Fiscal de distrito de NY convoca a un gran jurado en la investigación criminal contra Trump
Donald Trump ha dicho que está siendo "injustamente atacado y abusado por un sistema político corrupto". Foto: Alex Brandon / AFP

Fiscales de Nueva York convocaron un gran jurado especial para revisar la evidencia en una investigación criminal de los acuerdos de negocios de Donald Trump.

La situación apunta a que la oficina del fiscal del distrito de Manhattan está realizando acciones para buscar cargos como resultado de esta investigación de dos años, que incluye una larga batalla legal para obtener los registros de impuestos de Trump.

Cyrus Vance Jr, el fiscal de distrito de Manhattan, está realizando una amplia investigación en una variedad de asuntos como los pagos a mujeres para guardar silencio en favor de Trump, valuación de propiedades y compensación a empleados.

Vance ha usado un gran jurado durante el curso de su investigación para emitir citatorios y obtener documentos. Ese panel siguió trabajando mientras otros grandes jurados y actividades de la corte se cerraron a causa de la pandemia del coronavirus.

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La investigación incluye el escrutinio de la relación de Trump con sus prestamistas; una donación de tierra que hizo para calificar a una deducción de impuestos; y reembolso de impuestos que pidió su compañía sobre millones de dólares en los pagos de consultorías que realizó.

El nuevo gran jurado podría en algún momento recibir la solicitud de considerar la restitución de acusaciones. Mientras trabaja en ese caso, también considerará otros asuntos. The Washington Post, que reportó por primera vez la noticia, detalló que el gran jurado se reunirá tres días a la semana durante seis meses. La oficina de Vance declinó comentar al respecto.

En una declaración, Trump llamó a la medida “una afrenta a los casi 75 millones de votantes que me apoyaron en la elección presidencial”.

El nuevo gran jurado es la última señal del aumento de la importancia de la investigación criminal del expresidente republicano y de su compañía, The Trump Organization.

“Los fiscales están convencidos de que tienen un caso. Al menos así es como lo leo”, declaró Rebecca Roiphe, una exfiscal de Manhattan, a The Washington Post.

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Letitia James, procuradora general de Nueva York, dijo la semana pasada que había asignado a dos abogados para trabajar con la oficina de Vance después de que su investigación civil de Trump se convirtiera en un asunto criminal.

James, también demócrata, declaró que su oficina mantiene una investigación civil de Trump. No habló sobre el motivó que llevó a su oficina a ampliar el rango a investigación criminal.

En meses recientes, Vance contrató a un fiscal que estuvo encargado de los casos de mafia, Mark Pomerantz, para ayudar a realizar la investigación y ha estado entrevistando testigos, incluyendo al exabogado personal de Trump, Michael Cohen.

Vance no quiso buscar la reelección y dejará el cargo a finales de año, lo que significa que es probable que el caso Trump pueda pasar a su sucesor. No hay seguridad de quién se quedará en el cargo después de las elecciones del mes próximo.

Trump emitió una declaración la semana pasada quejándose de que lo habían “atacado injustamente y que un sistema político corrupto abusa de él”. Afirmó que las investigaciones son una “cacería de brujas” y parte de un plan democrático para silenciar a los electores e impedir que contienda de nuevo por la presidencia.

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El martes promovió una encuesta sin nombre “que indica que estoy a la cabeza de las Primarias de la Presidencia Republicana y la Elección General de 2024”. Sus asistentes dijeron “que extraña terriblemente ser presidente” y que se enoja cuando la gente cuestiona si es en serio que esté considerando otra contienda, según Político.

En febrero, la Suprema Corte de EU animó la investigación de Vance al abrir el camino para que el fiscal hiciera cumplir un citatorio para la firma de contadores de Trump y obtener ocho años de reembolso de impuestos y documentos relacionados del expresidente, The Trump Organization y otras entidades de Trump.

Los documentos están protegidos por las reglas de confidencialidad del gran jurado y no se espera que se hagan públicas.

La investigación de Vance al parecer se ha enfocado en las últimas semanas en el jefe de finanzas de Trump de mucho tiempo, Allen Weisselberg. Su exnuera, Jen Weisselberg, está cooperando con ambas investigaciones.

Ella le ha proporcionado a los investigadores muchos registros de impuestos y otros documentos, mientras revisan si algunos empleados de Trump recibieron compensaciones fuera de los registros, como departamentos o colegiaturas.

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Allen Weisselberg fue citado en la investigación civil de James y testificó dos veces el año pasado. Su abogado declinó comentar cuando le preguntaron si lo habían citado para testificar ante el nuevo gran jurado. Además, se presentó un mensaje solicitando comentarios al abogado de Jen Weisselberg.

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