Cinthia Aparicio conquista el teatro: “Las Mujeres Son de Venus…” celebra 200 funciones con éxito

Cinthia Aparicio no sólo sigue conquistando al público desde el escenario, también ha dado un paso firme hacia la producción teatral con Las mujeres son de Venus y los hombres ni madres, una comedia que ha superado ya las 200 funciones en cartelera. En entrevista para La-Lista, la actriz nos cuenta cómo ha sido este proceso compartido con su pareja, Alexis Ayala, el reto de subirse al escenario cada fin de semana y la evolución personal y profesional que le ha traído esta aventura.

Aparicio, quien actualmente también aparece en la telenovela Juegos de amor y poder por Las Estrellas, se sincera sobre el trabajo en equipo, los aprendizajes detrás del telón y sus sueños de algún día dirigir. “El teatro es aquí y ahora. Me ha dado tablas, disciplina, y me ha enseñado a resolver todo en el momento”, dice.

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¿Cómo nació esta etapa teatral y qué ha significado producir junto a tu pareja?

Aunque su camino como actriz ya incluía el deseo latente de hacer teatro, fue el productor Miguel Briones quien les propuso a ella y a Alexis Ayala integrarse al proyecto de Las mujeres son de Venus y los hombres ni madres. Aparicio no dudó: “Yo siempre he amado el teatro, y cuando llegó la propuesta, dijimos que sí de inmediato”.

Desde entonces, la obra ha tenido una respuesta sorprendente. “No pensábamos que iba a durar más de tres o seis meses… ya vamos por un año seis meses en cartelera”, comenta con emoción. La mancuerna con su pareja, lejos de ser una complicación, ha resultado en un equilibrio profesional y personal que ha fortalecido su relación. “Nos ha unido también como amigos, hemos aprendido a separar lo que es el trabajo y la casa”, reflexiona.

La actriz destaca que la comedia permite al público reírse de situaciones cotidianas, pero también invita a pensar. “Son cuadros reales de pareja, que todos vivimos. Y al final el mensaje es claro: cuando quitamos el ego, podemos escuchar de verdad”.

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¿Qué ha aprendido del teatro que no le había dado la televisión?

Con experiencia tanto en televisión como en el escenario, Aparicio identifica en el teatro una conexión única. “Aquí no hay cortes, no hay ‘toma dos’. Todo pasa en ese instante. Es magia y aprendizaje constante”, explica.

El contacto directo con el público también ha sido clave. “Cada función es diferente. A veces tenemos que improvisar, nos reímos, el público se ríe con nosotros, y eso crea una energía hermosa”. Incluso confiesa que, tras más de 200 funciones, no es la misma actriz que subió por primera vez a ese escenario: “He crecido muchísimo. El teatro te forma, te da otras herramientas. Hoy no soy la misma con la que empecé”.

Además, el salto a la producción le ha permitido ver el panorama completo de un montaje. “Como actriz a veces no entiendes por qué algo no se hace, por qué no se aprueba una idea. Desde la producción te das cuenta que todo tiene lógica, presupuesto y estructura. Es otra forma de hacer arte”.

¿Qué viene para Cinthia Aparicio y cuál es su visión a futuro?

Aunque Las mujeres son de Venus y los hombres ni madres sigue en cartelera y con planes de expansión, Aparicio ya se encuentra al aire con Juegos de amor y poder, un thriller político en el que interpreta a Natalia, una periodista decidida a descubrir la verdad tras un accidente. La serie, producida por Carlos Bardasano, cuenta con un elenco de renombre y un ritmo que ha atrapado al público.

Pero eso no es todo. Cinthia y Alexis ya preparan otro proyecto televisivo juntos, aún por anunciar, y la actriz sigue activa en castings, explorando nuevas oportunidades. ¿Y la dirección? “Dirigir teatro o cine sí es un sueño, pero aún falta. Tengo que aprender mucho antes de lanzarme”, admite con humildad. Lo que sí tiene claro es que quiere seguir produciendo: “Me encantaría una obra donde yo ya no actúe, sólo esté detrás, en la parte creativa”.

Con una mirada fresca, comprometida y llena de entusiasmo, Cinthia Aparicio demuestra que su vocación va más allá de los reflectores. Su paso del escenario a la producción no es solo una expansión de su carrera, sino una muestra del amor profundo que le tiene al teatro y a su audiencia.

“Hoy entiendo muchas cosas que antes no veía como actriz. Y eso me hace valorar aún más esta profesión”, concluye.

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