Venezuela retoma proyecto de ley que amenaza a las ONG
La Asamblea Nacional de Venezuela retoma la discusión de una ley que podría restringir a las ONG, generando preocupación entre defensores de derechos humanos.
La Asamblea Nacional de Venezuela retoma la discusión de una ley que podría restringir a las ONG, generando preocupación entre defensores de derechos humanos.
El parlamento de Venezuela ha reanudado la discusión de un proyecto de ley que busca regular a las ONG, una medida que ha sido criticada tanto por la sociedad civil como por organismos internacionales debido a sus posibles repercusiones en el derecho de asociación y la libertad de expresión.
Proyecto de ley en Venezuela genera preocupación por restricciones a las ONG
La Asamblea Nacional de Venezuela ha retomado la discusión sobre un proyecto de ley que busca regular las organizaciones no gubernamentales (ONG) en el país. Este proyecto, conocido formalmente como “Ley de Fiscalización, Regularización, Actuación y Financiamiento de las Organizaciones No Gubernamentales y Afines”, ha sido duramente criticado por diversos sectores, quienes lo consideran una amenaza directa a los derechos fundamentales de asociación, libertad de expresión y participación pública.
A pesar de que el gobierno venezolano, liderado por el presidente Nicolás Maduro, defiende la ley como un medio para garantizar la transparencia y supervisar el financiamiento de estas organizaciones, la comunidad internacional y varios defensores de derechos humanos han expresado su preocupación. Argumentan que la ley podría ser utilizada para restringir las actividades de las ONG, especialmente aquellas que reciben financiamiento del extranjero, bajo el pretexto de que operan con fines políticos o desestabilizadores.
El debate se reanudó en el parlamento, controlado por una mayoría oficialista, después de haber aprobado varios artículos de la ley en sesiones anteriores. No obstante, la discusión sobre el proyecto ha sido pospuesta para una “próxima sesión”, cuya fecha aún no ha sido definida. Usualmente, las sesiones del parlamento venezolano se realizan los martes y jueves.
Reacciones internacionales y preocupaciones
Organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han instado al gobierno venezolano a abstenerse de aprobar esta ley, advirtiendo que podría restringir de manera arbitraria los derechos fundamentales en un contexto donde el espacio cívico ya está limitado. Gina Romero, relatora especial de la ONU para la Libertad de Asociación y Asamblea, recordó que anteriormente se había enviado una carta al gobierno venezolano expresando preocupaciones sobre las “restricciones incompatibles” que impondría esta ley.
La reanudación de la discusión ocurre en un contexto de creciente represión postelectoral, donde activistas, periodistas y organizaciones de la sociedad civil han sido objeto de intimidación y persecución, generando un clima de temor generalizado en el país. Además, el proyecto de ley se debate en paralelo con otra iniciativa legislativa conocida como la “Ley contra el Fascismo, Neofascismo y Expresiones Similares”, que también ha generado controversia debido a las severas sanciones que propone para aquellos que promuevan la violencia como método de acción política.
Las preocupaciones sobre el impacto de estas leyes han sido ampliamente compartidas por la comunidad internacional, que teme que se utilicen como herramientas para silenciar a los opositores y limitar la labor de las ONG en Venezuela.
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