AMLO decreta nueva expropiación de 150 hectáreas para Tren Maya
La Sedatu informó que en todos los casos, las expropiaciones para el Tren Maya se realizan “por causa de utilidad pública”
La Sedatu informó que en todos los casos, las expropiaciones para el Tren Maya se realizan “por causa de utilidad pública”
El gobierno de México decretó una nueva expropiación de 150 hectáreas en territorio de Quintana Roo y Campeche, para la construcción del Tren Maya.
Así se da a conocer en la edición matutina del Diario Oficial de la Federación (DOF), en la que se publicaron cuatro decretos por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en los que se detalla dicha expropiación y la indemnización por un monto total de 90 millones de pesos.
En el caso de Quintana Roo, se expropian 06-93-92 hectáreas, del ejido “Reforma Agraria”, municipio de Felipe Carrillo Puerto, a favor de Fonatur Tren Maya, S.A. de C.V. por motivos de utilidad pública. Y se pagarán 2 millones 914 mil 464 pesos.
Y la superficie de 129-15-57 hectáreas del ejido “X-Hazil y Anexos”, también Felipe Carrillo Puerto, por dicho espacio se pagarán 85 millones 953 mil 485.15 pesos, también por causa de utilidad pública a favor del “Jaguar Rodante”.
Mientras que, en Campeche se expropiaron por causa de utilidad pública 03-81-88 hectáreas, del ejido “Matamoros” en el municipio de Escárcega, por lo que se pagarán 620 mil 275.61 pesos.
Y también se expropian 09-19-64 hectáreas, del ejido “N.C.P.E. Valentín Gómez Farías”, municipio de Calakmul a favor de Fonatur Tren Maya, S.A. de C.V.; por este espacio se pagarán 769 mil 444 pesos.
El documento detalla que el Instituto Nacional de Administración de Bienes Inmuebles (Indaabin), emitió dictamen valuatorio en el cual se determinó que el monto de indemnización, con base al valor comercial de la superficie por expropiar es de 85 millones 953 mil 485 pesos con 15 centavos.
La Sedatu apuntó, en todos los casos, que las expropiaciones se realizan “por causa de utilidad pública”.
El Tren Maya es uno de los proyectos prioritarios del presidente Andrés Manuel López Obrador, que pretende construir más de mil 500 kilómetros de vía férrea en Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Activistas han promovido amparos desde el inicio de su construcción, y han exigido suspender las obras en distintos tramos, debido a la tala de miles de árboles, la contaminación de ríos subterráneos y el daño al patrimonio natural y arqueológico.
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