El Congreso interroga al CEO de TikTok mientras Biden considera la posibilidad de tomar medidas enérgicas en EU

El director ejecutivo de TikTok, Shou Zi Chew, se vio obligado a defender la relación de su empresa con China, así como las protecciones que ofrece a sus usuarios más jóvenes, en una tensa audiencia en el Congreso el jueves, que se llevó a cabo en medio de un intento bipartidista de prohibir por completo la aplicación en Estados Unidos por motivos de seguridad nacional.

La audiencia de la mañana del jueves tuvo un comienzo intenso, en el que los miembros del comité insistieron en la conexión de Chew con los ejecutivos de la empresa matriz de TikTok, ByteDance, que según dicen ellos, tiene vínculos con el Partido Comunista de China. Los legisladores preguntaron con qué regularidad Chew estaba en contacto con ellos, y cuestionaron si la solución propuesta por la empresa, denominada Proyecto Texas (Project Texas), supondría una protección suficiente contra las leyes chinas que exigen a las empresas que pongan los datos de los usuarios a disposición del gobierno.

A los legisladores les preocupa desde hace tiempo el control de China sobre la aplicación, preocupaciones que Chew intentó disipar en repetidas ocasiones durante la audiencia. “Permítanme afirmarlo inequívocamente: ByteDance no es un agente de China ni de ningún otro país“, dijo en un testimonio preparado.

Sin embargo, las declaraciones de independencia de Chew se vieron socavadas por un artículo del periódico Wall Street Journal publicado pocas horas antes del inicio de la audiencia que indicaba que China se opondría firmemente a cualquier venta forzosa de la empresa. Respondiendo por primera vez a la amenaza del presidente estadounidense, Joe Biden, de imponer una prohibición nacional a menos que ByteDance venda sus acciones, el Ministerio de Comercio de China señaló que tal medida implicaría la exportación de tecnología desde China y, por tanto, tendría que ser aprobada por el gobierno chino.

Los legisladores también interrogaron a Chew sobre el impacto de la plataforma en la salud mental, en particular en la de sus jóvenes usuarios. El diputado republicano Gus Bilirakis compartió la historia de Chase Nasca, un chico de 16 años que murió por suicidio hace un año al pararse delante de un tren. Los padres de Nasca, que demandaron a ByteDance alegando que Chase fue “blanco” de contenidos no solicitados relacionados con el suicidio, comparecieron en la audiencia y se mostraron emotivos mientras Bilirakis contaba la historia de su hijo.

“Quiero agradecer a sus padres su presencia hoy aquí y que nos permitan mostrar esto”, indicó Bilirakis. “Señor Chew, su empresa destruyó sus vidas“.

Insistiendo en la preocupación por los usuarios jóvenes, la diputada Nanette Barragán interrogó a Chew sobre los reportes de que no deja que sus propios hijos usen la aplicación.

“¿A qué edad cree que sería apropiado que un menor utilizara TikTok?“, preguntó.

Chew confirmó que sus propios hijos no usaban TikTok, pero señaló que eso se debía a que en Singapur, ciudad en la que viven, no existe una versión de la plataforma apta para usuarios menores de 13 años. En Estados Unidos existe una versión de TikTok en la que el contenido está adaptado a usuarios menores de 13 años.

“Nuestro enfoque es ofrecer experiencias diferenciadas para distintos grupos de edad y dejar que los padres tengan conversaciones con sus hijos para que decidan qué es lo mejor para su familia”, explicó.

La comparecencia de Chew ante el comité de energía y comercio de la Cámara de Representantes, la primera de un director ejecutivo de TikTok, representa una gran prueba para el CEO de 40 años, que se ha mantenido en gran medida fuera de la atención pública.

A lo largo de la audiencia, Chew destacó el distanciamiento de TikTok del gobierno chino, iniciando su testimonio haciendo hincapié en su propia ascendencia de Singapur. Chew habló sobre el Proyecto Texas –una iniciativa para trasladar todos los datos de Estados Unidos a servidores del país– y señaló que la empresa eliminaría para finales de año todos los datos de los usuarios de los que se hicieran copias de seguridad en servidores ubicados fuera de Estados Unidos.

Algunos legisladores manifestaron que el Proyecto Texas era una iniciativa demasiado grande y que no resolvería con la suficiente rapidez las preocupaciones relativas a la privacidad de los datos en Estados Unidos. “Me preocupa que lo que proponen con el Proyecto Texas no tenga la capacidad técnica de ofrecernos las garantías que necesitamos“, indicó el republicano californiano Jay Obernolte, que es ingeniero informático.

