El hombre que rescató a 25 personas de la devastada ciudad de Mariúpol
Los residentes de la ciudad ucraniana de Mariúpol, que lleva semanas bajo el ataque de Rusia, han sufrido cortes del suministro de gas, agua y energía. Foto: Anadolu Agency/Getty Images

El exdirector de proyectos Roman Kruglyakov dejó su ciudad natal de Mariúpol para quedarse en un pueblo cercano al comienzo de la guerra. Durante tres días, a mediados de marzo, regresó en tres ocasiones a la ciudad devastada para recoger a sus familiares atrapados. Llevaban más de dos semanas sin señal telefónica.

Entrar al lugar donde creció fue como entrar al infierno, comenta.

“La gente salía de los edificios de varios pisos de departamentos quemados para cocinar comida en fogatas en la calle”.

“Iba manejando y había trozos de proyectiles y cables de luz y cadáveres por todas las calles”.
Kruglyakov quería recoger a las dos madrinas de sus hijos y a sus familias. La primera madrina se sorprendió al verlo, pero rápidamente recogió las pertenencias de su familia. “Nunca pensó que alguien arriesgaría su vida por ella”.

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Algunos civiles atrapados en Mariúpol están demasiado asustados de lo que les espera como para salir de la ciudad. Foto: Anadolu Agency/Getty Images

Después recogió a su madre, cuyo edificio de departamentos era el único de esa calle que había escapado de los bombardeos, y los sacó de ahí.

Después regresó por la otra madrina, que tenía un bebé de dos meses, sin embargo, su esposo estaba demasiado asustado como para salir de su departamento. “Según entendí, como personas que habían pasado por tanto, simplemente estaban demasiado asustados para siquiera salir”.

Lanzaron una moneda pero les indicó que se quedaran. “Les di dos minutos para que lo pensaran porque no puedes dejar el carro por mucho tiempo, la gente podría robar los neumáticos. La metralla de las armas perforó prácticamente todos los neumáticos”. Al final, la madrina y su esposo se negaron a salir.

Entonces, se dirigió a un refugio en una escuela local y recogió a una familia con niños a petición de otros parientes que vivían fuera de Mariúpol.

“Fui a sacar a la gente de los sótanos, pero no querían salir porque estaban muy acostumbrados a estar sentados ahí. Les asustaba lo que les esperaba afuera de las paredes de concreto. Los destruían todas las noches. Tuve que usar la fuerza para sacarlos. Les mentí, todo lo que se me ocurrió, les dije ‘hay comida caliente esperándolos, electricidad, señal de teléfono celular’, les mentí y no me avergüenzo. Creo que las personas que saqué corren menos peligro que dentro de la ciudad”.

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El experiodista Roman Kruglyakov comenta que para los residentes de Mariúpol es muy difícil llegar a territorio ucraniano. Foto: Anadolu Agency/Getty Images

Mariúpol se encuentra actualmente rodeada por completo por las fuerzas rusas, dijo Kruglyakov, quien comentó haber visto soldados rusos en cada esquina de las zonas por las que condujo.

“Cuando te encuentras con estas personas están completamente desoladas. Me dicen que se quedarán en los sótanos y que esperarán el convoy humanitario y que serán evacuados a Ucrania. Pero entiendo que eso nunca ocurrirá”.

“No llegará. Ni ahora ni en los próximos días o meses, no llegará”.

Kruglyakov llevó a sus familiares a Melekine, una ciudad costera vecina recientemente ocupada por los rusos que es el primer lugar seguro para los refugiados que salen de Mariúpol.

“Las afirmaciones de los medios de comunicación ucranianos de que están evacuando a las personas a [la ciudad de] Zaporizhzhia son engañosas. La gente tiene que caminar 86 kilómetros hasta la vecina [ciudad de] Berdyansk, a menos que sean de los pocos que tienen carro”.

“De las 25 personas que saqué, no había ninguna que quisiera evacuar a Rusia, todos quieren ir a Zaporizhzhia, pero no todos pueden hacerlo”

“Si se ampliara la ruta de evacuación hasta Manhush”, comentó sobre otra ciudad más cercana a Mariúpol, “entonces la gente podría caminar hasta Manhush”.

Él y su esposa no regresarán a Mariúpol, pero es posible que las generaciones mayores de su familia lo hagan si se restablece el gas, el agua y la electricidad. Todas sus propiedades, excepto dos, quedaron destruidas o gravemente dañadas.

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