El trabajo veloz en el Covid le da a la industria de las vacunas una inyección en el brazo

La candidata para convertirse en la primera vacuna del mundo contra el Covid-19, desarrollada por la compañía farmacéutica de EU Pfizer y BioNTech de Alemania, tuvo su origen a finales de enero de 2020. Uğur Şahin, el director ejecutivo de la firma biotecnológica basada en Mainz, leyó sobre el coronavirus en el Lancet y se preocupó de que el brote se pudiera convertir en pandemia.

Şahin convocó a colegas para decirles que su compañía cambiaría su enfoque en tratamientos para cáncer para encontrar una vacuna contra el virus letal. Usaría un método basado en mARN, con el que se introduce material genético del coronavirus en el cuerpo, causando que las células humanas produzcan las famosas proteinas pico. Esto detona una respuesta inmune. Pfizer se sumó para ayudar con el desarrollo y los costos de distribución.

El lunes pasado (9 de noviembre), las dos compañías sorprendieron al mundo con noticias de que en ensayos globales la vacuna había sido 90% efectiva en proteger a la gente del virus, elevando las esperanzas de que el fin de la pandemia podría estar cerca, y disparando a los mercados de valores. El jefe de Pfizer Albert Bourla, quien vendió 5.6 millones de dólares de acciones ese mismo día, la llamó “el avance médico más grande en los últimos 100 años”.

Después de más pruebas, la firma planea presentar la vacuna para aprobación de emergencia a finales de mes, y podría ser enviada por el mundo para diciembre. Las ventas globales podrían alcanzar 13,000 millones de dólares el próximo año, divididas a la mitad entre las dos compañías, de acuerdo a los estimados del banco de inversiones Morgan Stanley. Otras vacunas no se quedan atrás en el desarrollo.

Normalmente, el desarrollo de una vacuna toma más de 10 años, con un costo típico de 500 millones de dólares a 1,200 millones de dólares. Las vacunas generalmente tienen un 6% de probabilidad de llegar al mercado, según la Federación Internacional de la Industria del Medicamento (IFPMA). La pandemia de Covid-19, que ha matado a más de un millón de personas encendió la carrera global para encontrar una vacuna, y ahora hay 10 en las últimas etapas de ensayos clínicos.

Gavi, una alianza de cuerpos públicos y privados que pretende aumentar la inmunización en países pobres, está detrás de la facilidad Covax, un fondo para futuras vacunas contra el Covid-19. Su directora, Aurélia Nguyen dijo: “Esto no tiene precedentes. Nunca se ha intentado nada como esto. Estamos haciendo esto mucho más rápido que lo que se ha hecho antes”.

Ella dijo que hay un gran esfuerzo internacional, con gobiernos y organizaciones de salud que preordenan millones de dosis de fabricantes de vacunas. Los pasos que normalmente se toman en secuencia se toman en paralelo, incluyendo la manufactura de dosis sin saber si la vacuna funciona, y la presentación regular de información clínica a los reguladores durante los ensayos con miles de voluntarios en lugar de al final del proceso.

Emily Field, la cabeza de investigación farmacéutica europea en el banco Barclays dijo que la industria farmacéutica tuvo una ventaja después de las epidemias de Sars en 2003 y Mers en 2012, las dos causadas por coronavirus. Ya habían trabajado con tecnología para mARN, que se puede adaptar a virus distintos.

La firma estadounidense Moderna dijo que sabría a finales de noviembre si su vacuna, que también funciona con tecnología mARN, funciona. En el Reino Unido, AstraZeneca y la Universidad de Oxford, con su vacuna basada en un virus modificado del resfriado de chimpancé, esperan tener resultados a finales del año.

Las vacunas de Johnson & Johnson y Novavax también están en las últimas fases de los ensayos clínicos, también la vacuna Sputnik de Rusia y una vacuna CoronaVac de la firma de biotecnología china Sinovac. Sanofi Pasteur de Francia y GSK del Reino Unido, los fabricantes más grandes de vacunas por ventas, están colaborando en una vacuna que se espera que este lista el próximo verano.

