Finanzas sanas: Cómo hacer que el amor no salga por la ventana
©Foto: Angélica Escobar/La-lista.

Las relaciones de pareja pueden ser por sí mismas complicadas en uno o muchos sentidos, y cuando ya se vive con esa persona y se comparten responsabilidades, sobre todo financieras, la situación puede ser aún más caótica si no hay claridad sobre el manejo de los dineros.

En una situación como la actual, con pandemia y crisis económica, el gasto de las parejas toma mayor relevancia para proteger la salud y estar listos para cualquier contingencia como perder el empleo o afrontar un desembolso inesperado. Y aquí es donde además del amor, juegan un rol clave la comunicación y la planificación, de acuerdo con los especialistas de finanzas personales consultados.

Lee: Los regalos que queremos: una lista de deseos de La-Lista para el 14 de febrero

Datos del Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) indican que, de cada cien personas de 12 años y más, 54.2 están casadas o viven en unión libre, 34 son solteras, y el resto son separadas, divorciadas o viudas.

El porcentaje de población casada tuvo un decremento 5.1 puntos porcentuales, mientras que el porcentaje de población en unión libre se incrementó 3.9 puntos porcentuales respecto al 2010.

Por ello es necesario implementar estrategias de comunicación de temas relevantes como lo son el manejo de las finanzas dentro de las relaciones. Esto para que no cumpla ese viejo refrán que dice: “Cuándo el dinero sale por la puerta, el amor salta por la ventana”.

Echa un vistazo a: La-Lista de los estrenos de Netflix en febrero para ver en pareja

Te mostramos algunas recomendaciones para organizar las finanzas en pareja, que podrían ayudarte a prevenir la llamada infidelidad financiera y a dejar este tema lo suficientemente claro para poder disfrutar la relación sin que el tema del dinero se convierta en incompatibilidad.

  • Empezar por las finanzas propias

El tema de las finanzas en pareja y qué tan sanas son reflejan que la salud de sus propias finanzas personales, destaca Regina Reyes-Heroles, autora del libro “Vivir como reina y gastar como plebeya”.

“Una pareja con finanzas personales desordenadas tendrá finanzas igual o más desordenadas. Si uno es ordenado y el otro no, siempre habrá algo que no cuadre”, apunta.

Por ello, es importante que definan el estado en el que están las finanzas de cada uno; está será su base. Si alguno o ambos necesitan mejorar este rubro, acuerden primero cómo sanarlas, es decir, cómo pagar esas deudas y ponerse al corriente.

  • Hablar y definir

Comunicación y planificación son la base de todo, señala Roberto Morán, autor del libro “Lo que debes saber del dinero antes de cumplir 40”, quien agrega que hablar de dinero no tiene porque terminar en una pelea sobre quién aporta más, o quién hace gastos innecesarios; sino que el objetivo es tener claras las metas y planes de la otra persona para poder empatarlos o bien definir las prioridades que consideren clave en la relación.

“Una relación amorosa es como una receta que necesita de buenos componentes para que tenga resultados exquisitos, como lo son: la comunicación, la confianza, el respeto y las similitudes en la gestión del dinero”, considera Ana Fernanda de las Fuentes, directora de Estrategias de Educación Financiera en Cumplo México.

También las parejas pueden acordar quién llevará el manejo de cuentas, es decir, quien será el encargado, y la recomendación es que se trate de la persona que tenga una mejor relación con el dinero, mejor organización y que no pierda de vista fácilmente los objetivos.

  • Crear una filosofía de ahorro y gasto en pareja

Uno de los pilares elementales debe ser la ideología de ahorro y gasto, ya que si son incompatibles en este tema, se pierde una chispa importante, señala De las Fuentes. Esto se trata de asentar los compromisos económicos que la pareja considera comunes así como mantener una libertad de gastos considerados personales.

  • Definir un presupuesto

Para Regina Reyes-Heroles, establecer un presupuesto en conjunto es fundamental, pues en éste debe quedar muy claro en que se va a gastar ese dinero y cuál será la aportación que haga cada uno; y agrega que no se trata de que ponga más el que gana más o viceversa, sino de encontrar la fórmula que consideren la mejor.

“Un presupuesto muy claro en el que quede claro cuánto se va a gastar en cada rubro puede funcionar”, señala.

En ese sentido, Ana Fernanda de las Fuentes menciona que puede ser un proceso difícil pero brindará bienestar a la relación y para armarlo recomienda tomar en cuenta puntos como saber la situación financiera personal, determinar las necesidades de la casa, objetivos a largo plazo, abordar las necesidades individuales así como el ahorro y un fondo de emergencia.

  • Fijar metas financieras claras

¿Cuáles son los objetivos financieros de tu pareja y cuáles los tuyos? Es importante hablarlos y ser concretos, especificar cuándo te gustaría lograr esa meta y emplearla de manera conjunta. Dispongan de un orden, decidan cuáles van a llevar a cabo a un plazo menor y cuáles van a tener que ser enviadas a largo plazo.

“Tengan el mismo objetivo en la cabeza. No saber qué plan tiene el otro hace que no seamos cuidadosos en el gasto y el ahorro a los ojos del otro. Es más fácil alcanzar las metas cuando sabemos qué quiere cada quien, y es mejor si se pone un plazo y se prioriza cuál va primero”, señala Regina Reyes-Heroles.

  • Pensar como si fuera un divorcio

Roberto Morán menciona que para poner en orden y dejar claro el tema de las finanzas de la pareja pueden pensar en qué pasaría si se separan, quién se queda con qué: Si bien reconoce que para los enamorados suele ser impensable una separación, tener certeza sobre las responsabilidades, obligaciones y beneficios, evitará peleas posteriores.

  • Evitar la infidelidad financiera

La infidelidad financiera, que consiste en ocultar deudas y gastos a la otra persona en la relación, puede ser fácilmente resuelta trabajando los puntos ya enlistados, pero también ayuda que cada parte tenga un rubro discrecional, es decir, cada uno tendrá gastos personales que querrá sin tener que dar cuenta de cada peso que sale de su bolsillo.

“Ese pedacito discrecional puede permitirnos tener cierta libertad para decidir en torno a gastos personales que no necesariamente son compatibles con la pareja”, apunta la autora del libro “Vivir como reina y gastar como plebeya”.

Los expertos coinciden en que si bien no hay fórmulas perfectas ni planes inamovibles, pues existen hábitos y modelos diferentes tanto para llevar una relación como para administrar el dinero. Así que no te preocupes si el plan financiero con tu pareja no es su mejor versión. Esto es normal, apuntan los especialistas, y por eso se deben hacer constantemente ajustes hasta encontrar el que mejor les funcione.

Síguenos en

Google News
Flipboard