El lucrativo negocio detrás de los baños del Metro de la CDMX

En el Metro de la Ciudad de México (CDMX) hay un negocio conectado a la red del alcantarillado, por el que cada que alguien le jala a la taza del baño un empresario se ve beneficiado: los sanitarios públicos.

La explotación comercial de los baños públicos del Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México se otorga de manera discrecional, sin ninguna licitación o concurso, a personas físicas y morales por cinco o hasta 10 años, que se pueden prorrogar hasta dos veces.

El servicio de baños públicos en el Metro de la CDMX está en manos de 12 empresas y 11 personas particulares, de acuerdo con una solicitud de información hecha al STC. 

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Uno de los baños del Metro de la CDMX. Foto: Frida Betanzos/ La-Lista

¿Quiénes son los beneficiarios de los baños del Metro de la CDMX?

Entre los beneficiarios de hacer negocios con una de las necesidades más básicas de las personas están dos empresas: Espacios CET S.A.P.I. de C.V. y Tus Espacios Públicos S.A. de C.V., ambas de Jonathan Cöhen Rabinovitz.

Cöhen Rabinovitz es un empresario que conocimos gracias a los Panama Papers, la filtración masiva de documentos en 2016 de la firma de abogados panameña Mossack Fonseca. Jonathan y sus hermanos Michael y Alexander emplearon estructuras offshore que comúnmente son utilizadas para ocultar riquezas, evadir impuestos o lavar dinero.

En 2016, un reportaje del periodista Irving Huerta en Aristegui Noticias reveló que Jonathan Cöhen Rabinovitz ganó sin concurso de por medio las concesiones para operar parquímetros en las alcaldías Miguel Hidalgo, Tlalpan y Benito Juárez.

Ahora, La-Lista exhibe que el gobierno de Miguel Ángel Mancera no sólo le dio concesiones de parquímetros también entregó a Cöhen Rabinovitz, en noviembre de 2015, permisos para el uso y aprovechamiento de espacios para sanitarios públicos en las estaciones Observatorio, Tacuba, Deportivo 18 de Marzo, Martin Carrera, Barranca del Muerto y El Rosario con la empresa Espacios CET, que tiene también como accionista a Moisés Zapan Mizrahi. En ese entonces, el director del Metro era el diputado perredista Jorge Gaviño.

Cöhen Rabinovitz ya tenía dos permisos para explotar el negocio de los baños en las estaciones Santa Marta y Tasqueña desde junio y agosto de 2012, pero con la empresa Tus Espacios Públicos, cuando la capital era gobernada por Marcelo Ebrard y los directores del Metro fueron Francisco Bojórquez Hernández y Joel Ortega, respectivamente.

Con Tus Espacios Públicos, Cöhen Rabinovitz también obtuvo un permiso administrativo en 2017 para la construcción de sanitarios en vía pública afuera del metro UAM-I, con una vigencia de 10 años.

Además, en 2013, un ciudadano preguntó, vía solicitud de transparencia, quién había estado a cargo de construir los sanitarios públicos en la acera del Metro Pantitlán, y la respuesta de la Coordinación de los Centros de Transferencia Modal (CETRAM) del entonces Distrito Federal, fue que Espacios CET.

Tus Espacios Públicos fue constituida en 2011 y ese mismo año fue beneficiaria de permisos para administrar baños en la estación San Joaquín de la Línea 7 y la estación Tacubaya de la Línea 1. Espacios CET nació un año después, en 2012, según consta en su acta constitutiva. Ambas comparten el mismo objeto social: la obtención de todo tipo de concesiones del gobierno, tanto federal, estatal o municipal, para la instalación de baños y “todo tipo de bienes y servicios en espacios públicos”.  

También comparten el mismo domicilio en la colonia Anzures, de acuerdo con sus actas tras una revisión en el Registro Público del Comercio. Se trata de un edificio abandonado, sin empleados y con una lona que anuncia que el lugar está en renta, pudo constatar La-Lista. Ninguna de las dos empresas tiene páginas de internet. 

En 2021, Espacios CET obtuvo una primera prórroga para operar el servicio de los baños por cinco años más, por el permiso para seis espacios sanitarios de finales de 2015. Mientras que Tus Espacios Públicos consiguió prórrogas en 2021 para dos permisos administrativos, de acuerdo con una respuesta a una solicitud de información pública que ingresó La-Lista.

