Rosario Ibarra de Piedra, luchadora social y defensora de derechos humanos, falleció a los 95 años en Monterrey
Rosario Ibarra tenía 95 años. Foto: Wikimedia commons.

Rosario Ibarra de Piedra, luchadora social y defensora de los derechos humanos, falleció a los 95 años de edad en Monterrey, Nuevo León, informó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

“La CNDH lamenta el sensible fallecimiento de la luchadora social, Rosario Ibarra de Piedra, madre de nuestra presidenta, de Claudia, Carlos y Jesús esta mañana en la ciudad de Monterrey, Nuevo León”, escribió en su cuenta de Twitter

El deceso de la defensora de derechos humanos fue lamentado por políticos y organizaciones civiles.

En su cuenta de Twitter, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó el hecho como una “mala noticia” y destacó la solidaridad que Ibarra de Piedra mostró con las personas que sufrieron la desaparición de algún ser querido. 

“A nosotros nos apoyó en todo momento y nunca olvidaré que mi madre votó por ella para presidente de la República. Abrazo a sus hijos y a sus muchísimos seguidores y amigos”, agregó en su mensaje.

Mientras Ifigenia Martínez, actual senadora de Morena y también activista, envió sus condolencias a sus hijas, familiares y amigos.

“Me entero con tristeza del fallecimiento de mi entrañable amiga e incansable activista y luchadora social, Rosario Ibarra de Piedra, pionera en la defensa por los derechos humanos, la paz y democracia en México. Abrazo con afecto a sus hijas,familiares y amigos. Descanse en paz”, detalló.

Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México, también lamentó la pérdida de la activista y destacó su labor en la búsqueda de desaparecidos. 

El grupo parlamentario de Morena expresó su pésame por la partida de defensora de derechos humanos. 

¿Quién fue Rosario Ibarra de Piedra?

Rosario Ibarra de Piedra nació en Saltillo, Coahuila, el 24 de febrero de 1927. A lo largo de su vida se detalló por ser una incansable activista en la búsqueda de personas desaparecidas, así como de los derechos humanos. 

En 1977 creó el Comité ¡Eureka!, una organización pionera en la búsqueda de desaparecidos en México, con el objetivo de hallar a Jesús Piedra Ibarra, su hijo, y a quienes habían sido víctimas de desaparición forzada durante la guerra sucia, época en la que se acusó al Estado mexicano de reprimir, encarcelar, perseguir y desaparecer a personas por sus ideas políticas. 

Su labor como activista la llevó a desempeñar puestos en la política nacional. Fue diputada, senadora y asesora de varios políticos, como el presidente Andrés Manuel López Obrador. 

En 1982 se convirtió en la primera mujer candidata a la Presidencia de la República, hecho que repitió en 1988. En ambas ocasiones lo hizo como representante del extinto Partido Revolucionario de los Trabajadores. 

Luego del cuestionado triunfo de Carlos Salinas, en las elecciones presidenciales de 1988, se unió a los reclamos de fraude electoral encabezados por Cuauhtémoc Cárdenas.

Mientras en octubre de 2019 recibió la Medalla Belisario Domínguez, como un  reconocimiento por su ardua labor como activista y defensora de los derechos humanos por más de cuatro décadas en favor de presos, desaparecidos y exiliados políticos.

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