La rareza de ser humano

Para el budismo, el hecho de que portes forma humana en el aquí y ahora es un privilegio inimaginable.

La tradición habla de un precioso renacimiento humano que has conseguido y que debes honrar, cuidar, proteger y desarrollar.

En la metáfora ellos explican que encarnar en esta forma física es tan especial, única y exclusiva como si una tortuga marina nadando en el océano sacara su cabeza a la superficie y un anillo de oro se le enganchara en su cuello.

¿Cuántas veces puede suceder ese instante? ¿Se imaginan un momento tan sublime?

De igual modo un fenómeno mágico, espiritual, lleno de misterio rodea nuestro ser en este mundo, la posibilidad de ocupar este cuerpo en esta realidad de espacio-tiempo que muchas veces tomamos a la ligera.

¿Qué vamos a hacer con esto? 

¿De qué manera nos comportamos con nosotros mismos?

¿Cómo te tratas?

¿Cómo te hablas?

¿Cómo te miras y cuidas?

¿El trato que nos damos es de respeto infinito conociendo nuestra naturaleza tan exclusiva o, por el contrario, nos comportamos con bajeza hacia nuestra bellísima humanidad?

Te hago estas preguntas no con el fin de angustiar y comenzar a llenarnos de culpas sino para darnos una sacudida energética de esas inevitables, urgentes y poderosas.

Encarnamos este milagro perfecto, cada uno de nosotros en magnifica humanidad, dándonos cuenta del nuevo mundo, de los cambios profundos que estamos transitando juntos, respirando el mismo aire en inmensa interconexión decidiendo y eligiendo cada uno de nuestros pensamientos.

Es el momento de honrarnos.

Ritual para el cambio de paradigma

El cambio de paradigma está en tu cuerpo, en la coherencia que logras entre corazón y cerebro, al activar tu autobendición, al confiar en que tus células son perlas en tu cuerpo.

Cuando haces estas prácticas, una activación iniciática comienza, quiere decir que el discípulo despertó al maestro que llevas dentro y que puedes comenzar a entender desde otra perspectiva que todos los pronósticos, herencias genéticas paralizantes, mandamientos repetidos y otras cadenas se cortan de raíz cuando eliges cambiar tu narrativa

Si nos quedamos en la cabeza, en la comprensión intelectual de este potencial que somos, nos falta una parte importantísima que ahora comienza a ser reconocida.

Debemos integrar opuestos y fuerzas.

Tenemos que establecer un esfuerzo consciente para despertar y responsabilizarnos de nuestra grandeza.

De nuestra rareza de ser humanos.

Activa la autobendición como ritual cotidiano, aquí puedes encontrar el link para que la hagas y la compartas con tu gente.

Sus beneficios son múltiples y sin límites pero sobre todo te vuelve al cuerpo, a una comprensión absoluta de tu milagro para que lo honres en permanencia y constancia.

Es un privilegio ser humanos, aprovechémoslo, tomemos responsabilidad, encontrémonos, cocreemos, fomentemos la solidaridad y la atención plena en el agradecimiento de este momento presente.