Black Francis, líder de Pixies: ‘¿Kim Deal? Siempre seremos amigos, pero nada es para siempre’

Come on Pilgrim es el mejor álbum debut de cualquier persona, de todos los tiempos. Debatan.

Estoy parcialmente de acuerdo, al menos para parecer humilde. Pero en vista de que no soy tan humilde… escuchaba Murmur de REM mucho antes de Come on Pilgrim y eso me influyó enormemente como compositor. Voy a mostrarme arrogante y decir: éramos incluso mejores que Murmur.

He tenido muchas discusiones en bares en las que he defendido mi opinión de que preferiría el catálogo de Frank Black que el de Pixies. ¿De cuál estás más orgulloso?

Supongo que me siento más orgulloso del catálogo de Pixies porque es la razón por la que me conocen. Me gusta el paradigma de una banda real en la que todo tiene que pasar por un fuerte filtro con una cierta cantidad de compromiso y humildad. Eso puede ser algo difícil de manejar cuando eres un joven músico de rock engreído y todavía idiota.

¿Cómo fue actuar con David Bowie?

Estaba muy nervioso. Estaban todos esos grandes, como Robert Smith, Sonic Youth y Lou Reed, así que sin duda me sentí el más novato. Pero Bowie y su banda fueron muy amables y atentos. Era su cumpleaños número 50, ¿y qué le puedes regalar a alguien así por su cumpleaños? Así que volví a grabar (el tema de Bowie) Fashion, pero utilizando la letra original, que según yo entendía era “fascista”. Mi amigo John Flansburgh, de They Might Be Giants, llevó algunos músicos a un estudio de grabación en Nueva York el día que canté con Bowie. Quemé dos copias: una que probablemente todavía la tiene mi exesposa, y la otra copia se la regalé al cumpleañero.

¿Qué es lo más extraño que has visto?

Antes tenía un perro que estaba castrado, por lo que no tenía testículos. Y tenía un gato que también estaba castrado, por lo que no tenía mucha energía sexual. Solían pasar el rato en mi cama conmigo, y muchas veces, cuando me despertaba, el gato le estaba haciendo una felación al perro. No es precisamente lo que uno quiere ver antes de tomar su café matutino. No diré sus nombres porque no quiero avergonzarlos. Ellos leen toda mi prensa.

En Pixies nadie habla nunca durante un concierto, ni siquiera para decir gracias. ¿Cuál es el motivo?

No tengo nada en contra de la gente que habla entre canciones. Simplemente no soy muy bueno en eso. Te vuelves muy cohibido cuando alguien afina su guitarra o hay una pausa en el espectáculo. Te pone nervioso, así que divagas y haces chistes tontos al micrófono. Escuché las primeras grabaciones; la mayoría de las veces no se entendía lo que estaba diciendo, y si lo entendías, era una tontería, así que simplemente me sentía como un idiota. Kim (Deal, exbajista de Pixies) era mucho mejor para hablar con el público, pero cuando volvimos a estar juntos, perdió la costumbre. Ahora es un mejor lugar psicológico para todos: para mí, para el espectáculo, para la reverencia de la música y la reunión de la gente.

¿Qué haces para seguir gritando noche tras noche? ¿Alguna vez te quedaste sin voz?

Cuando era más joven, solía perder un poco la voz, así que tomé clases de canto con un tipo de ópera en Los Ángeles, que me enseñó un viejo truco del bel canto de la ópera: aparentar que estás dando el 100% cuando en realidad estás dando el 40%. Si estás usando un traje de vikingo operístico durante cuatro horas, es mucho tiempo para estar cantando. Lo mismo ocurre en una banda de rock. Aprendí a disimular la apariencia de moderación.

Por favor, explícanos la inspiración que hay detrás de Monkey Gone to Heaven.

Supongo que está vagamente inspirada en el denominado dilema humano de la existencia, nuestro problema existencial acerca de si podemos sobrevivir como raza. Pero está contada sin ningún tipo de intención o juicio y mezcla algunas cosas bíblicas muy vagas y cantadas porque, ya sabes, “El diablo es seis y Dios es siete” rima con cielo. Es una rima infantil con imágenes populares mitológicas. En términos evolutivos excesivamente simplificados, descendemos de los simios y los monos, por lo que son los animales con los que más nos identificamos metafóricamente debido a este parentesco evolutivo. Por eso no se trata de un pájaro o un pez que haya ido al cielo.

¿Crees en Dios?

Bueno, como mi padre solía responder esta misma pregunta: probablemente podríamos hablar de eso todo el día.

Siempre me han interesado las imágenes de ovnis que aparecen en toda su obra. Recuerdo una entrevista en la que hablaste de un avistamiento de ovnis en las Grandes Llanuras americanas cuando eras un niño.

