El futuro de Lewis Hamilton envuelto en dudas a medida que se acerca la nueva temporada de la F1
Lewis Hamilton dejó de usar sus redes sociales. Foto: Kamran Jebreili/Reuters

Tras el tumultuoso clímax de la temporada 2021 de la Fórmula 1, que terminó con mucho ruido y pocas nueces, el continuo silencio de Lewis Hamilton es lo que ha definido el invierno. Con la nueva temporada acercándose rápidamente, el futuro del piloto británico en la F1 sigue siendo una incógnita y aparentemente indeciso. Mientras la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) investiga lo que ocurrió en Abu Dabi, la ausencia de Hamilton se cierne sobre el deporte, y su silencio lo dice todo.

El siete veces campeón del mundo de la F1, pero derrotado en circunstancias controversiales en el final de la temporada en Yas Marina por Max Verstappen de Red Bull, Hamilton dejó Abu Dabi enojado y desilusionado. El piloto creía que la carrera estaba manipulada a favor de Verstappen y quedó tan decepcionado con la forma en que se desarrolló, que perdió la confianza en que se aplicaran las reglas de forma justa. Su director de Mercedes, Toto Wolff, confirmó poco después que su futuro en la F1 era incierto.

Del mismo Hamilton no ha surgido casi nada desde que felicitó a Verstappen inmediatamente después de esa carrera. Prácticamente no se le ha visto en público y su uso habitualmente exuberante de las redes sociales cesó por completo.

Considerando su naturaleza competitiva, su capacidad para superar y seguir adelante después de los contratiempos, resulta difícil imaginar que Hamilton permita que este acontecimiento, aunque sea de proporciones aplastantes, desbarate su intento de conseguir su octavo título este año.

Las personas con información privilegiada sobre la F1 se muestran cautelosamente optimistas respecto a que efectivamente regresará, pero para que se tome esa decisión será crucial que el piloto de 37 años confíe en la aplicación justa y transparente de las normas. Hamilton y muchos de los aficionados a este deporte, también desilusionados por lo ocurrido en Abu Dabi, exigen igualdad de condiciones.

Recuperar la confianza en la gestión del deporte parece ser primordial y la investigación que realiza la FIA es fundamental para ello. En el centro de la investigación se encuentran las acciones del director de carrera Michael Masi, cuyo futuro pende de un hilo. Verstappen rebasó a Hamilton para lograr la victoria en la última vuelta después de que Masi improvisó decisiones en torno a las reglas con el fin de garantizar que la última carrera de la temporada no terminara detrás del carro de seguridad. El resultado fue la consternación, la confusión y, a pesar de que Verstappen era un digno campeón del mundo, el disgusto y la decepción de muchos por cómo ocurrió todo.

Fuentes dentro de la FIA insisten en que el órgano rector del deporte está investigando de forma imparcial, siguiendo un análisis exhaustivo para determinar exactamente si se siguieron las reglas. No obstante, aún se avecinan cambios. Peter Bayer es el nuevo director de la FIA, que dirige la investigación, y elaborará propuestas de cambios que presentará a los equipos.

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Max Verstappen celebra tras ganar el título mundial en Abu Dabi. Foto: Chine Nouvelle/SIPA/REX/Shutterstock

La semana pasada admitió que existía la “posibilidad” de que se sustituyera a Masi. Sin embargo, todo parece indicar que se trata de algo poco probable. Sin duda, al menos parece que existe un acuerdo generalizado en todo el paddock, dentro de la FIA y confirmado por Bayer, de que Masi ya no puede hacer el trabajo solo y necesitará asistentes para reducir la carga.

Igualmente, existe un consenso sobre la necesidad de revisar las reglas del carro de seguridad, para dejar un protocolo claro de cómo se utilizaría en caso de que, como desean los equipos, las carreras no terminen bajo el carro de seguridad y que se elimine la posibilidad de que los directores de equipo presionen al director de carrera en directo a través de la radio mientras se desarrollan los acontecimientos. La indecorosa impresión de que las protestas de los jefes de Mercedes y Red Bull influyeron en Masi en Abu Dabi no favoreció a la F1 a los ojos de muchas personas que se limitaron a ver a los pilotos y no a sus jefes pelear.

Mercedes también permanece en silencio sobre el tema, concentrándose en su nuevo auto, aunque el equipo sintió el dolor de Hamilton con la misma sensación punzante de injusticia y, sin duda, ellos también tendrán grandes expectativas de que la FIA no solo presente una clara revisión de lo que ocurrió en Abu Dabi, sino, lo que resulta más importante, que las propuestas de Bayer constituyan un proyecto para evitar que se repitan los hechos. Una ambición que todos deberían compartir, para que el deporte ponga fin a lo que ocurrió en 2021.

El 14 de febrero, la FIA presentará sus conclusiones a los equipos en la reunión de la comisión de la F1 y se espera que las haga públicas poco después. Sin embargo, si la FIA no lo hace, esto podría indicar que todavía existen serias discrepancias por parte de algunos participantes.
Cuatro días después de la comisión de la F1, Mercedes lanzará su nuevo auto el 18 de febrero, fecha en la que se espera que presenten a Hamilton junto a él, si es que ya tomó una decisión.

Cuando finalmente ponga fin a su silencio, es de esperar que confirme que efectivamente seguirá corriendo. Resulta difícil no imaginar que, después de todo, sentirá que tiene asuntos pendientes de resolver, pero por ahora toda la presión y el escrutinio recaen firmemente en la FIA.

Tal vez esta es la prueba de gobierno más grande y de más alto perfil a la que se ha enfrentado la organización en más de una década, por lo que necesita firmemente hacerlo bien y no solo por el bien de Hamilton.

La confianza en la capacidad de este deporte de ofrecer carreras justas se vio gravemente cuestionada en Abu Dabi, y la restauración de la misma servirá para apaciguar a los aficionados que sentían que se había antepuesto el entretenimiento y el espectáculo por encima del juego limpio. La reputación del deporte se vio manchada y, antes de que se gire un volante con enojo este año, es preciso poner fin al escándalo en torno a 2021.

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