La Sedena operará por 50 años el nuevo aeropuerto, según título de concesión
La concesión del nuevo aeropuerto a la Sedena aplicaría hasta el año 2072 y podría ser prorrogado si así lo acuerdan las partes.
La concesión del nuevo aeropuerto a la Sedena aplicaría hasta el año 2072 y podría ser prorrogado si así lo acuerdan las partes.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tendrá por 50 años la concesión del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), de acuerdo con el título de concesión publicado este viernes en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
“La presente Concesión tendrá una vigencia de 50 (cincuenta) años, contados a partir del inicio de operaciones del Aeropuerto. La vigencia podrá ser prorrogable en términos del artículo 15 de la Ley”, detalla el capítulo IV de la concesión.
La titularidad del AIFA fue cedida a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a la “Empresa de Participación Estatal Mayoritaria”, constituida en un 99% por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y un 1% por el Banco Nacional del Ejército y las Fuerzas Armadas, representada por el general de brigada René Titulo Miranda.
La empresa fue constituida el 12 de enero de 2021, ante la notaria pública 53 del Estado de México, Claudia Gabriela Francóz Gárate, y fue inscrita ante el Registro Público del Comercio el 16 de febrero de 2021.
El título de concesión establece el Ejército en su propiedad las instalaciones y equipos comprendidos en el área contenida en la poligonal del AIFA, y establece que, durante el tiempo de sesión, los terrenos del sólo podrán ocupantes para operaciones aéreas.
Se estima que el AIFA entre en operaciones el 21 de marzo del 2022, aunque antes de ello, la SCT deberá entregar el permiso correspondiente, una vez que la Sedena acredite que la obra está terminada y se cuenta con el programa de desarrollo.
A la par, establece que la empresa estatal deberá reportar y solicitar autorización a la SCT para la contratación de servicios aeroporturarios y de terceros.
Además, la obliga a garantizar “los servicios aeroportuarios y complementarios que se requieran, de acuerdo a su clasificación, clave de referencia y categoría”, así como resolver cualquier inconveniente relacionado con la prestación de servicios de terceros.
Sobre el mantenimiento y modernización del aeródromo, detalla que la concesionaria deberá actualizar el Programa Maestro de Desarrollo cada cinco años, así como presentar con anticipación cualquier cambio que vaya a realizar.
A la par, la hace responsable de “ conservar y mantener el Aeropuerto en condiciones de seguridad, eficiencia y niveles de calidad requeridos, de conformidad con la legislación aplicable, por lo que será responsable de que se lleven a cabo los trabajos de conservación y mantenimiento necesarios”.
Sobre las tarifas, éstas serán acordes a las autorizadas por la Secretaría de Hacienda Crédito Público (SHCP), siempre y cuando mantenga su carácter de empresa de participación estatal mayoritaria.
En caso de pasar a manos de privados, las tarifas se establecerán con base en las determinaciones de organismos reguladores de competencias.
También desliga al gobierno federal de alguna garantía sobre el rendimiento económico y financiero del aeropuerto.
Finalmente, el título de concesión hace responsable al Ejército de las medidas de protección al ambiente, así como de brindar información necesaria para el desarrollo de las funciones del aeropuerto.