‘Debemos mantener la capacidad de ver las cosas de forma mágica siempre’: Beatriz Sokol

Magos es la más reciente exposición de la fotógrafa mexicana Beatriz Sokol. Se expone en Casa Versalles en colaboración con Ojo Arte y es una serie de fotografías que realizó en su residencia en nueve pueblos de la costa de Jaslico, México. Para que este proyecto viera la luz, la artista colaboró con niños y niñas de entre cuatro y 13 años con un taller en torno a la imagen como herramienta narrativa que les impartió.

La-Lista charló con Sokol sobre el origen, desarrollo y motivaciones de la exposición que está abierta a todo el público desde el 13 de julio y hasta el 27 de agosto.

La importancia de trabajar con la niñez

Cuando es cuestionada sobre el motivo para trabajar con niños, Beatriz afirma que “siempre me ha interesado el tema de la niñez y es algo que he explorado en diferentes formas”.

“Al menos yo regreso mucho a ese momento de mi vida, todos nos marcamos en gran medida por esos momentos y por otro lado sigo admirando ese momento en el que las cosas se pensaban de otra forma”, confiesa la fotógrafa.

Los talleres de Sokol significaron el primer acercamiento a la fotografía para los infantes jaliscienses con los que colaboró y recuerda que “se emocionaban mucho de poder interactuar con una cámara. Algunos se clavaban mucho con ver qué más podían hacer con este objeto. Realmente lo que quería era dar herramientas para contar historias”.

Diferentes realidades

Durante el recorrido inaugural, Beatriz recordó lo mucho que le sorprendió la capacidad que los niños y niñas tienen para ver el mundo desde una perspectiva completamente diferente a la que se tiene en la adultez. Contó la anécdota en la que, dentro de uno de los pueblos, logró llegar a un río gracias a que un de sus colaboradores le hizo un mapa con todas las limitantes técnicas que eso puede significar para un infante.

Le preguntamos sobre cómo fue unir perspectivas diferentes y señaló que “aunque me costaba trabajo, todo el tiempo intentaba encontrar a mi alrededor todo eso que los niños me contaban. Ellos tienen un universo diferente al nuestro, desde cómo se relacionan con los animales y hasta cómo pueden ver hasta árboles encantados”.

“Fueron cuatro meses en los que estuve enfocada en dar los talleres y encontrar la magia que ellos ven“, recuerda Sokol. Para Beatriz, lo más importante que todos deberían mantener tras salir de la infancia es “la capacidad de ver las cosas mágicas siempre”.

Los personajes creados

Una de las actividades que realizaron todos los niños con los que colaboró fue la creación de un personaje ficticio. El resultado fue desde magos, superhérores, hadas o brujas, con el común denominador que todos tienen la capacidad de mejorar los aspectos negativos que rodean sus comunidades.

“Jabonoso (el niño en bicicleta) me encantó”, subraya. “Es un personaje que tiene una esencia muy de los niños. Hace juguetes con la basura, pero hace comida para las personas que no tienen. Tiene ambos lados, la diversión y la ayuda. Incluso hasta hace bicicletas y eso te habla que es el medio de transporte principal para las personas de ese pueblo”, nos comenta Beatriz Sokol.

“Hubo otro que me impresionó muchísimo. Un niño se empeñó en que su personaje no tenía ningún superpoder, ni un atributo mágico, era un soldado, porque para él, la visión de un soldado es aquel que llega a ayudar al pueblo luego de un desastre natural. Son aquellos que llevan la comida y vuelven a poner las cosas en su lugar. Para mí fue duro porque de repente tenemos otra visión de un soldado”, recuerda.

Beatriz Sokol dará una segunda visita guiada el este 22 de julio en punto de las 12:30 horas. También lo hará el próximo 9 de agosto y cerrará con una cuarta y última el 26 de agosto, ambas con horario por confirmar.