Hay investigaciones abiertas en mi contra y voy a presionar para que las cierren: EPN

El expresidente Enrique Peña Nieto (EPN) reveló que hay investigaciones en su contra que siguen abiertas, sin avances, que podrían ser reactivadas si llega a ser necesario políticamente en el contexto de las elecciones de este año.

“Sé que la Fiscalía (FGR) la tiene y le he dado seguimiento con mis abogados; la tienen congelada, no la han cerrado”, comentó.

“Yo voy a presionar un poco para que la cierren, pero cuando haya pasado la elección presidencial. Antes no creo que la vayan a cerrar. Han de tenerlo por si se ofrece”, comentó EPN al periodista Mario Maldonado, para el libro titulado “Confesiones desde el exilio: EPN”, del cual da un adelanto el diario El País.

Además, EPN dio a conocer que desde dentro de su gobierno, comenzó a gestarse una suerte de conspiración de grupos políticos y empresariales para tumbarlo de la silla presidencial y convocar a nuevas elecciones.

“Esto ocurre justo antes de que yo cumpliera dos años. Me querían chingar, me querían tirar”, apuntaló.

El exmandatario explica que se fue de México porque quería ser un “buen expresidente” y confirmó que sigue hablando con el actual titular del Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, con quien tiene una buena relación.

“Tienes que dar espacio de respeto a quien está en la titularidad del Ejecutivo, y una manera de hacerlo es sustrayéndote”, contó Peña Nieto a Maldonado. “Yo estoy convencido de que uno, cuando está en esta tarea, busca y trabaja para hacer una buena gestión de gobierno, ser un buen presidente de México, pero también está la responsabilidad implícita de convertirse en un buen expresidente, y eso es lo que busco”. 

EPN indicó que aunque planea regresar país, por ahora continuará fuera de este, al menos lo que dure el sexenio de López Obrador, que concluye en septiembre, y aclaró que no volverá a la política.

“Tengo interés de regresar, pero no tengo decidido si de forma permanente. Yo quiero mantenerme en esta sana distancia en este espacio del actual gobierno, pero pienso regresar”, abundó.

Maldonado escribe que aunque EPN salió de México luego de terminar su presidencia, pensaba en volver, pero ocurrieron cosas como la detención de su abogado y amigo, Juan Collado, que hicieron que EPN decidiera quedarse fuera del país de manera permanente.

El autor del libro apunta: “El mensaje transmitido sobre la persona de Juan Collado seguramente por el entonces entrante gobierno de López Obrador, tuvo el efecto esperado en Peña Nieto: tras la aprehensión de su amigo y abogado tomó la decisión de no volver a México, por lo menos dentro de los subsecuentes seis años. Sabía en ese momento que había cometido un error al asistir, el 19 de mayo de 2019 en tierras mexicanas, a la boda de la hija de Collado”.

Lo anterior, en referencia al evento en el que fueron captados varios políticos, entre ellos el propio Peña.

Sobre las conversaciones con López Obrador, refirió que tuvo tres durante la transición, en una de las cuales le pidió un consejo.

 “¿Qué más le podría sugerir, si usted es ya un actor político?”, le contestó Peña Nieto.

Pero López Obrador insistió y EPN le dijo que “se cuidara” de los empresarios “que se dicen sus amigos de Monterrey”.

Y es que Peña Nieto le contó cómo los empresarios regios traicionaron un acuerdo político para apoyar a la candidata que postuló el PRI para la gubernatura de Nuevo León en 2015. Al final, según el priista, los empresarios terminaron apoyando a Jaime Rodríguez, El Bronco.

Sobre la elección del 2018, Peña asegura: “La verdad de las cosas es que la elección ya la tenía ganada López Obrador. Muchos me recriminan, porque querían que evitara a toda costa que ganara, pero ¿qué querían que hiciera?”.

EPN volvió a platicar con López Obrador recientemente, el 15 de septiembre del año pasado, luego de que el mandatario inaugurara un tramo del Tren Interurbano México-Toluca, que Peña Nieto dejó inconcluso en su sexenio.

A través del celular del ayudante personal de López Obrador, Daniel Asaf, Peña Nieto le agradeció al presidente haberlo llamado “demócrata”, por no haber sucumbido a las presiones de meterse en las elecciones de 2018. López Obrador le reiteró por teléfono esa deferencia. “Gracias, Enrique. Te comportaste como un demócrata. Eso no lo voy a olvidar. Que estés bien”.

Sobre el caso de la casa blanca que provocó que perdiera aprobación y enfrentara múltiples cuestionamientos, el priista dice arrepentirse del control de daños: que Rivera saliera a decir que la vivienda era suya y que la estaba pagando con las ganancias que obtuvo como actriz de Televisa.

“Nunca debí permitir que mi esposa diera esa explicación y que se expusiera de tal forma”, comentó.

Este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que habló con EPN después de la elección e incluso lo invitó a comer a su casa: