¿Sabes qué es, cómo afecta y cómo protegerte de la inflación?
La inflación es una subida de precios que puede traducirse como la disminución del poder adquisitivo a lo largo del tiempo, es así como afecta a tu economía. El ritmo al que disminuye el poder adquisitivo puede reflejarse en el incremento medio de los precios de un colectivo de bienes y servicios seleccionados a lo largo de cierto periodo. La subida de precios, que suele expresarse en porcentaje, significa que una unidad monetaria compra efectivamente menos de lo que compraba antes. La inflación puede contrastarse con la deflación, que se produce cuando los precios bajan y aumenta el poder adquisitivo.
Adentrémonos en los puntos básicos para conocer qué es la inflación y de qué forma nos afecta a nuestros bolsillos.
Aunque es fácil medir las variaciones de los precios de los distintos productos a lo largo de un tiempo determinado, las necesidades humanas van más allá de uno o dos productos. La gente necesita una amplia y diversificada serie de productos y servicios para llevar una vida cómoda. Entre ellos se incluyen productos básicos como cereales, madera, textiles, combustible, servicios públicos como la electricidad y el transporte, y servicios como la atención sanitaria, el ocio y la mano de obra.
La inflación pretende medir el impacto global de las variaciones de precios de un conjunto diversificado de productos y servicios. Permite representar en un único valor el aumento del nivel de precios de bienes y servicios en una economía a lo largo de un periodo de tiempo.
Según el Inegi, en octubre de 2022, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una variación de 0.57 % respecto al mes anterior. Con este resultado, la inflación general anual se ubicó en 8.41 por ciento. En el mismo mes de 2021, la inflación mensual fue de 0.84 % y la anual, de 6.24 por ciento.
Los precios suben, lo que significa que el dinero compra menos bienes y servicios. Esta pérdida de poder adquisitivo repercute en el coste de la vida para el común de los ciudadanos, lo que en última instancia provoca una desaceleración del crecimiento económico. La opinión generalizada entre los economistas es que la inflación sostenida se produce cuando el crecimiento de la masa monetaria de un país (% del PIB) supera al crecimiento económico.
Para combatirla, la autoridad monetaria (o sea, el Banco de México) toma las medidas necesarias para gestionar la oferta monetaria (el dinero) y el crédito con el fin de mantener la inflación dentro de los límites permitidos y con ello el buen funcionamiento de la economía.
Básicamente, la política monetaria es una teoría popular que explica la relación entre la inflación y el dinero en circulación en una economía. Por ejemplo, tras la conquista española de los imperios azteca e inca, cantidades masivas de oro y, sobre todo, de plata fluyeron hacia la economía española y otras economías europeas. Como la cantidad de dinero en circulación aumentó rápidamente, su valor cayó, lo que contribuyó al rápido aumento de los precios.
El aumento de la oferta monetaria es la causa de la inflación, aunque puede producirse a través de distintos mecanismos en la economía. Las autoridades monetarias pueden incrementar la oferta monetaria de un país mediante:
En todos estos casos, el dinero acaba perdiendo su poder adquisitivo. Los mecanismos por los que se genera la inflación pueden clasificarse en tres tipos:
Se produce cuando un aumento de la oferta de dinero y crédito estimula la demanda global de bienes y servicios para que aumente más rápidamente que la capacidad de producción de la economía. Esto eleva la demanda y provoca subidas de precios. Cuando la gente tiene más dinero, se genera un sentimiento positivo entre los consumidore, lo cual a su vez, conduce a un mayor gasto, que tira de los precios al alza. Se crea una brecha entre la oferta y la demanda, con una mayor demanda y una oferta menos flexible, lo que se traduce en una subida de los precios.
