Aumenta el temor por la seguridad de dos activistas ambientalistas mexicanos desaparecidos

Aumenta el temor por la seguridad de dos activistas mexicanos por los derechos sobre la tierra que se encuentran desaparecidos después de que su vehículo fuera encontrado lleno de impactos de bala.

Ricardo Arturo Lagunes Gasca, abogado de derechos humanos y ecologista, y Antonio Díaz Valencia, líder de la comunidad indígena de Aquila, en Michoacán, fueron vistos por última vez en la noche del domingo cuando se dirigían al vecino estado de Colima después de haber asistido a una reunión comunitaria contra la actividad minera.

Se presume que Lagunes, de 41 años, y Díaz, de 71, fueron secuestrados después de que la camioneta Honda blanca fuera encontrada abandonada a un lado de la carretera.

Lagunes, un destacado ecologista y abogado defensor de los derechos sobre la tierra que se ha enfrentado a múltiples amenazas de muerte desde hace años, representa a la comunidad de Aquila contra unas explotaciones mineras que han generado innumerables daños medioambientales, de salud y sociales.

Su hermana comentó a la prensa local que su hermano había trabajado en favor de los derechos humanos desde los 15 años. “En Aquila, él acompañaba a los miembros de la comunidad en las negociaciones con la empresa minera. Había mucha tensión con las elecciones locales y en ese contexto desapareció”.

Las unidades estatales de personas desaparecidas emitieron las alertas después de que decenas de grupos de defensa de los derechos, colegas y familiares exigieran a las autoridades que tomaran medidas urgentes para encontrar a los dos hombres.

Miles de personas firmaron una petición en la que se pedía a las autoridades que rescataran a los hombres, entre temores de que ya pudiera ser demasiado tarde.

México es uno de los países más peligrosos del mundo para los defensores del medio ambiente y de los derechos sobre la tierra, donde grupos delictivos y autoridades corruptas amenazan y atacan a las comunidades con casi total impunidad. En 2021, 54 defensores de los derechos sobre la tierra fueron asesinados y otros 19 desaparecieron, según datos de Global Witness, el organismo internacional de vigilancia que hace un seguimiento de las violaciones relacionadas con la energía, la minería y otros proyectos de extracción.

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha reprendido en repetidas ocasiones a los defensores de los derechos humanos –y a otras personas que se muestran críticas con sus políticas– durante sus conferencias de prensa diarias, lo cual, dicen los críticos, ha fomentado una cultura de hostilidad y violencia hacia los líderes de la sociedad civil.

“Con un 95% de impunidad en México y un presidente que critica y denigra a los defensores de los derechos humanos, la gente hace su trabajo sabiendo que ellos o alguien a quien quieren podría ser la próxima víctima”, comentó Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración. “Ricardo es un defensor muy apreciado que ha trabajado tanto en cuestiones de migración como medioambientales en México desde hace más de una década, por lo que todo el sector está esperando desesperadamente información y rezando por que él y Antonio estén a salvo”.

Lagunes ayudó anteriormente a comunidades indígenas de los estados de Chiapas, Oaxaca, Yucatán y Campeche a ganar batallas legales por la tierra, y también trabajó en la defensa de los migrantes y los refugiados.

Amnistía Internacional instó a las autoridades mexicanas a llevar a cabo una investigación inmediata que tomara en consideración la labor de los hombres como defensores de la tierra.