En un momento determinado, el representante estadounidense Tony Cárdenas, demócrata por California, le preguntó directamente a Chew si TikTok es una empresa china. Chew respondió que TikTok tiene carácter mundial, que no está disponible en China continental y que su sede se encuentra en Singapur y Los Ángeles.

Neal Dunn, representante republicano de Florida, preguntó con similar aspereza si ByteDance ha “espiado a ciudadanos estadounidenses”, una pregunta que surgió en medio de los reportes de que la empresa accedió a información de periodistas en un intento de identificar qué empleados estaban filtrando información. Chew respondió que “espiar no es la forma correcta de describirlo“.

La audiencia se lleva a cabo tres años después de que TikTok fuera por primera vez objetivo formal del gobierno de Trump en 2020, que emitió una orden ejecutiva que prohibía que las empresas estadounidenses hicieran negocios con ByteDance. Biden revocó dicha orden en junio de 2021 bajo la estipulación de que el Comité de Inversión Extranjera de Estados Unidos realizara una revisión de la empresa. Cuando dicha revisión quedó estancada, Biden exigió que TikTok vendiera sus acciones de propiedad china o se enfrentara a su prohibición en Estados Unidos.

Este carácter bipartidista de la reacción negativa quedó reflejado varias veces durante la audiencia, y Cárdenas señaló que Chew “ha sido una de las pocas personas que ha unido a este comité”.

El testimonio de Chew, señalaron algunos legisladores, hizo recordar la comparecencia de Mark Zuckerberg en una audiencia en abril de 2018 en la que tuvo que responder por los problemas de privacidad de datos de su propia plataforma, respuestas con las que muchos legisladores se mostraron insatisfechos. Cárdenas comentó: “Nos sentimos frustrados con TikTok … y sí, usted sigue mencionando que existen problemas de la industria que no solo enfrenta TikTok, sino otros. Me recuerda mucho a (Mark) Zuckerberg … cuando él vino aquí dije que él me recordaba a Fred Astaire, un buen ejecutor con las palabras. Y usted está haciendo lo mismo hoy. Muchas de sus respuestas son un poco imprecisas, no son sí o no”.

Chew, exbanquero de Goldman Sachs que dirige la empresa desde marzo de 2021, advirtió a los usuarios en un video publicado en TikTok a principios de semana que la empresa atravesaba un “momento crucial”.

“Algunos políticos empezaron a hablar sobre la prohibición de TikTok“, comentó, y añadió que la aplicación ahora tiene más de 150 millones de usuarios activos mensuales en Estados Unidos. “Eso significa que casi la mitad de Estados Unidos utiliza TikTok”.

TikTok ha luchado contra los contratiempos legislativos desde que comenzó su meteórico ascenso en 2018. En la actualidad, la mayoría de los adolescentes estadounidenses afirma que utiliza TikTok: el 67% de las personas de entre 13 y 17 años indica que ha utilizado la aplicación y el 16% de ese grupo de edad señala que la utiliza “casi constantemente”, según datos del Pew Research Center.

Esto ha generado una serie de preocupaciones sobre el impacto de la aplicación en la seguridad de los usuarios jóvenes, ya que en la plataforma se difunden contenidos relacionados con autolesiones y trastornos alimenticios. TikTok también se enfrenta a demandas relativas a “retos” mortales que se volvieron virales en la aplicación.

TikTok introdujo algunas funciones en respuesta a estas críticas, como la limitación automática del tiempo de uso para los usuarios menores de 18 años.

Algunos críticos de la tecnología han afirmado que, aunque la recopilación de datos por parte de TikTok suscita preocupación, sus prácticas no difieren mucho de las de otras grandes empresas tecnológicas.

“Responsabilizar a TikTok y China suponen pasos en la dirección correcta, pero no basta con hacerlo sin responsabilizar a otras plataformas”, señaló en un comunicado Tech Oversight Project, una organización de defensa de las políticas en materia de tecnología.

“Los legisladores y los reguladores deberían aprovechar la audiencia de esta semana como una oportunidad para volver a comprometerse con las organizaciones de la sociedad civil, las ONG, los académicos y los activistas para acabar con todas las prácticas perjudiciales de las grandes empresas tecnológicas”.