Los menores de edad capitalinos tienen derechos a que sus padres, madres o tutores no usen castigos físicos y humillantes y en caso de que ocurra deberá ser sancionado, ante la entrada en vigor en la Ciudad de México la reforma a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la capital, también conocida como ‘Ley Chancla’.

La ley establece ahora que las personas menores de edad tienen derecho a recibir orientación, educación, cuidado y crianza sin castigo corporal o físico, al que define como el uso de la fuerza física como pellizcos, mordidas, tirones de cabello o de las orejas, incluyendo golpes con la mano o con algún objeto, empujones, obligar a sostener posturas incómodas, quemaduras, ingesta de alimentos hirviendo u otros productos o cualquier otro acto que tenga como objeto causar dolor o malestar, aunque sea leve.

Asimismo sin castigo humillante, que es considerado cualquier tipo de trato ofensivo, denigrante, desvalorizador, estigmatizante, ridiculizador y de menosprecio, y cualquier acto que tenga como objetivo provocar dolor, amenaza, molestia o humillación.

También que deberán sancionarse estas prácticas, así como la incitación para que participen en delitos o en asociaciones delictuosas, en conflictos armados o cualquier otra actividad que impida su desarrollo integral.

La “ley chanclal” también estipula que el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF) habilitará albergues o espacios de alojamiento para recibir a niñas, niños y adolescentes migrantes, y deberá promover y difundir alternativas de disciplina para que padres, madres y cualquier adulto evite los castigos físicos y humillantes.

Estas nuevas disposiciones la “Ley Chancla” entraron en vigor este jueves 24 de febrero, después de ser publicadas en la Gaceta Oficial de la CDMX, tras haber sido aprobado por el Congreso de la Ciudad de México el pasado 22 de febrero con 43 votos a favor, cero votos en contra y cero abstenciones.

“Las niñas y los niños maltratados, abandonados, tienden a ser mayormente agresivos con sus familiares más cercanos y compañeros de escuela, lo que años después deriva en violencia hacia la novia, la esposa, la pareja, etcétera”, señaló la diputada Polimnia Romana Sierra Bárcena, presidenta de la Comisión de Atención al Desarrollo de la Niñez.

De acuerdo con la legisladora, en el país seis de cada 10 niños son castigados con violencia física y humillaciones en sus hogares.