“Eres un arrogante”: Así fue el reto de Guillermo del Toro a Alejandro Cuarón para dirigir la película El Secreto de Azkaban

Pocas películas de la saga Harry Potter son tan aclamadas como El Prisionero de Azkaban, considerada por muchos la mejor de la franquicia; sin embargo, su realización estuvo a punto de no ocurrir, si no fuera por una intervención decisiva, y muy mexicana, detrás de cámaras: el fuerte regaño y consejo de Guillermo del Toro a Alfonso Cuarón.

En el marco del furor por los recientes elogios que el cineasta jalisciense ha recibido de figuras como Francis Ford Coppola, los fans han traído de vuelta esta historia que cambió el rumbo de la magia en el cine.

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¿Por qué Alfonso Cuarón dudó en dirigir ‘Harry Potter y el Prisionero de Azkaban’?

Tras el éxito global de Y tu mamá también, Cuarón era un director codiciado. Sin embargo, cuando le ofrecieron la tercera entrega de Harry Potter, el cineasta mexicano se mostró reacio, sintiendo que no podía aportar algo nuevo a un universo ya establecido por Chris Columbus.

Durante el Festival de las Ideas en Puebla, Cuarón relató cómo Del Toro lo encaró por su actitud inicial:

“Oye, me enteré de que te ofrecieron Harry Potter... ¿Yo qué tengo que ver con eso? Ni lo conozco”, replicó Cuarón.

El director reconoció que su principal objeción era la falta de espacio creativo: “Esa fue la entrada, pero yo dije ‘¿cómo le voy a hacer si es la tercera de todas? Ya está un mundo creado, no voy a poder crear lo mío’.”

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¿Cuál fue el polémico consejo de Guillermo del Toro?

La respuesta de Del Toro fue tan brutal como efectiva. Desconcertado por la arrogancia de su colega, le dio una orden directa y con lenguaje crudo que se ha convertido en una anécdota legendaria del cine mexicano:

“Eres un pinche pendejo arrogante de mierda. Vas a ir directamente a comprarte el libro, y lo lees. Te hablo mañana”.

Cuarón, reconociendo la genialidad y la intención detrás de la reprimenda, aceptó el desafío. La clave, según Del Toro, era la autenticidad: “Si tú logras quitarte una vez más esas ideas y nada más rendirte al material y hacerlo desde tu punto de vista más profundo... quizá hagas la mejor de todas esas.” El público en Puebla respondió con aplausos y vítores al escuchar el desenlace.

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¿Cómo redefinió Cuarón la estética de la saga mágica?

Alfonso Cuarón no solo aceptó el reto, sino que transformó la franquicia. El Prisionero de Azkaban marcó un antes y un después al inyectarle un tono visual más oscuro, realista y maduro, lo que fue aplaudido por la crítica y el público mundial.

Incluso antes de rodar, el director buscó una conexión profunda con el reparto, pidiéndole a Daniel Radcliffe, Emma Watson y Rupert Grint que escribieran un ensayo en primera persona sobre sus personajes. Cuarón consiguió una amplia respuesta de Watson y una nula entrega de Grint, formas de responder que, irónicamente, resonaron con las personalidades de Hermione y Ron.

Hoy, la película sigue siendo la más valorada de la saga, y esta anécdota resalta la capacidad de Del Toro para impulsar a otros cineastas a superar sus propios límites.