Kate Winslet dona 17 mil libras para pagar la luz del sistema de soporte de una niña
El ayuntamiento había advertido a la familia de Freya Hunter, que tiene parálisis cerebral y depende del oxígeno, sobre las elevadas facturas que se avecinaban.
El ayuntamiento había advertido a la familia de Freya Hunter, que tiene parálisis cerebral y depende del oxígeno, sobre las elevadas facturas que se avecinaban.
La actriz Kate Winslet donó 17 mil libras a una mujer que se enfrenta a una factura de electricidad extremadamente cara para el funcionamiento del equipo de soporte vital de su hija.
El ayuntamiento de Clackmannanshire, en Escocia, advirtió a Carolynne Hunter que su factura de electricidad podría alcanzar la elevada cifra el próximo año.
Su hija Freya, de 12 años, padece una grave parálisis cerebral y depende de la recepción de oxígeno para tratar sus problemas respiratorios crónicos.
Hunter comentó que se sintió abrumada cuando la actriz de Titanic intervino después de enterarse de su lucha en la cadena BBC.
Winslet donó 17 mil libras a la página de GoFundMe de la familia y los contactó para desearles lo mejor.
Hunter, de 49 años, comentó: “Nuestro viaje como familia ha sido muy traumático y me siento acabada en este momento de mi vida”.
“Cuando me enteré del dinero simplemente rompí a llorar, pensé que ni siquiera era real. Todavía sigo pensando: ¿es esto real?”.
La familia Hunter reside en una vivienda popular en Tillicoultry, que es grande y permite alojar el equipo de Freya, pero que no es eficiente desde el punto de vista del consumo energético.
En la actualidad, el funcionamiento del equipo y la calefacción de la casa les cuesta 6 mil 500 libras al año, aunque Hunter señaló que desconectó la calefacción de la mayoría de las habitaciones con el fin de ahorrar dinero.
Aunque trabaja de tiempo completo y tiene un salario moderado, Hunter no recibe las mismas ayudas que las personas de bajos ingresos.
Explicó que le preocupaba que los posibles cortes de electricidad en invierno en caso de que se redujera el suministro de gas –como consecuencia de la guerra de Rusia contra Ucrania– pudieran poner en peligro el cuidado de Freya. Además de la parálisis cerebral, Freya necesita recibir oxígeno debido a sus problemas respiratorios, particularmente durante la noche.
La familia requiere la ayuda de al menos dos enfermeras del Servicio Nacional de Salud (NHS) o del personal de apoyo autogestionado, es decir, un tipo de asistencia social. El personal monitorea la frecuencia cardíaca y los niveles de oxígeno de Freya, y realiza frecuentes succiones para mantener sus vías respiratorias despejadas.
En los últimos meses, la habitación de Freya era la única que contaba con calefacción para que tanto ella como el personal de asistencia médica estuvieran cómodos, no obstante, Hunter comentó que habían tenido que reducirla.
“Todavía nos estamos congelando y aún no estamos a temperaturas bajo cero“, señaló. “Le digo encarecidamente al personal que no ponga la calefacción a menos que sea necesario”.
“El ayuntamiento ha puesto paneles solares para ayudar con los apagones, pero no creen que eso vaya a ayudar con la factura”.
La familia es una de las millones de personas que en todo el Reino Unido se preparan para un invierno difícil en el que las facturas de la electricidad aumentarán, y que los expertos predicen que sumirá a muchas personas en la miseria y provocará un aumento en el número de muertes evitables.
Winslet, que vive en un pueblo de West Sussex, es patrocinadora de Family Haven, una organización benéfica creada para ayudar a las familias desfavorecidas y vulnerables que viven en Gloucestershire.
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