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Sanitario en una de las estaciones del Metro de CDMX. Foto: Frida Betanzos/ La-Lista

En el gobierno de Claudia Sheinbaum se entregaron nueve permisos para la comercialización de los baños del Metro de la CDMX a un despacho de consultoría, asesoría y auditoría en materia de exploración y extracción de hidrocarburos, según su propia página de internet, su nombre es Estrategias y Soluciones Legales A&F S.A.P.I de C.V.

El 17 de diciembre de 2021, el STC otorgó a la empresa consultora en materia de hidrocarburos el permiso para la gestión de baños de las estaciones:  Cuauhtémoc, Pantitlán, Ecatepec, Múzquiz, Río de los Remedios, dos en Impulsora y dos en Neza. Cuando el director del Metro era ya Guillermo Calderón.

Estrategias y Soluciones Legales A&F presume como parte de su experiencia cuatro convenios con Petróleos Mexicanos en los que ha sido parte, pero dos de ellos están relacionados con irregularidades y esquemas de triangulación de recursos.

Se trata de los convenios 421003833 y 420843824, según la página de la compañía, sin embargo, dichos convenios fueron firmados entre Pemex Exploración y Producción (PEP) y la Universidad Tecnológica de Tabasco (UTTAB), de acuerdo con la revisión de la cuenta pública 2013 de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

PEP informó que para el cumplimiento de los servicios de los convenios 421003833 y 420843824 no autorizó a la UTTAB la subcontratación. Pero la ASF detectó que la universidad tabasqueña subcontrató a terceros para realizar la totalidad de los trabajos. 

En el primer caso se abrió un expediente y dos funcionarios públicos fueron sancionados por un presumible daño patrimonial que sumó 6 millones 336 mil 967 pesos.

Mientras que en el segundo caso, la auditoría presumió un probable daño o perjuicio a la hacienda pública por un monto de 5 millones 253 mil 292 pesos, porque no se acreditó que se realizaron los servicios.

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La tarifa de ingreso a uno de los baños de la CDMX. Foto: Frida Betanzos/ La-Lista

¿Cuánto ganan con los baños del Metro?

¿Por qué un empresario del sector inmobiliario, — como Cöhen Rabinovitz, quien aparece en una docena de actas constitutivas como accionista —, y una empresa dedicada a la industria petrolera se interesarían en un negocio que tiene que ver con baños en el Metro de la CDMX?

Porque limpios o sucios, algunos sin jabón, otros descompuestos, con papel de baño limitado, poco accesibles para las personas con movilidad reducida y no inclusivos, los baños públicos en las estaciones de Metro de la Ciudad de México son un negocio casi imperceptible por el que se paga una modesta contraprestación.

Aunque se trata de una experiencia que los usuarios buscan evitar, muchas veces la necesidad apremia y obliga a utilizar, pese a que en muchos casos su costo rebasa incluso el boleto del Metro. Si bien en algunas estaciones mantiene una tarifa de 5 pesos, en la mayoría subió a 6 pesos y en otras el precio llega a los 7 pesos.

Algunas de las obligaciones que las empresas deben cumplir por la comercialización de los sanitarios del Metro son el pago de una contraprestación, determinada por la Ley del Régimen Patrimonial y del Servicio Público, que cada año se actualiza, y una póliza que garantice que otorgará el recurso comprometido mes a mes al STC.

Para la empresa Estrategias y Soluciones Legales A&F, con permiso para operar nueve sanitarios públicos en diversas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo Metro, es un negocio bastante rentable. Según la información proporcionada vía transparencia, sólo por concepto de contraprestación, la firma debe entregar al gobierno una cantidad de 103 mil 365.42 pesos mensuales por todos los sanitarios que administra.

Esta cifra se desglosa de la siguiente manera: Cuauhtémoc, en la Línea 1, 6 mil pesos; Pantitlán, en la Línea 5, 13 mil 375.42 pesos; y en la Línea B, que va de Buenavista a Ciudad Azteca, los montos varían desde 9 mil hasta 14 mil pesos en estaciones como Río de los Remedios, Nezahualcóyotl, Impulsora, Muzquiz y Ecatepec.

