Margarita Alcántara, la guía hacia el Covax
Desde la SRE, Margarita Alcántara llevó las negociaciones con la Alianza Mundial de Vacunas. © Foto: Angélica Escobar/La-lista.

Cuando era niña, Margarita Alcántara no quería ser astronauta como sus demás compañeros del kínder. Ella tenía otro sueño: convertirse en servidora pública y marcar la diferencia para México.

Lo logró en una crisis internacional. Ahora es la jefa de la Oficina para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores y, durante la pandemia, ha sido una de las negociadoras clave para que el país cuente con las vacunas contra el Covid-19.

Su labor comenzó cuando los informes de la ONU y la OMS llegaban y llegaban a las oficinas de la cancillería a principios de 2020. Eran cada vez más alarmantes, con señales de una emergencia global. Había incertidumbre y zozobra por la aparición del nuevo coronavirus que empezaba a provocar muertes en Europa y Asia. El mundo, de pronto, se encontró en jaque.

La funcionaria supo, a raíz de los documentos, que se trataba de una situación atípica y el gobierno mexicano debía actuar de inmediato. “La primera reacción de la secretaría fue atender la emergencia. Lo primero fue colaborar en la proveeduría de equipo de protección médica”, recuerda. “Nos enfocamos en buscar opciones de compra para llevárselas al sector salud. Absorbió mucho del tiempo y los recursos que tenemos”.

Sigue las noticias más relevantes de La-Lista

Noches sin dormir, llamadas a Ginebra a las 2 de la mañana, algunos contratiempos. Su tenacidad y la de su equipo pudieron más que el cansancio o las circunstancias derivadas de la crisis.

Es tiempo de negociar

Desde febrero, en la SRE se preveía que la pandemia no sería como las epidemias del SARS o la influenza H1N1, “nos preparamos para un escenario más complicado”. Pero no bastaba con abastecer al sector salud de equipos para proteger al personal médico, “vimos un poco más allá, porque si queríamos tener una vacuna en diciembre, debíamos trabajarlo desde febrero y marzo”. Las jornadas de trabajo comenzaron a extenderse.

—¿Cuál fue tu rol para lograr que las negociaciones de la vacuna llegaran a buen puerto?

Me tocó llevar las negociaciones con la Alianza Mundial de Vacunas (GAVI, en inglés), que es una asociación internacional que ya tenía trabajo en la distribución de vacunas en países en vías de desarrollo y que actualmente lidera el mecanismo Covax.

Alcántara triunfó en las negociaciones. Sintió una satisfacción profesional cuando el canciller Marcelo Ebrard anunció en conferencia de prensa que México era parte de Covax, lo que garantizó la adquisición de vacunas contra el Covid-19 para 20% de la población nacional.

“Es un parteaguas. Tuvimos que aprender muchísimo, no estábamos especializados en temas de salud”, recuerda. “Cuando existe una emergencia necesitas prepararte lo más que puedas, para tratar de asumir los retos de una manera competente. Mucho era de madrugada y como quiera tuvimos que estar aquí, incluso sábado y domingo. Cuando sabes que estamos a punto de empezar una campaña de vacunación a nivel nacional sientes que todas esas horas valieron la pena”.

“Una mujer presidenta ya es necesaria”

Durante su trayectoria, Margarita Alcántara ha tenido más obstáculos que los hombres para desarrollarse. Aunque en últimas fechas ha habido una diferencia.

“En otras áreas de gobierno es más difícil. Es un mundo dominado por hombres y, muchas veces, no te puedes expresar plenamente porque tienes miedo”, describe. “Trabajar con el liderazgo de una mujer (Martha Delgado) ha sido fenomenal y es lo que verdaderamente ha hecho la diferencia. Ella sabe que lo puedo hacer y que las mujeres que están adelante nos abran camino es muy importante, porque así han ido cambiando las cosas”.

—Hablas de la importancia del liderazgo femenino. ¿Ya es necesario para México que una mujer ocupe la presidencia?

—Definitivamente ya es necesario. Cuando el jefe de todos los jefes sea mujer, vamos a tener muchísimas más mujeres participando.

Síguenos en

Google News
Flipboard