Opinión

Cartas a Valentino/Maternidad en rebeldía

No soy la mejor mamá… ni la peor… soy la mamá que puedo ser. Y con dicha premisa quiero arrancar esta columna semanal que está dedicada a mi hijo: Valentino. A modo de cartas, textos me permitirán hablar sobre la maternidad en rebeldía… esa maternidad en tiempos donde hay que criar entre violencia y desigualdad, mas con un amor que no es incondicional, pero sí constante e inacabable.

Publicado por:

Soy periodista y soy mamá. No es sólo una frase que podría ser biografía en X (antes Twitter), son las dos caras en las que mi vida se dividió desde el 14 de febrero del 2022 cuando, después de semanas de retraso, una prueba de embarazo me confirmó que vivías dentro de mí. A veces parecen dos cosas incompatibles cuando a lo de periodista se le agrega: de tiempo completo. Convencida del derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo, soltera, crítica, de izquierda, antipatriarcal y con tendencias a nuevos acuerdos amorosos… no soy una mamá como las que quizá verás en películas del siglo XX, ni como las madres que me criaron a mí, yo soy una mamá en estado de rebeldía.

Soy una mamá convencida cada vez más de que traer una persona a este mundo es un asunto que no debe quedarse en el ámbito de lo privado, detrás de la puerta de una recámara, que si la industria del cuidado, como dice la periodista Daniela Rea en su libro Fruto, implica el 25% del PIB nacional, es algo de lo que debe hablarse en la esfera de lo público, exigir a los que aspiran a gobernarnos para hablar de políticas que nos permitan una maternidad de menos sacrificio y más consciente. Porque la crianza debe ser colectiva.

Tengo 35 años y mi hijo acaba de cumplir su primer año. No fue un bebé planeado, pero fue un bebé absolutamente deseado desde mucho antes de ser concebido. Pero este texto no es para romantizar la llegada de un hijo al mundo sino porque creo que la maternidad y la crianza son asuntos poco tratados en el periodismo, que requieren un análisis, que requieren que pongamos en la agenda temas como la violencia obstétrica que también cometen los pediatras que asisten en el parto, como el elevadísimo número de cesáreas que se practican en México sin razón, la infantilización de las madres primerizas o el interminable bombardeo de una industria comercial que representa entre el 16 y el 21% del consumo nacional anual. ¡Y cómo no, si los niños representan casi el 30% de la población del país!

Desde el periodismo tenemos una deuda para hablar más sobre la muerte gestacional, sobre la infertilidad, sobre la adopción, sobre maternidades obligadas, adolescentes, sobre las maternidades en contexto de migración y sobre si uno elige o no cómo alimentar a nuestros bebés. Y porque no sólo implica tener datos duros sino porque muchas mamás, como yo, buscamos testimonios reales (sin pose) de otras mamás que tienen dudas, miedos, culpas, ganas de hablar y pocos oídos que se presten.

Valentino, tú me has retado no sólo a renunciar a pensar sólo en mí, a ser paciente, a ceder, a criar en conjunto con alguien más, a construir en pareja paternidades presentes, a amar a pesar de que los escenarios no sean perfectos; también a informarme, a derribar mitos, a defender mi manera de construir una infancia más consciente y responsable, a no tener miedo de que crezcas descalzo para darte la oportunidad de conocer el mundo y sus texturas, a pesar de que desde mi madre hasta las señoras en la calle me lo cuestionaran.

Desde lo que aprendí a hacer quiero ser una vía para que otras madres, quizá otras madres periodistas, trabajadoras, encuentren la información que tan difícil es de hallar… quizá compartiendo desde mi particular forma de ejercer la maternidad otras sepan que no son las únicas que pasan noches llorando de culpa por tener que dejar a niños en guardería mientras trabajan, que no son las únicas con miedo a que el menú de la semana no esté “lo suficientemente bien balanceado” o por intentar sacarle al día 48 horas para cumplir todos los roles que la sociedad capitalista y patriarcal nos impuso que debíamos cumplir.

Este también será un espacio para otras mamás, para sus dudas, para sus miedos, para sus éxitos, para los fracasos de todas. Porque la crianza amorosa debería ser colectiva e informada.

Valentino: escribir es la mejor forma que tuve siempre para comunicarme, pero escribirte a ti me parece un acto de amor y de memoria que espero te acompañe siempre como testigo de que ser tu mamá es un acto de rebeldía social, un desafío a mi propia naturaleza desapegada e independiente, una provocación a mi desconfianza natural, mi tendencia al control y mi miedo al abandono. Porque mi sueño para ti es que seas una persona empática, respetuosa, consciente y libre. Sobre todo, eso, ¡libre!

Entradas recientes

  • México

Gobernador de Michoacán pide reabrir investigación por homicidio de Homero Gómez

El activista Homero Gómez fue localizado sin vida en enero de 2020 tras días de permanecer desaparecido.

13 mayo, 2024
  • Entretenimiento

Boletos Natanael Cano en Guadalajara 2024: precios oficiales

'El rey de los corridos tumbados' regresa al Auditorio Telmex.

13 mayo, 2024
  • México

Normalistas de Ayotzinapa lanzan petardos a fachada de Palacio Nacional

Normalistas de Ayotzinapa lanzaron petardos a la fachada del Palacio Nacional, en el Zócalo de la CDMX lo que dejó…

13 mayo, 2024
  • Cultura

Inteligencia Artificial interviene el ‘Réquiem’ de Mozart en la UNAM

Este espectáculo se presentó el fin de semana en El Aleph, festival de arte y ciencia.

13 mayo, 2024
  • The Guardian

El nuevo modelo de IA GPT-4o es más rápido y gratuito para todos los usuarios, anuncia OpenAI

La empresa tecnológica de IA revela un nuevo modelo insignia, denominado GPT-4o, que 'es el futuro de la interacción entre…

13 mayo, 2024
  • México

¿Cuándo inicia la temporada de huracanes 2024?

La Conagua dio a conocer la lista de nombres.

13 mayo, 2024