La-Lista realizó un ejercicio de observación de los flujos de usuarios en los baños de dos estaciones del Metro de CDMX: Pantitlán y Tasqueña, al ser de las más concurridas, de acuerdo con el STC.

Mujeres con sus hijos, oficinistas, estudiantes, hombres con mochilas de trabajo, vendedores que tienen sus puestos al interior de la estación, todas las personas que necesitan utilizar los baños públicos del Metro Pantitlán tienen que pagar 6 pesos. 

“Son seis pesos, ahí dice en la entrada”, exclama la mujer encargada de la limpieza de los sanitarios. 

“Ah, ya cobran 6”, dice una usuaria con expresión de asombro a su compañero de viaje.

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Baños públicos en una de las estaciones del STC. Foto: Frida Betanzos/ La-Lista

En la estación Pantitlán, en tan sólo 4 minutos durante una hora pico 21 personas ingresaron a los baños, y en 90 minutos la cifra subió a 137 personas, representando 822 pesos en ese lapso. Si hacemos un cálculo con estos datos a lo largo del mes, considerando 19 horas de operación diaria y 31 días, las ganancias de este sanitario ascienden aproximadamente a 484 mil pesos. Es decir, 36 veces más de lo que pagan por la contraprestación en esa estación.

Por otro lado, en el Metro Tasqueña, en tan solo una hora, de 10 a 11 de la mañana, 80 personas ingresaron a los sanitarios, generando un ingreso de 400 pesos. Si mantenemos esta tasa de ingreso constante, y consideramos las mismas 19 horas de operación diaria durante 31 días, se recaudarían un estimado de 233 mil 600 pesos al mes.

En el caso de Espacios CET, que tiene permiso del uso de seis espacios, la contraprestación para el gobierno es de un total de 53 mil 728 pesos al mes, según los registros a los que se tuvo acceso. 

En la estación Observatorio de la Línea 1, la contraprestación es de 11 mil 336.40 pesos; en Tacuba de la Línea 2 es de 8 mil 440 pesos; en Deportivo 18 de Marzo de la Línea 6 son 9 mil 400 pesos; en Martín Carrera de la Línea 6 son 5 mil 739.50 pesos; en Barranca del Muerto de la Línea 7 se trata de 10 mil 528.80 pesos y en el Rosario de la Línea 7 son 8 mil 292.30 pesos.

Tus Espacios Públicos tiene al menos tres baños públicos en el Metro de la capital del país, en las estaciones Santa Martha de la Línea A; Tasqueña, de la Línea 2 y UAM-I de la Línea 8. Sin embargo, el Metro sólo tiene disponible los datos de la contraprestación mensual de la citada estación de la Línea 8, que hasta 2017 ascendía a 10 mil 54 pesos.

Si sumamos las ganancias estimadas en sólo dos estaciones, Pantitlán y Tasqueña, se aproximan a los 717 mil 600 pesos mensuales. Si consideramos que el pago de la contraprestación no rebasa, en ningún caso, los 15 mil pesos al mes, podemos ver que el negocio de los baños deja un considerable margen de beneficio, de acuerdo con el cálculo realizado.

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Las empresas beneficiarias tienen otras obligaciones, por ejemplo, deben dar mantenimiento, conservar los locales permisionarios y ajustarse al denominado Plan Verde de la Ciudad de México. Sin embargo, en un recorrido por varios baños del Metro se constató que no todos los baños cumplen con las condiciones mínimas.

En uno de los baños que se encuentran en Tasqueña, el que está saliendo del andén, no servía el despachador de jabón, por lo que las usuarias debían utilizar una pequeña botella de Electrolit con jabón para lavarse las manos. Ahí mismo, la llave del agua estaba floja y bailaba, y sólo funcionaban dos baños y en el otro un letrero anunciaba: “Solo pipí”. A unos metros, en el otro espacio de sanitarios, el que está en el pasillo, subiendo las escaleras, en el baño de mujeres el jabón estaba en una botella de Coca-Cola y uno de los baños tenía una hoja de papel con el anuncio: “No funciona”.

En 18 de Marzo, uno de los inodoros también estaba inservible. Además, la máquina que surte jabón estaba a punto de caerse, por lo que las personas debían presionarla con cuidado si querían obtener un poco de espuma para el aseo de sus manos. 

