Alexei Mordashov: El hombre más rico de Rusia ahora es un objetivo de las sanciones de la Unión Europea

Es el oligarca ruso que intervino para mantener a flote la empresa de viajes Tui, aportando dinero en efectivo cuando el turismo internacional se paralizó durante la pandemia.

Sin embargo, Alexei Mordashov -que posee un tercio del operador turístico más grande de Europa y es su mayor accionista individual- se puede convertir en una especie de carga para Tui, cuyas acciones cotizan en Londres, después de que la Unión Europea lo agregó a su lista de sanciones en la noche del lunes.

Aunque Mordashov no ha sido sancionado en el Reino Unido, ahora sus intereses comerciales en la región se verán gravemente limitados.

La Unión Europea ha expresado varias preocupaciones sobre Mordashov: afirma que el Rossiya Bank, en el que tiene intereses financieros, es el “banco personal” de altos funcionarios rusos que se beneficiaron de la anexión de Crimea. El bloque también señaló que cree que las empresas de medios de comunicación en las que invierte han contribuido a desestabilizar Ucrania a través de emisoras de televisión prorrusas.

Mordashov, el hombre más rico de Rusia, de 56 años, pasó de tener un origen humilde como hijo de obreros de una fábrica en la ciudad de Cherepovets, a 482 kilómetros al norte de Moscú, a convertirse en el director ejecutivo de la empresa siderúrgica y minera más grande de Rusia, Severstal.

Se quedó a un lugar de figurar entre las 50 personas más ricas del mundo en 2021, según la lista de multimillonarios de la revista Forbes, ocupando el lugar 51.

En su momento, se calculó que su patrimonio personal ascendía a la astronómica cifra de 29 mil 100 millones de dólares, y Mordashov sigue siendo el accionista mayoritario de Severstal, la mayor empresa siderúrgica de Rusia.

Anteriormente, Severstal publicó informes en los que se detalla cómo algunos de sus productos de alta resistencia son utilizados en la fabricación de equipos de defensa rusos, incluyendo vehículos blindados. Mordashov preside su empresa matriz, Severgroup, una empresa de inversión privada, y tiene intereses que abarcan desde las telecomunicaciones hasta la minería del oro, los medios de comunicación y la ingeniería.

Además de sus amplios intereses empresariales, Mordashov posee el tipo de accesorios que no le pueden faltar a ningún multimillonario que se respete, como un jet privado y al menos un yate.

Tal vez, apropiadamente para un accionista de una empresa de viajes, se informa que actualmente está disfrutando de unas vacaciones lejos del conflicto o del invierno europeo. Los observadores aéreos rastrearon la semana pasada el jet privado Bombardier Global 6000 del multimillonario, que viajó de Seychelles a Moscú, aunque no incluyeron datos sobre quién estaba a bordo. El jueves pasado, el presidente Vladimir Putin invitó a algunos de los empresarios más destacados de Rusia a una reunión en el Kremlin.

El jet de Mordashov -que cuenta con una gran cabina, capaz de transportar a 14 pasajeros, y cuya autonomía le permite viajar de Londres a Beijing sin escalas- no pasó mucho tiempo en Rusia antes de volar de regreso a Seychelles.

Mientras tanto, uno de los yates del multimillonario, el Nord, de 142 metros, que comparte su nombre con la empresa de extracción de oro de Mordashov, pasa el invierno en el océano Índico.

Construido por el astillero alemán Lürssen y entregado en 2021, la embarcación costó aproximadamente 500 millones de dólares y cuenta con un diseño interior italiano, así como con un helipuerto. La apasionante descripción del astillero en su página web explica que el barco fue “diseñado con un objetivo en mente: debe provocar fuertes emociones en todos los observadores, no solo por su tamaño, sino por el propio diseño”.

En un momento de fuertes emociones, el jefe de Tui, Fritz Joussen, intentó tranquilizar al personal de la empresa de viajes, insistiendo en que la implicación de Mordashov no suponía ningún problema.

“El Sr. Mordashov ha sido accionista de Tui durante alrededor de 15 años y ha mantenido cerca de un tercio de nuestra empresa desde que la apoyó durante la crisis del corona”, escribió Joussen en un memo dirigido al personal.

“Nuestra empresa es dirigida por la junta directiva, como cualquier sociedad anónima alemana, y no por los accionistas o la junta de supervisión. Por tanto, suponemos que cualquier restricción o sanción contra el señor Mordashov no supondrá ninguna consecuencia negativa duradera para nosotros como empresa”.

Mordashov comenzó a invertir en Tui en 2007 y desde 2016 es miembro de la junta de supervisión de la empresa. Durante 2021 compró en repetidas ocasiones acciones, gastando habitualmente millones, y elevando la participación actual de su familia al 34%.

En un comunicado, Mordashov indicó que no entendía cómo su inclusión en la lista de sanciones de la Unión Europea ayudaría a resolver el conflicto en Ucrania, afirmando: “No tengo absolutamente nada que ver con el surgimiento de la actual tensión geopolítica”.

Describiéndose a sí mismo como una persona apartada de la política, pidió el fin de la guerra de Rusia en Ucrania, a la que calificó como una “tragedia de dos pueblos hermanos”.

“Es terrible que mueran ucranianos y rusos, que la gente sufra penurias, que colapse la economía. Debemos hacer todo lo necesario para que se encuentre una salida a este conflicto en un futuro muy cercano y se detenga el derramamiento de sangre”, dijo.