‘Las empresas pueden ser autogestionables y exitosas': Omar Cabrera
La gestión empresarial en América Latina está viviendo un cambio radical, impulsado por la propuesta vanguardista de Omar Cabrera, fundador de Métrika Empresarial. Esta academia, establecida hace más de una década en Torreón, México, se ha convertido en un pilar fundamental en la capacitación de emprendedores, enfocándose en la creación de empresas autogestionables. Cabrera no solo busca mejorar la eficiencia y la rentabilidad de las empresas; su verdadera misión es liberar a los empresarios de la necesidad de estar inmersos en las operaciones cotidianas.
Desde su creación, Métrika Empresarial ha logrado expandir su influencia más allá de las fronteras mexicanas, llegando a países como Chile, Colombia, Ecuador y Canadá. Más de 1,200 empresarios han adoptado el enfoque que Cabrera promueve, una metodología que fusiona tecnología de punta, coaching personalizado y una transformación esencial en la forma de concebir la gestión empresarial.
Este modelo ha permitido que muchos emprendedores logren no solo el éxito financiero, sino también una significativa libertad personal, liberándolos de las cadenas que a menudo los atan a la gestión diaria de sus negocios.
En sus primeras etapas, Métrika operaba como una consultora tradicional, ofreciendo servicios individualizados para optimizar las operaciones de las empresas. Sin embargo, en 2018, Cabrera se dio cuenta de que este modelo limitaba tanto el impacto como el alcance de su trabajo.
Al percibir la necesidad de un enfoque más escalable, optó por transformar Métrika en una academia digital que ofrece programas de formación en línea, permitiendo así a los empresarios acceder a los recursos desde cualquier lugar del mundo. “Nos dimos cuenta de que los manuales de operación no eran suficientes. La gente necesita hacerse dueña del resultado”, señala Cabrera, destacando la importancia de cambiar la mentalidad de los empresarios.
La metodología de Métrika se centra en la creación de empresas autogestionables, un concepto que desafía la noción convencional de liderazgo. Según Cabrera, una empresa autogestionable es aquella que puede operar con éxito sin la supervisión constante del fundador, lo que permite al empresario disfrutar de una mayor libertad, tanto personal como financiera. Para lograr este objetivo, Cabrera ha diseñado un sistema basado en cinco pilares fundamentales: finanzas, ejecución, talento, ventas y gestión. Cada uno de estos pilares es crucial para que los empresarios puedan delegar de manera efectiva, asegurando que su negocio funcione sin contratiempos incluso en la ausencia del fundador.
Un caso destacado que ilustra la efectividad de esta metodología es el de Jonathan, un empresario chileno que, tras implementar las enseñanzas de Métrika, logró que su empresa no solo sobreviviera durante su ausencia, sino que también creciera. “La última vez que me fui de vacaciones, la empresa creció más cuando no estaba”, comenta Jonathan, demostrando que la libertad de tiempo y la rentabilidad no son conceptos excluyentes. Otro ejemplo inspirador es el de Karen, una empresaria costarricense que, en solo seis meses, logró desvincularse de las operaciones diarias de su empresa, permitiéndole dedicar tiempo a nuevos proyectos sin sacrificar el crecimiento de su negocio.
El programa más emblemático de Métrika, The Founder’s Code, ha sido un vehículo esencial para difundir esta filosofía entre los empresarios de la región. Este programa se distingue por su enfoque práctico y colaborativo. A diferencia de muchas escuelas de negocios que enseñan teoría, en Métrika se promueve la implementación activa de estrategias junto al equipo de trabajo, ofreciendo un soporte continuo que permite a los empresarios aplicar inmediatamente lo aprendido.
Cabrera enfatiza que el éxito de una empresa depende no solo de la estructura y los procesos implementados, sino también de la mentalidad del fundador. “Las empresas no son el fin, son un medio para conseguir tu libertad”, asegura, subrayando la importancia de cultivar una visión a largo plazo que permita a los emprendedores disfrutar de los frutos de su esfuerzo sin quedar atrapados en la rutina diaria. Esta libertad radica en confiar en un equipo capacitado y en la creación de sistemas sólidos que faciliten el crecimiento sostenible.
Además, Cabrera subraya la importancia de desarrollar tres habilidades críticas que todo empresario debe dominar para alcanzar la autogestión: una mentalidad de crecimiento, la confianza en su equipo y la capacidad de ejecutar estrategias. “La ejecución es lo que convierte las ideas en resultados. De nada sirve tener la mejor estrategia si no se lleva a cabo”, recalca, enfatizando la necesidad de una acción decidida y constante.
El impacto de Métrika Empresarial ha sido significativo en la forma en que muchos emprendedores perciben y gestionan sus negocios. A medida que más empresarios en América Latina adoptan este enfoque, Cabrera sigue ampliando su alcance y compartiendo su visión a través de nuevos proyectos. A finales de este año, tiene previsto lanzar su primer libro, El Camino del Founder, donde compartirá su experiencia y ofrecerá herramientas para construir empresas autogestionables. Este libro no solo será una guía práctica, sino también una fuente de inspiración para una nueva generación de emprendedores.
La propuesta de Cabrera y la metodología de Métrika han revolucionado la forma de gestionar los negocios en América Latina. A medida que los empresarios se alejan de la dependencia en la operación diaria, también descubren una nueva manera de abordar el liderazgo y la gestión empresarial. La verdadera riqueza empresarial, según Cabrera, radica en la capacidad de vivir sin estar atado a las operaciones cotidianas.
En conclusión, la influencia de Omar Cabrera y su academia Métrika Empresarial va más allá de lo convencional, proponiendo un enfoque que invita a los empresarios a redescubrir su propósito. En un entorno empresarial cada vez más competitivo, la libertad y la autonomía se están convirtiendo en activos valiosos. La visión de Cabrera es un llamado a los emprendedores para que transformen sus empresas en vehículos de crecimiento y desarrollo personal, donde el verdadero éxito se mide no solo en términos financieros, sino también en la calidad de vida que se puede lograr al desvincularse de las exigencias del día a día.