, se desprotegía a los trabajadores, se les echaba a la calle”, agregó.

Mexicana de Aviación dejó de operar en 2010 bajo la gestión del empresario Gastón Azcárraga.

En noviembre pasado, el presidente López Obrador informó que buscaba que el Estado adquiriera la empresa y la pusiera a disposición de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

La propuesta del gobierno federal establecía que, en el primer año, la aerolínea sea usada por 1.8 millones de pasajeros, y en cinco años pueda contar ya con una ruta internacional, como Houston, San Antonio o Los Ángeles.