Una artista evalúa demandar a la Real Academia de las Artes porque la acusó de ‘transfobia’
El trabajo de Jess de Wahls ya no está disponible en la tienda de regalos de la Real Academia luego de que las opiniones que expresó se consideraron transfóbicas.
El trabajo de Jess de Wahls ya no está disponible en la tienda de regalos de la Real Academia luego de que las opiniones que expresó se consideraron transfóbicas.
Una artista cuyo trabajo ya no estará disponible en la tienda de regalos de la Royal Academy después de que las opiniones que expresó en un blog se consideraron transfóbicas, dijo que está considerando emprender acciones legales contra la institución.
La Real Academia confirmó que el trabajo de bordados de Jess de Wahls ya no estaría disponible después de que una publicación de 2019, en la que describe sus puntos de vista sobre las políticas de identidad de género, fuera definida por la Real Academia como transfóbica.
En un comunicado en Instagram, la Real Academia dijo que los comentarios anteriores de De Wahls, que incluían el que ella no puede aceptar las “afirmaciones infundadas de las personas que en realidad son del sexo opuesto al que nacieron”, entran en conflicto con las (políticas de la Real Academia) de propia diversidad, la igualdad y los principios de inclusión.
De Wahls le dijo a The Guardian que está considerando emprender acciones legales. “No lo sé todavía, pero algo va a pasar. Tendrán que decir algo en algún momento. Si esperan que esto simplemente desaparezca, no desaparecerá”, dijo.
La artista también se negó a aceptar que negar que las mujeres trans son mujeres es un comentario transfóbico, y contestó: “Tiene que haber lugar para que la gente esté en desacuerdo respetuosamente; y el que yo no valide la identidad de alguien, para mí, lo siento, eso no es un crimen de odio”.
“No creo que una mujer trans sea una mujer. No creo que eso sea un mensaje de odio; creo que hay un espacio para que todos existan”.
El veterano activista por los derechos LGBT Peter Tatchell comentó: “Las mujeres trans son diferentes a otras mujeres, pero ser un tipo diferente de mujer es perfectamente válido y no justifica la negación de su identidad.
“Si una artista niega la identidad de los judíos, negros o gays, la mayoría de la gente diría que la Royal Academy haría bien en sacar sus obras de la tienda de regalos. Pero cuando Jess niega la identidad de las personas trans, ella y otros críticos de los y las trans dicen que tiene derecho a la libertad de expresión y que no debería ser penalizada. Esto huele a doble moral“, expuso Peter.
En la publicación del blog, De Wahls, conocida por sus bordados de inspiración feminista, habló sobre la autoexpresión no conformista de género de su propio padre, mientras expresaba su preocupación de que la política de género se haya vuelto demasiado “tribal”.
En el blog también argumentó que la política de género tenía un impacto perjudicial en los derechos de las mujeres y era similar a las restricciones y la censura que se ven en el lugar de nacimiento de De Wahls en la entonces Alemania oriental.
De Wahls cree que la decisión de la Real Academia fue influenciada por una campaña en línea de activistas, y dijo que el llamado a dejar de promover su trabajo se hizo después de que la institución recibió ocho correos electrónicos quejándose de sus puntos de vista.
La Real Academia no respondió a una solicitud de comentarios de The Guardian, pero en su publicación de Instagram la institución agradeció a quienes le habían llamado la atención sobre esas declaraciones. “Agradecemos que nos haga rendir cuentas sobre este tema y nos gustaría reiterar que apoyamos a la comunidad LGBTQ+”, se lee en el comunicado.
Algunos comentaristas y activistas han calificado la situación como un “caso de prueba para las leyes contra la discriminación” y una nueva forma de “macartismo”. De Wahls, quien se describe en su propio sitio web como “una pieza fundamental de la escena de las artes textiles internacionales”, dijo al programa Today de BBC Radio 4 que el problema “simplemente no desaparecerá”.
“Tengo la sensación de que dentro de esa institución hay cierta esperanza de que esto simplemente desaparecerá, lo cual es alucinante para mí”, recalcó. “Mi bandeja de entrada y los comentarios que he recibido del público en general son todo lo contrario”.
Se ha pedido a la Comisión de Igualdad y Derechos Humanos que investigue el asunto y determine si la decisión de la Real Academia infringe o no la Ley de Igualdad.