‘Es como un infierno’: hondureña con estancia legal fue retenida 11 días por el INM
Foto: Asylum Access México / Twitter

“Es como un infierno, es peor que una cárcel”. La frase es de Dilian Dilisa Castillo Martínez, joven hondureña de 23 años. Durante 11 días estuvo retenida en un albergue controlado por las autoridades de Tabasco y el Instituto Nacional de Migración (INM), a pesar de tener documentos de residencia permanente.

Desde hace nueve años, Dilian vive en México. Primero permaneció en el país con una tarjeta de visitante por razones humanitarias y, en 2019, el INM le otorgó su residencia permanente. Con ese estatus, según la Ley de Migración, ella puede desplazarse libremente en el país. Pero el pasado 1 de junio fue detenida en la ciudad de Villahermosa, Tabasco.

Dilian se encontraba en la terminal de autobuses de la compañía turística Meruvi cuando, alrededor de las 19:00 horas, un grupo de agentes migratorios le pidió sus papeles. “Necesitamos tus papeles, vamos a ir a checarlos y al rato regresas a tu casa”, le dijo un agente, mientras ella se resistía a perder el autobús. “Te prometo regresar los 4 mil 500 que gastaste (en los pasajes)”, le insistió.

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Después de ese intercambio de palabras, Dilian mostró los documentos que acreditan su residencia permanente, los agentes se los quitaron y la subieron a un vehículo. La llevaron a las oficinas del INM y después al Albergue de la Diócesis en Villahermosa. Ahí permaneció hasta el 11 de junio, cuando el instituto migratorio le informó que la dejaría ir.

Fue detenida con sus dos hijastros de 11 y 14 años, quienes cuentan con una tarjeta de visitante por razones humanitarias. Dilian, junto con su pareja y los dos menores, vive en Navojoa, Sonora, y el día de la detención fue a visitar a su hermano a Villahermosa. 

“Había tenido una vida tranquila en México hasta ahorita que la migración me vino a dejar en este albergue”, dice en entrevista telefónica con La-Lista. “Vivía en paz con mi familia, yo no sabía que, aun con mis papeles de residente, la migración me podía agarrar, como si fuera un delito viajar”.

Del Albergue de la Diócesis en el que estuvo se lleva muy malos recuerdos. Relata que además de soportar el intenso calor y los mosquitos, dormía en el suelo con colchonetas, la comida era de mala calidad, no había agua limpia para bañarse y compartía el espacio con decenas de personas migrantes.

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“Quiero la nacionalidad mexicana”

El equipo jurídico de la organización internacional Asylum Access tomó el caso de Dilian. El 4 de junio, los abogados interpusieron un juicio de amparo en el Juzgado Sexto de Distrito en el Estado de Tabasco para lograr su liberación y también estaban preparados para acudir a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

Este 11 de junio, los integrantes de Asylum Access recibieron la noticia de que la mujer de 23 años sería liberada. Es un logro, pero advierten que eso no borra las violaciones a los derechos humanos que sufrió al estar 11 días prácticamente privada de la libertad.

“El INM, a través de los diversos operativos que realiza en las estaciones de autobuses y en los tramos carreteros, debe privilegiar la garantía jurídica de sus propios documentos de estancia permanente”, señala un miembro de Asylum Access bajo anonimato por motivos de seguridad.

Ahora, el equipo legal analiza interponen una queja o denuncia contra los agentes migratorios que la retuvieron.

A pesar de esta experiencia, Dilian afirma que su intención es seguir en México. Ella salió de Honduras hace nueve años porque sufría discriminación y violencia por ser parte de la comunidad LGBT+. En la última agresión que recibió en su país fue golpeada por cuatro personas e incluso la apuñalaron, cuenta.

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Después de recuperarse decidió viajar a México. Primero llegó a Veracruz y luego la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) la reubicó en el estado de Sonora. Ahí se dedica a elaborar y vender manualidades como atrapasueños.

“Yo creo que no volvería a Honduras, ahí tenía que vivir a escondidas por ser de la (comunidad) LGBT”, menciona. “Quiero empezar mi trámite para tener la nacionalidad mexicana”.

La-Lista buscó al INM y, hasta la publicación, no hubo respuesta.

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