¿Por qué México no inauguró el Mundial 1986? La regla de la FIFA que cambió la historia
Esta será la tercera ocasión que México funge como sede de la Copa del Mundo (después de 1970 y 1986).
México fue anfitrión del Mundial 1986.
/FIFA
México se prepara con fervor para el Mundial 2026, una justa deportiva que genera altísimas expectativas al ser co-organizador junto a Estados Unidos y Canadá. La noticia de que la Selección Mexicana disputará el primer partido del torneo ante Sudáfrica ha encendido el orgullo nacional.
Esta será la tercera ocasión que México funge como sede de la Copa del Mundo (después de 1970 y 1986); sin embargo, hay un dato histórico que pocos recuerdan: el Tri solo jugará su segundo encuentro de inauguración y no el tercero.
¿Por qué esta peculiaridad? La respuesta nos lleva directamente a una regla de la FIFA que cambió el destino del primer partido en 1986.
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¿Por qué México no inauguró el Mundial de 1986 si fue sede?
Aunque México fue el anfitrión del Mundial 1986, la Selección Nacional no tuvo el honor de jugar el partido inaugural, una situación que sí se dio en el torneo de 1970. El motivo se encuentra en los criterios de la FIFA vigentes en esa época para definir el encuentro de apertura.
De 1966 a 1974: El anfitrión abre el torneo. Durante este periodo, la regla dictaba que el país organizador jugaría el primer encuentro. Por esta razón, México inauguró el Mundial de 1970 con un empate 0-0 ante la URSS.
De 1978 a 2002: El campeón vigente abre el torneo. Para el Mundial de Argentina 1978, la FIFA cambió la normativa: el vigente campeón del mundo era quien debía disputar el primer partido.
Por lo tanto, en México 1986, el partido inaugural fue Italia contra Bulgaria. ¿Por qué Italia? Porque la Squadra Azzurra era la campeona defensora tras haber ganado el Mundial de España 1982. La Selección Mexicana debutó tres días después contra Bélgica, con una victoria de 2-1 en el Estadio Azteca.
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¿Cómo se convirtió México en sede de “emergencia” para la Copa de 1986?
La historia del Mundial de 1986 en México es una epopeya de resiliencia. Originalmente, el torneo iba a celebrarse en Colombia, pero el país sudamericano renunció a la sede en 1983 debido a problemas económicos y la falta de infraestructura adecuada.
México levantó la mano y fue elegido por la FIFA, convirtiéndose en el primer país en la historia en organizar dos Copas del Mundo.
El reto se volvió titánico con la llegada del terremoto del 19 de septiembre de 1985. Apenas ocho meses antes del silbatazo inicial, el sismo devastó la capital, dejando una profunda crisis. A pesar de la tragedia y las dudas internacionales sobre la viabilidad del evento, el país se levantó.
El balón rodó puntualmente el 31 de mayo de 1986, demostrando la capacidad de México para cumplir con el compromiso mundialista.
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¿Qué ocurrió en la polémica ceremonia inaugural del Estadio Azteca?
El acto inaugural de México 1986, realizado en el Estadio Azteca ante más de 100 mil aficionados, fue un evento singular. Estaba diseñado principalmente para la transmisión televisiva, con un cortometraje producido por Luis de Llano que narraba el viaje de un “Guerrero Águila” desde el México prehispánico hasta la modernidad.
Sin embargo, para los asistentes en el estadio, la experiencia fue muy diferente. El evento fue percibido como largo y aburrido, con lapsos sin acción. Los efectos visuales y el montaje que lo hacían atractivo en televisión no eran evidentes para quienes estaban en las gradas.
Lo que quedó grabado en la memoria histórica fue la rechifla brutal que recibió el entonces presidente Miguel de la Madrid cuando intentó dar el discurso inaugural. El sonido falló, y los abucheos se escucharon en todo el Azteca, reflejando el enojo popular por la gestión gubernamental tras la devastación del terremoto del 85.