Al aparato de papel para secarse las manos se le caía la tapa, entonces la persona de la limpieza era la encargada de dar a cada usuario “cuadritos”.  Sobre el lavabo lucía una pequeña cajita de color azul vacía. “Gracias por su propina”, tenía escrito.

Democratizar los sanitarios del Metro

“¿Por qué en los aeropuertos no cobran los baños y en las estaciones de metro si?”, pregunta Salvador Herrera, urbanista con Maestría en Arquitectura del Paisaje.

“Porque en México hay esta lógica gubernamental que segrega a la población”, se responde el experto en temas de planeación urbana, movilidad y transporte.

“El aeropuerto es un equipamiento igual que una estación de metro y cumple la misma función, que es transportar, y se hace exactamente lo mismo, pagar un boleto para transportarse. Entonces, ¿cuál es la lógica de que en uno cobren y el otro no? La única explicación es que el transporte público sigue teniendo ese nivel inferior en las decisiones públicas”, añade.

En varias ciudades del mundo los sanitarios del transporte público son gratuitos, como en París y Japón. Para Salvador Herrera, fundador del despacho Urbanística, los baños no deberían ser un negocio privado porque están dentro de un equipamiento público y una necesidad básica no debería ser un negocio. Está de acuerdo con que se concesione el servicio, pero opina que el permisionario debería recibir un pago por parte del gobierno para que los mantengan en óptimas condiciones, pero eso no pasa.

“El gobierno se desentiende y deja que el privado haga lo que quiera. Ahora tienen esas máquinas que no dan cambio, y entonces, lo ponen a 6 pesos y ¿quién trae una moneda de un peso? Se permite que una infraestructura de primera necesidad para la población se rentabilice”, comenta.

Salvador Herrera explica que en la mayoría de las ciudades del mundo ha cambiado el enfoque sobre el transporte público al pasar de ser un servicio público asociado sólo a una infraestructura para ser parte del concepto de movilidad, que pone en el centro a las personas.

“Como en la Constitución de México se establece como un derecho humano el derecho a la movilidad, una forma de hacer operativo ese derecho a la movilidad, que además hace operativo el derecho a la ciudad, es elevar la calidad del transporte público y un aspecto primordial de la calidad, en un aspecto súper específico, pues son los sanitarios”, comparte.

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Los menores de edad también pagan. Foto: Frida Betanzos/ La-Lista

El 24 de febrero pasado, La-Lista publicó un trabajo sobre la afectación de la orina en las escaleras del Metro. Entre 2017 y 2021, al menos 32 escaleras eléctricas se descompusieron por la orina de personas, de acuerdo con el reportaje de Alexis Ortiz. Esto hace pensar que también hay personas que no pueden pagar por ir al baño en las estaciones de Metro.

El urbanista consultado por La-Lista dice que muchos gobiernos argumentan que no ponen baños o sanitarios porque “no hay dinero” o “porque la gente no los cuida”, pero que “gracias a que entendemos ahora a la movilidad como derecho esas razones tienen que desaparecer”. 

“Se tienen que encontrar las formas de que el servicio de sanitarios sea de calidad y esto va por la inversión en el transporte público”, opina.

El analista dice que si bien no abundan los recursos para el transporte público “porque los gobiernos no quieren”, “eso no es justificante para el cobro”, pues se pueden hacer esquemas en los que los comercios que están en las estaciones del Metro, con sus rentas, financien los sanitarios.

De acuerdo con el reporte financiero del Metro, disponible hasta el 31 de diciembre de 2022, el Sistema de Transporte Colectivo reportó una recaudación por concepto de ventas de boletos, tarjetas inteligentes, así como por el arrendamiento de locales comerciales y de publicidad, por 5 mil 107 millones 979 mil 287 pesos. 

Por conceptos, según el citado documento, el arrendamiento de locales y espacios comerciales sumó ingresos por 151 millones 461 mil 639 pesos, mientras en 2021 fue de 157 millones 361 mil 690 pesos. 

El Instituto Internacional del Agua de Estocolmo (Stockholm International Water Institute, SIWI) señala en un artículo publicado en 2021, que los baños en espacios públicos son también “mucho más que una cuestión de planificación urbana, son una cuestión de salud, higiene y dignidad. Son una cuestión de derechos humanos y deben abordarse como tales”.