El ‘desdoblamiento virtual’ es alabado como un gran progreso en el estudio de documentos históricos después de que la tecnología de rayos X se utilizó para leer por primera vez una carta del Siglo XVII.
Una carta sin abrir de Jacques Sennacques a su primo Pierre Le Pers, virtualmente desplegada y leída por primera vez. Fotografía: Desbloqueo del archivo del Grupo de Investigación de Historia
Por primera vez en los estudios de documentos históricos, una carta cerrada de 1697 pudo ser leída por investigadores sin romper su sello.
La carta, que data del 31 de julio de 1697 y que el comerciante francés Jacques Sennacques en Lille envió a su primo Pierre Le Pers en La Haya, se cerró mediante un proceso por el que una hoja de papel se dobla para convertirse en su propio sobre. Forma parte de una colección de unas 2,600 cartas no entregadas que se enviaron de toda Europa a La Haya entre 1689 y 1706, de las cuales 600 permanecen cerradas.
El equipo internacional de investigadores de universidades como el MIT, King’s College London, Queen Mary University London, Utrecht y Leiden, trabajaron con microfotografías de la carta, que utilizan rayos x para ver las partes por separado de un documento, y después crear una imagen 3D. Aplicaron algoritmos de aplanamiento computacional a las impresiones para permitirles desdoblar virtualmente la carta sin tener que abrirla, y descubrieron que Sennacques le pedía a su primo una copia del certificado de defunción de un tal Daniel Le Pers.
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“Desde hace varias semanas, cuando te escribí para pedirte que me consiguieras un documento legalizado sobre la muerte del señor Daniel Le Pers, que sucedió en La Haya en el mes de diciembre de 1695, no escucho de ti”, dice la carta. “Te escribo por segunda ocasión para recordarte las dificultades que pasé en tu lugar. Es importante para mí obtener esta copia, y me harás mucho bien si la consigues y me la envías junto con noticias sobre tu salud y la de tu familia”.
El equipo de investigación Unlocking History, conformado por historiadores, conservacionistas y científicos, publicó sus descubrimientos el martes en un artículo para Nature Communications. Dijeron que es la primera vez que se ha leído una carta cerrada del Renacimiento europeo sin romper el sello o dañarla de alguna manera. Es un gran logro para el estudio de documentos históricos porque los pliegues del papel, los dobleces y los cortes proporcionan valiosas evidencias a los historiadores y conservacionistas.
“Este algoritmo nos lleva justo al corazón de una carta cerrada”, escribe el equipo en su artículo, liderado por Jana Dambrogio y Amanda Ghassaei. “A veces el pasado se resiste al escrutinio. Pudimos simplemente haber abierto las cartas, pero en su lugar nos tomamos el tiempo de estudiarlas con todas sus cualidades ocultas, secretas e inaccesibles. Aprendimos que las cartas pueden ser mucho más reveladoras cuando permanecen cerradas. Al utilizar el desdoblamiento virtual para leer una historia íntima que jamás ha visto la luz del día, y que jamás llegó a su destinatario, es verdaderamente extraordinario”.
Los directores de correos de La Haya, Simon de Brienne y Marie Germaine preservaron las cartas y las donaron al museo postal en 1926. Cuando las cartas no lograban entregarse en los siglos XVII y XVIII, los empleados las retenían porque el destinatario, en lugar del remitente, pagaba el envío. Las cartas no entregadas tenían un poco de valor si alguien llegaba a reclamarlas.
Las cartas en la colección de Brienne, según los investigadores, “atestiguan la fragilidad de las vías de comunicación en una época en que Europa estaba dividida por las guerras, la crisis económica y las diferencias religiosas”, y en la que “las personas se mudaban con frecuencia, a veces con prisa, sin dejar su nueva dirección porque todavía no tenían una, o porque no tenían la libertad de divulgarla”.
“La oportunidad de estudiar una carta cerrada es verdaderamente inusual. Una vez que la abres, ya no la puedes estudiar como carta cerrada, entonces ser capaz de estudiar un sobre cerrado es material histórico increíblemente valioso”, dijo el Dr Daniel Starza Smith, profesor de literatura moderna inglesa en KCL y miembro del equipo de Unlocking History. “De hecho nos interesa saber cómo las cartas funcionaban como objetos diseñados, y cómo hacían los sobres. Este material es muy conmovedor. Las personas ponen todo su corazón en las cartas, construyen conexiones emocionales a través de grandes distancias. Es muy evocativo pensar que estos mensajes jamás se entregaron”.
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Los investigadores creen que el desdoblamiento virtual tendrá un impacto “mucho más allá” de la colección Brienne, porque hay muchas colecciones en todo el mundo que tienen documentos cerrados.
“Un ejemplo importante son los cientos de artículos cerrados entre las 160,000 cartas no entregadas de Prize Papers, un archivo de documentos confiscados por los británicos a embarcaciones enemigas entre los siglos XVII y XIX”, dicen en el artículo llamado “Unlocking History Through Automated Virtual Unfolding of Sealed Documents Imaged by X-ray Microtomography”. “Si éstas se pueden leer sin abrirlas fisicamente, podemos preservar mucha más información inusual de los sobres cerrados”.
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