La-Lista sobre las dudas más frecuentes durante la etapa del embarazo

Cuando nos embarazamos o estamos buscando un bebé, nos llegan muchas interrogantes a la mente. ¿Cuándo acudir al médico? ¿Cuánto subimos de peso? ¿Podemos saber si estamos en gestación antes de que falte la regla. Es hora de despejar las dudas más frecuentes.

La ginecóloga Susana Haquet Santana, académica del Departamento de Embriología y Genética de la Facultad de Medicina, de la UNAM nos responde:

“Podría ser un poco de dolor o tensión en las glándulas mamarias. Quizá una ligera náusea, pero de ahí en fuera no hay ningún otro síntoma antes de que falte menstruación”.

“Lo ideal es ir antes del embarazo. Si una mujer está buscando bebé, considero que unos seis meses antes debería empezar a ir a consulta con su ginecólogo. Tanto el hombre como la mujer deben hacerse exámenes de laboratorio, tomar la presión, ver los factores de riesgo que tienen para un embarazo normoevolutivo o detectar riesgo de alguna enfermedad del embarazo como diabetes, preeclamsia y depresión. Es bueno tomar vitaminas prenatales que contienen ácido fólico y hierro antes de buscar el embarazo”.

“Durante el embarazo el metabolismo aumenta y el cuerpo hace su reserva de colesterol, glucosa, etc. Sí llega a haber cierto cansancio y sueño. Esto se debe a que el metabolismo está guardando reservas. Eso, aunado a la hormona progesterona que también aumenta de niveles, hace que se sienta sueño”

“Las nauseas se producen desde los primeros meses del embarazo, antes de que haya un retraso menstrual y durante los primeros tres meses. Estas se producen porque la hormona del embarazo (hormona gonadotropina coriónica humana o hCG) aumenta demasiado y tiene un pico entre la semana 10 y 12. Eso es lo que nos produce muchas náuseas.

Se puede evitar quitando comidas muy condimentadas y grasosas. Los caldos también causan muchas náuseas, el caldo de pollo, por ejemplo. Lo ideal sería llevar una dieta seca, fruta, pan tostado, etc. Y tatar de hacer comidas pequeñas, al menos cinco veces al día para no tener el estómago vacío, pero tampoco sobrecargado. Las galletitas saladas pueden ayudar y hay medicamentos prescritos por el médico que también pueden ser de utilidad”.

“No debería haber flujo durante el embarazo. Algunas mujeres detectan moco cervical, que todas las mujeres tienen, pero que durante el embarazo se vuelve más espeso, un poco blanco, pero no debe haber ninguna molestia como comezón, mal olor o ardor. El moco cervical llega a manchar un poco la pantaleta y verse espeso, pero hasta ahí. Si se presenta flujo vaginal es síntoma de infección y entonces estamos hablando de otra cuestión que requiere tratamiento médico”.

“El aumento de los senos también comienza desde el inicio del embarazo. El aumento del estrógeno y de la progesterona hace que maduren las glándulas mamarias, entonces empiezan a prepararse para que, cuando nazca el bebé, se pueda dar la producción de leche. Esto comienza desde que se implanta el embrión, empieza a ver este aumento de estrógenos y progesterona y por lo tanto van a aumentar de tamaño las mamas y se pueden sentir dolorosas y sensibles. Obviamente el cambio también lo nota la mujer desde el principio. Al final, a partir de la semana 36 o 37, incluso podría haber una secreción láctea como tal”, explica la ginecóloga Haquet Santana.

De acuerdo con Clínica Mayo no hay un enfoque único para el aumento de peso durante el embarazo y depende de varios factores como el peso de la mujer antes y el índice de masa corporal.

Las mujeres con peso normal pueden subir entre 17 y 25 kilogramos, con sobrepeso entre 14 y 23 kilos y con obesidad entre 11 y 19 kilos.

En general se recomienda entre 10 y 15 kilos. Al principio es muy poco lo que se sube. La mayoría aumenta de uno a dos kilos durante todo el primer trimestre, y luego medio kilo por semana el resto del embarazo. Es importante que lleven una dieta equilibrada, rica en nutrientes.

“A la mitad del embarazo, o a las 18 semanas después de la concepción, es posible que sientas que el bebé se mueve (los primeros movimientos fetales). El bebé duerme y se despierta con regularidad. Se puede despertar debido a ruidos o a tus movimientos. A esta altura, el bebé podría medir alrededor de 6 pulgadas (160 milímetros) desde la coronilla hasta las nalgas, y pesar más de 11 onzas (320 g)”, dice Clínica Mayo.

El National Institutes of Health explica que las complicaciones más frecuentes y que deben monitoreaste son presión arterial alta, diabetes gestacional, infecciones, preeclampsia, trabajo de parto prematuro y riesgo de pérdida del embarazo o aborto espontáneo.

Durante los últimos meses de embarazo, se puede tener la sensación ocasional, a veces dolorosa, de que el útero se contrae y se relaja, conocida como “contracción”. Estas se llaman “contracciones de Braxton-Hicks”.

Para diferenciar las contracciones de Braxton-Hicks y el trabajo de parto verdadero, Clínica Mayo recomienda:

Calcular el tiempo de las contracciones desde el principio de una hasta el principio de la siguiente. Buscar un patrón regular y que se vuelvan progresivamente más fuertes y más regulares. Las falsas contracciones del trabajo de parto son irregulares.

¿Cuánto tiempo duran? Calcula el tiempo de duración de cada contracción. Las contracciones verdaderas duran entre 30 y 70 segundos.

¿Las contracciones se detienen? Las verdaderas contracciones continúan, independientemente del nivel de actividad o de la posición. Con el trabajo de parto falso, las contracciones pueden detenerse cuando caminas, descansas o cambias de posición.

Este artículo se publicó originalmente en Baby Creysi. Consúltalo aquí.