Manuel Guerrero, mexicano detenido en Catar, solicita reunión con la canciller Alicia Bárcena
Manuel Guerrero cumplió un mes detenido en Catar. Ilustración: Majito Vázquez.

Manuel Guerrero Aviña, el mexicano que lleva su proceso en libertad luego de haber sido detenido en Catar por su orientación sexual, solicitó una reunión urgente con la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena, para exponerle su situación.

Mediante una carta escrita con su puño y letra, el mexicano con doble nacionalidad dio a conocer los puntos que desea discutir con la canciller como son: la falta de acceso a sus medicamentos retrovirales para tratar el VIH, los diferentes actos de tortura a los que fue sometido por autoridades de aquel país, así como su repatriación.

“Dra. Alicia Bárcena. Además de enviarle un cordial saludo, me gustaría de manera urgente concretar una cita con usted”, se lee en el documento que fue compartido por el Comité Manuel Guerrero a través de sus redes sociales.

Miembros del Comité señalaron en un comunicado aparte que la Secretaría de Relaciones Exteriores de México no ha respondido a la petición de reunirse con ellos para discutir las acciones del caso, pues refirieron que “sin la participación de alto nivel del gobierno de nuestro país, existe un riesgo de que el caso se prolongue indefinidamente”.

De igual manera solicitaron a la Secretaría de Estado de Asuntos Interiores, Commonwealth y Desarrollo de Reino Unido, y a la SRE su intervención para condenar la tortura y las graves violaciones a derechos humanos que ha sufrido Manuel, garantizando su repatriación.

Manuel Guerrero pasó más de 40 días preso en Catar desde que la policía de aquel país creó un perfil falso en una aplicación de citas, desde donde lo contactó y concretó un encuentro con él, haciéndose pasar por un hombre homosexual, con la finalidad de arrestarlo.

Tras su detención, Manuel fue sometido a interrogatorios clandestinos durante las madrugadas para que les informe a las autoridades con quienes ha tenido relaciones sexuales en el pasado, entre otras violaciones a sus derechos humanos.

El ciudadano mexicano-británico estuvo dentro de la prisión en Doha desde el 4 de febrero y posteriormente liberado para seguir su proceso en libertad el pasado 18 de marzo; desde entonces ha pedido ayuda a los gobiernos para poder acceder a su tratamiento contra el VIH que necesita para vivir.

“Su intervención es crucial para que esta situación cese lo más pronto posible: el juicio que Manuel está por enfrentar es en sí mismo injusto, como lo fueron su detención, privación de la libertad y tortura”, refirió ahora el Comité Manuel Guerrero que pide que el proceso del próximo 22 de abril contra el mexicano sea suspendido.

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