Es el resultado del aumento de los precios a través de los insumos en el proceso de producción. Cuando los incrementos a la oferta de dinero y crédito se canalizan hacia el mercado de materias primas u otros activos, aumentan los costes de todo tipo de bienes intermedios. Esto provoca un aumento del costo del producto o servicio acabado y se traduce en una subida en el precio al consumidor. Por ejemplo, cuando se amplía la oferta monetaria, se crea un auge especulativo en los precios del petróleo. Esto significa que el costo de la energía sube y contribuye al aumento de los precios al consumo, lo que se refleja en diversas medidas de inflación.
Está relacionada con la idea de que la gente espera que las tasas de inflación actuales continúen en el futuro. A medida que sube el precio de los bienes y servicios, la gente puede esperar una subida continua en el futuro a un ritmo similar. Por ello, los trabajadores exigen aumentos en sus salarios para mantener su nivel de vida. El aumento al salario se traduce en un mayor costo de los bienes y servicios, y esta espiral salarios-precios continúa a medida que un factor induce al otro y viceversa.
Saber qué causa la inflación, qué significa realmente una tasa de inflación y cómo manejar el aumento de los precios puede ayudarte a hacer un seguimiento de los cambios en tus finanzas personales y tus inversiones. Y a manera de resumen, si queremos definir qué es la inflación diremos que son “demasiados billetes persiguiendo muy pocos bienes”.
Los economistas utilizan una canasta de bienes, es decir, un conjunto de productos generales y sus precios, para medir las fluctuaciones de los costos. Esta canasta de bienes se puede utilizar para calcular el IPC, que mide las tasas de inflación.
El IPC rastrea cuándo los precios suben y bajan. Saber cómo varían los precios puede ayudarte a comprender el poder adquisitivo de los consumidores.
También puede servir para comprender mejor el nivel de vida en función de la diferencia entre ingresos y gastos. Cuanto mayor sea la tasa de inflación, mayor será la dificultad para mantener un nivel de vida adecuado.
La inflación nos afecta a los consumidores de varias maneras, y no solo las relacionadas al aumento de precio de los productos.
Debido a la inflación y las políticas que toman el gobierno y el banco central, los economistas sugieren que los consumidores experimentamos las siguientes consecuencias:
Todos aquellos preocupados por el aumento de la inflación pueden estar interesados en técnicas de cobertura de inflación o activos para sus portafolios. Esto significa invertir en activos que tienen una correlación baja o negativa con industrias o inversiones afectadas negativamente por una alta inflación. Los activos reales, como el oro al igual que los bienes raíces, tienden a ser inversiones de cobertura de inflación muy adecuadas.
Los Certificados de Depósito a Término Fijo (CDTs), son documentos en los que consta que has dejado a cargo del banco un dinero por un tiempo determinado y que luego de que este tiempo transcurra podrás recibirlo de vuelta junto a una suma adicional producto de la rentabilidad, son también una excelente opción de protección contra la inflación.
Aunque es importante estar pendiente del dato de la inflación, también es importante saber que los períodos inflacionarios son cíclicos y que en muchos casos las estrategias de inversión pensadas a largo plazo y que incluyen diversificación en muchos casos funcionan durante estos períodos de tasas de inflación más altas.
La inflación puede interpretarse como algo bueno o malo, dependiendo del bando que se tome y de la rapidez con que se produzca el cambio.
Ventajas
Desventajas
Incluso una tasa de inflación baja, estable y fácilmente predecible, que algunos consideran por lo demás óptima, puede provocar graves problemas. Esto se debe a cómo, dónde y cuándo entra el nuevo dinero en la economía. El proceso de ajuste del nivel de precios a la nueva oferta monetaria se produce a medida que se gasta el nuevo dinero y éste circula de mano en mano y de cuenta en cuenta por la economía.
La inflación hace subir primero algunos precios y después otros. Este cambio secuencial en el poder adquisitivo y los precios (conocido como efecto Cantillon) significa que el proceso de inflación no solo aumenta el nivel general de precios al tiempo. También distorsiona los precios relativos, los salarios y las tasas de rentabilidad a lo largo del proceso. Los economistas creen que este proceso es uno de los principales impulsores de los ciclos de recesión en la economía.
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