Estos son los tesoros inéditos que fueron descubiertos en la reconstrucción de Notre Dame
La Catedral de Notre Dame reabrirá sus puertas el 8 de diciembre después de un intenso proyecto de reconstrucción.
La Catedral de Notre Dame reabrirá sus puertas el 8 de diciembre después de un intenso proyecto de reconstrucción.
La catedral de Notre Dame reabrirá sus puertas el día 8 de diciembre después de someterse a un intenso proyecto de reconstrucción del que fueron descubiertos algunos valiosos tesoros históricos que estaban enterrados en sus cimientos.
El recinto tuvo que cerrar sus puertas desde abril de 2019, fecha en la que sufrió un incendio por el que se tuvo que someter a un proceso de reconstrucción. Durante estos tres años, trabajadores se dedicaron a retirar toneladas de escombros y a reforzar las paredes de piedra y las bóvedas del techo.
El proceso de reconstrucción estaba pactado para febrero de 2022, pero los arqueólogos decidieron retrasar un poco las labores para tener la oportunidad de explorar los cimientos del lugar, siguiendo lo establecido por la ley francesa, misma que exige la intervención de expertos que garanticen la protección de restos con valor histórico.
Los tesoros descubiertos en la reconstrucción de Notre Dame
Con un plazo de cinco semanas, el equipo de arqueólogos estuvo autorizado para excavar 40 centímetros bajo el piso, que es la medida de la profundidad de los cimientos del andamiaje. El equipo fue liderado por Christophe Besnier, del Instituto Nacional de Investigación Arqueológica Preventiva, quien junto a su equipo halló miles de fragmentos históricos.
“Los restos resultaron ser mucho más ricos de lo esperado (…) Es muy impresionante”, mencionó Christophe Besnier a National Geographic después de que su equipo encontrara 1 mil 035 fragmentos de numerosas obras de arte.
La excavación se extendió a más de dos meses, en los que Bresnier consiguió permiso para excavar a una profundidad mayor que la de 40 centímetros, por lo que pudieron extraer varios objetos y estatuas. Los fragmentos correspondían a la antigua mampara de la cruz de Notre Dame, una plataforma de piedra adornada con estatuas que hacen alusión a escenas clave del cristianismo.
“La escultura es realmente excepcional en su delicadeza, su atención al detalle. La representación de los párpados, las orejas, la nariz… es increíble”, añade Bresnier.
Además, los investigadores encontraron cerca de mil fragmentos de la mampara en diversos tamaños, de los cuales aproximadamente 700 conservan restos de pintura, mismas que se cree que estaban pintadas con colores brillantes, lo que permite a los arqueólogos tener una idea del aspecto original de la Catedral.