Manchester City y love.futbol crean canchas para la niñez mexicana

Hace más de 30 años, la Convención sobre los Derechos del Niño se encargó de proteger a la infancia, a través de un tratado internacional que garantizar su desarrollo pleno, física e intelectualmente. A lo largo de 54 artículos, se habla sobre derechos sociales, civiles, culturales, políticos y económicos e incluye la responsabilidad que deben asumir los padres o tutores de los más pequeños y el número 31 reconoce la importancia del derecho al juego y el esparcimiento propio de la edad del niño.

Una de las actividades recreativas más practicadas por los niños, son los deportes y entre ellos reina el futbol, basta con recorrer las calles de las colonias más populares para ver a un grupo de pequeños colocando algunas piedras para delimitar las porterías y dejar que el balón empiece a rodar.

En 2016, la organización global sin fines de lucro love.fútbol, llegó a México y comenzó su historia en nuestro país, con una cancha en Chimalhuacán, una de las comunidades más importantes de la zona conurbada del Valle de México. Gracias a este proyecto, los habitantes de la localidad ahora cuentan con un espacio seguro en el que además de jugar y practicar deporte, llevan a cabo eventos culturales y sociales.

Se dedicaron 2,250 horas de trabajo, que donaron 450 voluntarios, de los cuales el 70% fueron mujeres, este proyecto se hizo realidad y ahora es un punto de encuentro para todos los residentes de esta comunidad.

A más de cuatro años de distancia, la fundación cuenta con 7 proyectos en suelo tricolor, 6 de ellos están ubicados en la Ciudad de México y la Zona Metropolitana: Chimalhuacán, El Coyolito, La Doce, Santiaguito, Xochimilco, Parque Sur 23 y uno más con sede en Veracruz: Ex – Factoría Nanchital.

Los tres objetivos que love.fútbol busca cumplir con cada uno de estos espacios es brindar acceso al deporte a los niños y jóvenes, fomentar la participación de la comunidad para construir y apropiarse de los proyectos, además de construir una plataforma para el desarrollo y el cambio social a través del deporte.

Gracias a esta metodología única que involucra a las comunidades de principio a fin, ha sido posible cambiar la vida de muchos niños y jóvenes, y convertirlas en historias de éxito. Tal es el caso de Jocelín Bonilla, una niña de 13 años que gracias al programa de desarrollo deportivo que se implemento en La Doce, un proyecto que se desarrolló en conjunto con el Manchester City, cambió radicalmente su forma de vida. Pasó de juntarse con sus amigas a consumir drogas y alcohol, a practicar deporte y trabajar para convertirse en futbolista profesional y bailarina.

“Verlos aquí, que cambian su actitud, que con el tiempo sí puede haber un cambio, me da escalofríos, me da mucha alegría y satisfacción ver que con un poquito que nosotros les agreguemos a ellos, podemos cambiarle la vida a los niños”, relata Daniela Mendoza, entrenadora comunitaria de La Doce.

Otros niños como Fernando Yael de Chimalhuacán y Dilan de El Coyolito, también han visto un cambio en su comportamiento, gracias al deporte que ahora pueden practicar en los espacios de love.fútbol y a las sesiones de entrenamiento que se imparten ahí.

Fernando comenta que antes de acercarse a este proyecto era un niño rebelde, que desobedecía a sus papás y se salía de casa sin permiso, “ahora le hago caso a mis papás, pido permiso, hago el quehacer y lo que me ordenan”, cuenta. Dilan por su parte platica todo lo que ha aprendido en el tiempo que lleva participando en los entrenamientos, la importancia de los valores, el trabajo en equipo, la inclusión y la amistad.

Así como Jocelin, Fernando y Dilan, cientos de niños han sido impactados positivamente y han visto reflejado un cambio en sus vidas. Love.fútbol celebra a la niñez alrededor del mundo y continúa su misión con la convicción de que el deporte es un lenguaje universal y una poderosa plataforma de cambio social.