Inviable la apertura de teatros al 20%; empresarios piden apoyos económicos y fiscales

Aunque desde el 1 de marzo el gobierno de la Ciudad de México permitió la apertura de la industria del teatro al 20%, productores de este gremio coincidieron que con dicho aforo no es posible costear la mayoría de las obras, además que se requieren apoyos económicos y fiscales.

El 15 de febrero un conjunto de productores de este ramo hicieron un llamado a las autoridades de la CDMX para que se abrieran estos centros de espectáculos al 45 o 50% de su capacidad, además que la Asociación Nacional de Teatros Independientes pidieron que no se les considerara como lugares masivos ya que su cupo límite es de 100 personas.

Representantes de este sector como Tito Dreinhüffer, Guillermo Wiechers, Claudio Carrera, Alejandro Gou, Morris Gilbert, Fred Roldán, Gerardo Quiroz y Juan Torres, también exhortaron a la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, a que se exenten el pago del impuesto a espectáculos público.

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Bajo ese panorama, la productora del Teatro Xola, Rebeca Moreno, apuntó que la apertura parcial que permitió el gobierno capitalino corresponde a la presión que se ejerció por parte del gremio, aunque dijo que no todos estaban de acuerdo con ello.

En entrevista para La-Lista calificó a esta reapertura como una “solución política” ante los reclamos de los teatreros, pero recordó el gran costo que implica el montaje de las producciones, lo cual no se sustentan con ese aforo.

“A menos que tus intereses no sea económicos, abrir al 20% es complemente inviable para subsistir”, agregó.

En ese sentido, añadió que quizá esta reactivación parcial le podría servir para algunos productores que tuvieran compromisos de preventas que no han devuelto, quienes tuvieran pendientes en obras con derechos de autor o en el uso de recursos de apoyos públicos.

A pesar de que descartó que la administración local les brinde apoyos económicos por la inversión pública en salud, coincidió en que la condonación del Impuesto Sobre Espectáculos Públicos (ISEP) les sería de gran ayuda.

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Incluso, sugirió que la industria del teatro pueda pagar esta contribución en especie, como se hacía en el pasado, lo cual ayudaría a que más personas ocuparan las bucatas.

Moreno también sugirió que se contemple a los trabajadores de esta industria para la pronta vacunación, ya que esto les permitiría volver a operar debido a que son de las actividades que requieren de aforo más grandes para su redituabilidad

Con ello, abundó, podrían retomar actividades las obras que interrumpieron su temporada, además que habría menos riesgo de contagio entre los actores y músicos.

En tanto, el presidente del Colegio de Productores de Teatro de la CDMX, Samuel Sosa, coincidió en que la reapertura al 20% no es lo ideal por el costo de las producciones, pero aceptó que es el inicio de un camino progresivo hacia un aforo lleno.

Aunque en el caso de Sosa sería mejor un funcionamiento al 50 o 60% de capacidad, insistió que este reinicio de operaciones parciales no soluciona la afectación que tuvieron durante los últimos 12 meses, para lo cual se necesitan otro tipo de acciones.

Por ello, invitó a dirigir la discusión sobre cómo se maneja el presupuesto y los apoyos para el arte y la cultura, así como a evitar recortes a estos rubros.

Recordó que en julio pasado la Alianza por las Artes Escénicas (Alarte) se reunió con el gobierno de la CDMX donde se planteó la compra anticipada de boletos como manera de apoyo a esta industria, sin embargo el proyecto no ha avanzado desde aquel entonces por una respuesta: “no hay dinero”.

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Sosa apuntó que sus proyecciones para lo que resta de 2021 en el teatro son pesimistas, ya que no ve una reactivación económica, ya que además de las reglas de operaciones que permita el gobierno local también dependen de la confianza de las personas para ocupar lugares cerrados y con un gran número de gente.

“Vamos a poder imaginar una normalidad cuando la vacuna esté masivamente distribuida, y al ritmo que vamos, ese momento llegará lejos.

“Nos toca seguir abriendo los teatros al ritmo que nos permita y demostrar que (estos lugares) no son una fuente de contagio”, subrayó.