La-Lista de películas de Luis Buñuel

Hablar de Luis Buñuel es referirse a uno de los cineastas más importantes de la historia. Nacido en el pueblo español de Calanda, desarrolló una forma muy particular de narrar que le permitió ser, junto a Salvador Dalí, uno de los máximos exponentes del Surrealismo.

Tras sufrir persecución debido a la Guerra Civil Española, Buñuel recaló en distintos países, siendo México donde realizaría algunas de sus obras más reconocidas, como Los Olvidados, catalogada como Memoria de la Humanidad por la Unesco, o Nazarín.

A 39 años de su fallecimiento, recuerda algunas de las mejores obras del llamado genio de Calanda, Luis Buñuel.

Tras asistir a una exclusiva cena en casa de los Nóbile, un grupo de personas de la alta sociedad no pueden abandonar la mansión de sus anfitriones. Con el paso de los días, los buenos modales y el refinamiento se diluyen, dando paso a la más salvaje lucha por la sobrevivencia.

El título de esta película está inspirado en un proyecto de obra de teatro del poeta transterrado José Bergamín, misma que nunca escribió. El autor se basó, a su vez, en una frase del Apocalipsis. De acuerdo con Luis Buñuel, la locación ideal para el rodaje de esta cinta era Inglaterra, donde sí existe un estilo señorial adecuado a su noción de ‘alta sociedad’.

Una joven novicia visita a su tío viudo antes de tomar los votos y hacerse monja. Luego de sufrir un intento de violación y del suicidio de su tío, la novicia decide renunciar a su carrera religiosa para hacer el bien con los pobres de la región.

Tras ser exiliado en 1937, Luis Buñuel es invitado por el dictador Francisco Franco para regresar a España. La decisión del cineasta fue duramente criticada por sus compañeros de exilio. Algunas escenas, como la de la navaja-crucifijo, desataron críticas negativas, a pesar de estar inspiradas en hechos cotidianos que vio el realizador en los campos de España.

Un cura decide seguir estrictamente los principios del cristianismo, lo que le acarrea la animadversión de otros sacerdotes y de la gente del mesón en el que se hospeda. Solamente una prostituta del lugar y una chica abandonada siguen con fervor sus enseñanzas.

Está inspirada en la novela homónima que Benito Pérez Galdós escribió en 1895. La temática de la cinta le ganó a Buñuel buenos comentarios entre las jerarquías religiosas, a pesar de que el cineasta se consideraba ateo. De acuerdo con Buñuel, México era muy parecido a España por lo que la cinta pudo estar ambientada en cualquiera de los dos países en casi cualquier tiempo.

Simón es un anacoreta del siglo 4 que, para estar más cerca de Dios y su gracia, sube a una columna desde donde lleva una vida entregada a la oración. El Diablo intenta hacerlo desistir de su propósito, tentándolo con distintas visiones. Desesperado por su integridad, Satán envía a Simón a un cabaret neoyorquino de los 60 como último recurso para alejarlo del camino recto.

Se dice que Luis Buñuel acuñó la idea de esta cinta, basada en la vida de San Simeón el Estilita, desde su paso por la Residencia de Estudiantes de Madrid, donde intercambió puntos de vista sobre la historia con el poeta Federico García Lorca. La falta de recursos económicos para terminar la cinta hizo que se redujera a sólo 43 minutos su duración final. De hecho, fue la última cinta que Buñuel rodó en México.

Un delincuente juvenil, conocido como el “Jaibo”, escapa del reformatorio y vuelve a su barrio, donde organiza una pandilla de chicos que se dedica a cometer pequeños hurtos. Todo se complica cuando el “Jaibo” asesina a un niño por accidente.

La furiosa reacción de diversos medios de comunicación ante la cinta provocó que durara sólo tres días en cartelera. Sin embargo, tras su triunfo en Europa, la película se reestrenó, logrando mantenerse dos meses en los cines. Tras conocer la escena en la que Pedro es rechazado por su mamá, todo el equipo de maquillistas renunció, argumentando que una madre mexicana jamás haría eso.