La mejor referencia que puedo dar es una cara B de Frank Black and the Catholics llamada Le Cigare Volant, que significa cigarro volador. Existe un delicioso vino californiano llamado Le Cigare Volant, muy similar al Châteauneuf-du-Pape, mi vino favorito, aunque ya no bebo. Si bebes, te recomiendo Le Cigare Volant, del norte de Santa Bárbara. En fin: el cigarro volador es la clásica descripción de los objetos voladores no identificados, y yo observé un cigarro volador con mi hermano cuando éramos bastante jóvenes. Fue a plena luz del día, se movía muy despacio, estaba muy cerca de nosotros y no tenía marcas. Cuento la historia en términos más poéticos en una canción.

¿Qué pensarían de tu música los visitantes de otro planeta?

Supongo que probablemente deducirían mucha información sobre quién era yo como espécimen de mi especie. Averiguarían que tan viejo soy, mi sexo y probablemente mi edad. Pero supongo que la música les resultaría un poco más inquietante.

En los últimos años, ¿has descubierto alguna música que realmente te haya inspirado?

El nuevo álbum de Sleaford Mods que salió el año pasado es absolutamente genial. Lo escucho mucho.

¿Cuál es tu álbum favorito de The Fall?

I Am Kurious Oranj.

Tuve la suerte de asistir a dos de tus conciertos en la Brixton Academy cuando reformaste Pixies en 2004. Quizás el mejor ambiente de cualquier concierto al que haya ido, ¿cuáles son tus recuerdos?

El primer recuerdo que se me ocurre es que íbamos a tocar todos nuestros grandes números, incluyendo Hey, pero no estaba muy convencido de que estuviera tocando el riff de la guitarra de forma correcta. Afortunadamente, Bob, el hermano de Joey Santiago (guitarrista de Pixies), que ha tocado con Pixies, estaba en el primer concierto y dijo: “Sí, es porque lo estás tocando mal”, y me enseñó cómo tocarlo. Así que estoy agradecido con Bob por guiarme en lo que era una cosa potencialmente pequeña, pero también algo grande.

¿Conoces algún chiste bueno?

Aquí hay uno que aprendí de mi abuelo. ¿Cuál es la diferencia entre un pato? Una pata es la misma. Yo tampoco lo entiendo.

¿Qué es un debaser?

Creo que significa: alguien que degrada. Un debaser. Fue un intento de introducir una nueva palabra en el léxico, pero creo que no tuvo éxito, de lo contrario habría escuchado sobre ella.

Una vez Kim Deal me regaló a mis 16 años un par de zapatos tuyos después de un concierto en 1989. ¿Quieres que te los regrese?

Agradezco la oferta, pero probablemente tienen valor para la persona que los tiene. ¡Es posible que ya sean vintage! Una vez un vendedor de ropa japonés me ofreció 500 dólares al contado por mis tenis, pero en ese momento tenían más valor para mí como par de zapatos. Uno no camina por la gran ciudad con los pies descalzos. Yo dije: “Necesito mis zapatos. Lo siento”.

¿Eres amigo de Kim Deal o se odian?

Quiero decir que siempre somos amigos. Nadie puede estar en una banda y no ser amigos. No recuerdo cuándo fue la última vez que hablé con ella, y no soy muy bueno con las tarjetas de Navidad. Realizamos muchas giras juntos, escribimos juntos e hicimos todos esos discos juntos… pero nada es para siempre. En cierto modo, estás condenado si lo haces y condenado si no lo haces. Si no regresan, la gente dice: “Oh, eso es un poco triste. ¿Cuáles son tus recuerdos? ¿De qué te arrepientes?” Y si no rompen y siguen juntos, todo el mundo dice: “Oh, ¿todavía están juntos, haciendo lo mismo de siempre?”

¿Alguna vez escribiste una canción que te hiciera pensar: “Cómo voy a superar eso”?

Sí, claro. Cada vez que escribo una canción con la que estoy satisfecho. Compuse cerca de 40 canciones para el disco actual de Pixies. Un par de veces incluso me sorprendí a mí mismo, pero creo que es una experiencia común en la composición. Escribes algo con lo que te sientes satisfecho y tu primer pensamiento es: “Acabo de escribir la mejor canción que jamás he escrito”. Pero decir “nunca volveré a escribir una canción tan buena” sería toda una epifanía, así que no me atrevo a hacer ese tipo de afirmación.

¿Alguna vez has tenido ganas de decir: “Al diablo con esta basura, me iré a vivir a una cabaña en el bosque”?

Claro, todos tenemos nuestros pensamientos fugaces de: nunca más quiero hacer lo que hago todo el tiempo. Creo que tenemos buenas intenciones cuando nos hablamos a nosotros mismos de esa manera, pero es sencillo tener este tipo de epifanías que no necesariamente son tan acertadas.

¿Dónde está tu mente?

Se discute menos el tema de la mente que el de la existencia del alma. La mente parece ser finita, con un principio, un medio y un final, y después deja fantasmas y residuos. La mente no está en tu cerebro, sino que tu cerebro la reporta, así que la noción es que en realidad no es tu cerebro, pero tampoco es tu alma ni tu supuesto arte.

Se contó a Rich Pelley.