¿Qué es la bipolaridad?

El 30 de marzo se cumple un año más del natalicio del pintor Vincent van Gogh. También a nivel global se conmemora el Día Mundial de la Bipolaridad, padecimiento que pudo afectar al genio holandés.

De acuerdo con cifras publicadas por la Universidad del Sur de California, millones de personas podrían estar afectadas por esta enfermedad mental, caracterizada por los cambios radicales, los cuales incluyen manías y depresión.

“A diferencia de los altibajos normales por los que todo el mundo pasa, los síntomas del trastorno bipolar son graves. El trastorno bipolar no tratado puede resultar en un desempeño laboral o escolar deficiente, relaciones dañadas e incluso el suicidio”, apunta la Fundación Internacional Bipolar.

Aunque existen investigaciones en curso para reconocer las causas de la bipolaridad, los investigadores coinciden en que existe un factor hereditario en este padecimiento que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, es la sexta causa de incapacidad en el mundo.

“Una situación estresante, como una muerte en la familia, una enfermedad o dificultades en la pareja también puede disparar un episodio maníaco o depresivo. La estructura cerebral también podría estar entre las causas” de la enfermedad, argumentan científicos de la Universidad del Sur de California.

Los episodios de euforia y depresión que padecen estas personas pueden ocasionar que se hagan daño a sí mismos o a las personas que los rodean, por lo que es importante tener un diagnóstico oportuno y seguir un tratamiento que complemente fármacos con terapia psicológica.

“La forma clásica de la enfermedad, que implica episodios recurrentes de manía y depresión, se denomina trastorno bipolar I. Algunas personas, sin embargo, nunca desarrollan manía severa, sino que experimentan episodios más leves de hipomanía que se alternan con depresión; esta forma de la enfermedad se llama trastorno bipolar II. 

“Cuando ocurren cuatro o más episodios de enfermedad en un período de 12 meses, se dice que una persona tiene un trastorno bipolar de ciclo rápido. El ciclo rápido tiende a desarrollarse más tarde en el curso de la enfermedad y es más común entre las mujeres que entre los hombres”, detalla la Fundación.

La estigmatización es uno de los problemas a los que se enfrentan quienes padecen esta enfermedad. Adicionalmente, el uso cotidiano de la palabra bipolar como un insulto no ayuda a que la difusión de los síntomas y consecuencias del padecimiento se normalice.

“El lenguaje sensacionalista que crea miedo o desconfianza en torno a una persona que padece trastorno bipolar, asumiendo que las enfermedades mentales están ligadas a actividades criminales” afectan a la población que las padece, señala la cuenta oficial del Día Mundial de la Bipolaridad.

A pesar de que no existe una cura para este padecimiento, realizar pequeños cambios en la vida cotidiana, optar por una alimentación saludable, hacer ejercicio y mantenerse ocupado, siempre bajo la dirección de un especialista de la salud mental y con la medicación correcta, puede hacer que la calidad de vida de las personas con bipolaridad sea buena.

“Las rutinas ayudan a mucha gente con su salud mental. Ayuda a darle una estructura a tu día y puede darte un propósito. Podría ser una rutina simple como comer a la misma hora todos los días, ir a dormir a la misma hora o comprar alimentos solo una vez a la semana”, sugiere el Servicio de Salud británico.