Emmanuel es papá de una niña trans de 12 años, que ahora se llama Samantha. Desde que su hija reconoció su nueva identidad de género, él decidió convertirse en su principal sostén emocional y hacerle frente a cualquier estigma, resistencia o discriminación con el objetivo de que Sam se sienta plena y feliz.

El escuchar a su hija y arroparla durante la transición ha sido clave para que la menor se sienta libertad durante este proceso. Ambos viven en un departamento con su perrita y Emmanuel se ha hecho cargo de todas las labores del hogar, la comida y las actividades de Sam.

El papá de 39 años aclara que no le costó trabajo entender la decisión de su hija, pero sí asumir de golpe un montón de actividades que se sumaron a su rutina, cuando ella escogió vivir mudarse con él. En el marco del Día del Padre, Emmanuel resume la paternidad como un acto de amor.

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