Caso Íñigo Arenas es investigado como homicidio; analizan sustancias que le dieron

La muerte del empresario Íñigo Arenas es investigada como homicidio y se analizan sustancias que le dieron al interior del “Black Royce”, confirmó la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).

La institución local explicó que hay indicios que apuntan a que se cometió un crimen contra el empresario al interior del establecimiento ubicado en el municipio de Naucalpan, por lo que el caso es investigado como homicidio y se cumplimentaron seis órdenes de aprehensión en contra cuatro mujeres y dos hombres identificados como de Aritzi Abril, Ana Karen, Cecilia, Ana Karen, Eduardo y Carlos Daniel.

En un comunicado, la institución agregó que entrevistas realizadas se estableció que Íñigo Arenas estuvo en un primer momento en el área de la planta baja, en donde estuvo acompañada por cuatro empleadas del lugar, “quienes ordenaron diversas bebidas y aparentemente le suministraron sustancias a la víctima, cuya composición fue motivo de peritaje y forma parte de la teoría del caso”.

Explicó que alrededor de las 04:59 horas, el empresario subió junto a las mujeres y dos meseros a otra planta donde le vendieron cuatro botellas de bebidas, con un valor de 10 mil pesos cada una y alrededor de 40 minutos después una de las mujeres dijo al encargado de seguridad que Íñigo se sentía “mal y se puso morado”, por lo que personal del establecimiento le practicó RCP, aunque al continuar el malestar se llamó a los servicios de emergencia y lo trasladaron a otra área del local junto a la salida de emergencia, donde se realizó el levantamiento del cuerpo.

“Una vez que el Agente del Ministerio Público valoró los indicios recabados, el resultado de la periciales y el sentido de las entrevistas rendidas en sede ministerial, concluyó que en el sitio denominado ‘Black Royce’ se cometió un hecho con apariencia de delito, con la probable intervención de seis individuos en el ilícito de homicidio”, expuso la Fiscalía del Edomex.

El resultado del protocolo de necropsia con el resto de los registros de investigación concluye que la causa de la muerte fue asfixia mecánica por sofocación inducida en su modalidad de oclusión de vías respiratorias por contenido gástrico con presencia de alcohol y de sustancias químicas de naturaleza controlada, lo que limitó su conciencia, funciones motoras y que en grado de probabilidad habría propiciado su deceso.

“Se obtuvieron nuevos indicios, tales como: pastillas y sobres con contenido de diversa índole que dieron resultado presuntivo a clorhidrato de cocaína (Nark Id Cocaine); recipientes para aplicación de gotas, cuyo contenido está siendo objeto de análisis químico; así como equipo de grabación y diversos documentos relacionados con la operación del lugar y del evento investigado”, señalaron las autoridades mexiquenses.

Ante esto, el lugar fue asegurado, pues las Fiscalía del Estado de México mencionó que los indicios presumen que en el inmueble se cometen presuntas actividades ilícitas diversas.

Análisis técnicos establecieron que el celular de la víctima fue apagado a las 05:09 horas del domingo 6 de agosto en la alcaldía Miguel Hidalgo, en la CDMX, y fue encendido a las 06:41 horas del mismo día en el área de Santa Martha Acatitla, la última actividad se registró a las 11:37 horas en la misma entidad. Aún se investiga para establecer la ubicación actual del dispositivo móvil.

Las personas aprehendidas fueron puestas a disposición del Juez de Control, al interior del Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Tlalnepantla, para que resuelva su situación jurídica.