Los gobiernos y otras organizaciones públicas han puesto más de 12,000 millones de fondos para desarrollo y manufactura en las seis favoritas del mundo occidental, según Médecins Sans Frontières (MSF). Mientras que Pfizer no ha recibido financiamiento para investigación del gobierno de EU, su asociada alemana obtuvo 475 millones de euros del gobierno alemán y del Banco Europeo de Inversiones, y el gobierno estadounidense aceptó pagar casi 2,000 millones de dólares por la producción y distribución de 100 millones de dosis.

Gavi dijo el viernes que recaudaron más de 2,000 millones de dólares de gobiernos y de la fundación de Bill y Melinda Gates para financiar vacunas contra el Covid-19 para países con ingresos bajos y medianos, pero se necesitarían al menos 5,000 millones de dólares más el próximo año.

La velocidad con la que estas vacunas se desarrollan ha levantado preocupaciones de que los ensayos se hayan tomado atajos para apresurar los ensayos. Sin embargo, los expertos dicen que a las vacunas candidatas se les han hecho pruebas de seguridad y eficacia en grandes ensayos internacionales, y que se puede confiar en los reguladores de medicamentos. Kate Elder, una asesora senior de políticas de vacunas en MSF dijo: “Podemos confiar en que estas estrictas autoridades regulatorias completen los chequeos y balances necesarios para asegurar la seguridad”.

La historia de las vacunas empezó con una en contra de la viruela, introducida por Edward Jenner en 1796, después de que observó que las lecheras que habían tenido viruela bovina nunca se contagiaron de viruela. Jenner tomó material de una herida de viruela vacuna de la mano de una lechera y la inyectó en el brazo del hijo de nueve años de su jardinero, en 1980, el mundo se declaró libre de viruela.

Por años, el desarrollo de vacunas nuevas ha estado en las manos de unas cuantas compañías farmacéuticas grandes: Merck, Pfizer, Johnson & Johnson, GSK y Sanofi. Pero un número de firmas locales, como el India’s Serum Institute, producen vacunas de forma más barata.

Las vacunas tienden a ser más difíciles de fabricar que los medicamentos tradicionales. Montar las instalaciones herméticamente selladas necesarias cuesta entre 10 millones de dólares y 100 millones de dólares, según la IFPMA.

Porque muchas vacunas de la infancia se administran solo una vez y duran para toda la vida, el mercado global de vacunas, con ventas del año pasado de 32,500 millones de dólares, es pequeño comparado con el mercado de fármacos de 880,000 millones de dólares, según Evaluate Pharma. Alrededor de 116 millones de niños se vacunan en todo el mundo cada año, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), y esto ayuda a prevenir hasta tres millones de muertes.

El precio de las vacunas varía mucho. Una dosis de una vacuna simple contra el tétanos puede costar tan poco como $80 en los países más pobres, mientras que una dosis de la vacuna séxtuple DTaP-HepB-Hib-IPV, que se le da a los niños para protegerlos contra la difteria, tétanos, pertussis, hepatitis B, polio e influenzae Haemophilus tipo B (Hib), puede costar 92 dólares en EU.

Las vacunas en desarrollo más prometedoras

El producto mejor vendido de Pfizer, el fabricante de Viagra, fue su vacuna contra la neumonía, Prevnar 13, hizo que sus ganancias anuales fueran de casi 6,000 millones de dólares. La vacuna cuesta alrededor de 227 dólares por dosis en EU y se requieres cuatro dosis. 

Los precios para las futuras vacunas contra el Covid-19 son desde tres a cinco dólares por una dosis de AstraZeneca y 10 dólares por una de Johnson & Johnson, con el fundamento de no generar ganancias por la pandemia actual, hasta 19.50 dólares por una inyección de Pfizer y 37 dólares por una de Moderna. 

Un problema separado es superar el creciente escepticismo por las vacunas alrededor del mundo. Elder de MSF dijo: “En 2019, la OMS nombró a la indecisión con las vacunas como una de las 10 amenazas más grandes a la salud global. Aquí en EU, una encuesta reciente mostró que más de la mitad de la gente no se pondría una vacuna contra el Covid-19”. 

Pero afrontar el escepticismo será un problema del futuro: primero los gobiernos necesitan desesperadamente las vacunas.