Privilegio real: estos son los beneficios que tenía Isabel II
Durante su reinado, Isabel II nunca tuvo un pasaporte, una licencia de conducir, pero tenía todos los cisnes de Gran Bretaña.
Durante su reinado, Isabel II nunca tuvo un pasaporte, una licencia de conducir, pero tenía todos los cisnes de Gran Bretaña.
Aunque existen beneficios declarados al ser el monarca de una nación, la reina Isabel II de Gran Bretaña tenía algunas ventajas adicionales a su cargo, las cuales se pueden catalogar incluso de insólitas. Esta es La-Lista de sus beneficios reales.
Viajar sin pasaporte
A diferencia de los otros miembros de la familia real, Isabel II no tenía pasaporte, un documento que se emitía en su nombre y que, por lo tanto, no podía darse a sí misma. Por el mismo motivo, tenía un estatuto privilegiado en materia de conducción, ya que era la única británica exenta de tener un carné de conducir.
¡Dos pasteles de cumpleaños!
Isabel II soplaba las velas dos veces al año: el día de su nacimiento, el 21 de abril, y durante las celebraciones oficiales de su cumpleaños, organizadas tradicionalmente el segundo sábado de junio, para escapar del mal clima.
Según la web de la familia real, históricamente los cumpleaños de los monarcas británicos se han celebrado en días diferentes a los de su nacimiento, si este no tuvo lugar en verano.
Sin preferencias políticas
Como jefa de Estado debía observar una estricta neutralidad en el plano político, por lo tanto, no votaba y no podía presentarse a elecciones. Sin embargo, ella inauguraba las sesiones parlamentarias e investía al primer ministro, con quien se reunía regularmente.
Dueña de los cisnes, delfines y esturiones
Isabel II no reinaba solo sobre los británicos. Desde hace varios siglos, los cisnes que viven en libertad en las aguas del país son considerados propiedad del monarca británico. Cada año son objeto de un meticuloso recuento en el río Támesis, una tradición que hoy se inscribe en las políticas de preservación ecológica.
La misma prerrogativa real se aplica a los esturiones, los delfines y las ballenas en las aguas que rodean a Reino Unido.
Primer email… ¡en 1976!
Mucho antes de que el gran público oyese hablar de internet, Isabel II fue la primera monarca que envió un email, en 1976, durante una visita a una base militar. Veintiún años más tarde, lanzó la primera web oficial de la familia real británica.
Tenía su propio poeta
La reina atribuía cada diez años a un poeta de importancia nacional el cargo honorífico de poeta real, cargo que se acompaña con un tonel de jerez como recompensa.
Esta tradición se remonta al siglo XVII, pero la primera mujer que obtuvo el título, Carol Ann Duffy, fue designada en 2009. Escribió poemas para la boda del príncipe Guillermo en 2011, el 60 aniversario de la coronación de la reina en 2013 y el matrimonio del príncipe Guillermo y Meghan en 2018. Fue reemplazada en 2019 por Simon Armitage.
Proveedores reales
Desde té hasta refrescos, pasando por pequeños productores británicos, las marcas que abastecen a la Corona tienen el privilegio de exponer el escudo real en sus aparadores y comercios. Un gran honor pero, sobre todo, un formidable argumento de venta para los elegidos.
Con información de AFP
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