CURP para mascotas 2025: cómo tramitar el RUAC en CDMX y evitar multas
Te explicamos cómo sacar la “CURP de mascotas”, los requisitos y en qué casos aplican multas de hasta 3 mil pesos.

Desde 2024 es obligatorio registrar a perros y gatos en el RUAC de la CDMX.
/Foto: Unsplash/Madalyn Cox
Desde abril de 2024, la Ciudad de México exige que todos los perros y gatos cuenten con su Registro Único de Animales de Compañía (RUAC), también conocido como la CURP de mascotas. Esta medida, impulsada por la Agencia de Atención Animal (AGATAN), tiene el objetivo de promover la tenencia responsable, prevenir el maltrato y abandono, y proporcionar una identificación oficial para los animales de compañía.
Aunque el trámite es gratuito y puede realizarse en línea o de manera presencial, su cumplimiento es obligatorio para los residentes de la capital. No contar con el RUAC puede acarrear sanciones económicas y, en algunos casos, arrestos administrativos. A continuación, te explicamos en qué consiste este registro, cómo obtenerlo y en qué circunstancias se aplican multas por no tenerlo.
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¿Qué es el RUAC y por qué es obligatorio registrarlo?
El Registro Único de Animales de Compañía es una base de datos oficial gestionada por la AGATAN que integra la información tanto de los animales de compañía como de sus tutores o responsables. Al igual que la CURP para las personas, este registro permite identificar de forma única a cada perro o gato, generando una clave personalizada que servirá como su identificación oficial dentro de la CDMX.
La obligatoriedad del RUAC fue establecida por la Ley de Protección y Bienestar de los Animales de la Ciudad de México, que reconoce la necesidad de garantizar el bienestar animal y reforzar el control sobre la población de mascotas en la ciudad. Además de ser una herramienta para facilitar la localización de animales extraviados o robados, también permite a las autoridades actuar con mayor eficacia en casos de maltrato o negligencia.
Otro de los objetivos del RUAC es fomentar la cultura de la tenencia responsable. Al contar con un registro oficial, los tutores de animales tienen una mayor conciencia sobre el compromiso que implica cuidar a un ser vivo. Esta medida también es un paso hacia la generación de políticas públicas más efectivas en torno al bienestar animal.
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¿Cómo se tramita la CURP para mascotas?
El trámite para obtener el RUAC es rápido, gratuito y puede realizarse completamente en línea. Solo necesitas una cuenta Llave CDMX, que se obtiene con datos personales y una dirección de correo electrónico. Una vez que se inicia sesión en la plataforma ruac.cdmx.gob.mx, el proceso de registro requiere los siguientes pasos:
- Captura de datos del tutor: nombre completo, dirección, y otros datos de contacto.
- Información de la mascota: nombre, raza, edad, sexo, color y características físicas relevantes.
- Carga de fotografías: tres imágenes de la mascota: una frontal, una lateral y una con el tutor.
- Generación del RUAC: una vez enviados los datos, el sistema asigna una clave que se puede consultar en línea o desde la App CDMX.
También se puede realizar el trámite de forma presencial en los Centros de Atención Animal ubicados en las alcaldías.
Es importante tener en cuenta que este registro no tiene fecha de vencimiento, pero debe actualizarse si la mascota fallece, cambia de domicilio o de tutor.
¿En qué casos aplica la multa por no registrar a tu mascota en el RUAC?
Aunque el RUAC es obligatorio, las sanciones por no tramitarlo no se aplican de forma indiscriminada. Según la Ley de Protección y Bienestar de los Animales y declaraciones recientes de la titular de AGATAN, Ana Villagrán, las multas solo se imponen en situaciones específicas.
Estas sanciones pueden alcanzar los 3 mil 394 pesos, equivalentes a hasta 30 UMAs, y podrían incluir arresto administrativo de hasta 36 horas. Sin embargo, solo se hacen efectivas cuando la omisión del registro tiene un impacto jurídico.
Por ejemplo: Si una mascota se ve involucrada en un ataque o incidente que requiere la intervención del Ministerio Público o un Juez Cívico.
Si el animal escapa y causa daños o lesiones, y su tutor no puede demostrar que es el responsable legal. En casos de abandono, maltrato o negligencia donde el registro podría haber facilitado la actuación de las autoridades.
Esto quiere decir que las personas no serán multadas únicamente por no tener el RUAC, sino que su ausencia puede agravar la situación en contextos donde ya hay una falta o incidente legal.
El RUAC no solo es una obligación legal: es una herramienta que fortalece la protección de los animales de compañía y formaliza el vínculo entre los tutores y sus mascotas. En un entorno urbano como la Ciudad de México, donde conviven millones de personas con animales en casa, contar con este tipo de registro es también una medida de responsabilidad ciudadana.
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