‘El Conejo’, el narco colombiano que traía lanchas rápidas de Huatulco a Ixtapa

Harold Mauricio Poveda Ortega, alias “El Conejo”, comenzó a rendir su testimonio este miércoles en la Corte Federal del Distrito Este en Brooklyn, Nueva York, en el juicio que enfrenta Genaro García Luna, una de las principales autoridades de seguridad en México durante dos administraciones, acusado de recibir sobornos del Cártel de Sinaloa.

Poveda Ortega, originario de Colombia, ha declarado que trabajaba como un enlace entre los “grandes narcos colombianos” con los “grandes narcos de México”.

Comenzó en el año 2000 trayendo cargamentos de 100 y 200 kilos de cocaína a través de lanchas rápidas que llegaban a las costas del Pacífico mexicano desde Huatulco, en Oaxaca, hasta Ixtapa Zihuatanejo, en el estado de Guerrero.

Como sabía que esa zona era controlada por Arturo Beltrán Leyva, buscó la manera de contactar a Ismael “El Mayo” Zambada, para pedirle protección y hacer negocios con él.

“El Mayo” era “súper buena onda”, dijo el testigo, por lo que comenzó a hacer negocios con él para traer droga a bordo de barcos pesqueros.

El testigo dijo que operaba entre Colombia y México y en una ocasión le pidió ayuda a “El Mayo” para volver a su país sin exponerse a las autoridades de nuestro país. Fue así como uno de los líderes del Cártel de Sinaloa contactó a su hermano, Jesús “El Rey” Zambada y le encargó que lo “despachara” para Colombia.

Relató que lo llevó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y lo puso en manos de dos policías que lo escoltaron hasta el avión sin necesidad de que pasara por migración.

Después surgió una guerra en Colombia entre los narcos Wilber Varela y Diego Montoya y “El Conejo” temía por su vida, por lo que le pidió a su socio “El Mayo”, que lo apoyara para regresar a México.

A su vuelta pudo conocer a Arturo Beltrán Leyva gracias a su contacto con “El Mayo” y comenzó a trabajar con él.

Cuando le mostraron una foto de quien fue líder los Beltrán Leyva en los monitores de la sala donde se lleva el juicio contra García Luna, “El Conejo” lo llamó: “Es mi tío Arturo Beltrán Leyva”.

-¿Qué quiere decir con mi tío? ¿Eran parientes?, le preguntó el fiscal

-No, es de cariño, -respondió Poveda. Fue una relación de padre a hijo.

A partir de su regreso a México, “El Conejo” comenzó a coordinar la compra de cocaína desde Colombia en donde un cargamento podía tener paquetes de distintos líderes del Cártel de Sinaloa, Algunos pedían 100 kilos, otros hasta una toneladas o más. Y se organizaban para hacer un pedido en conjunto y Arturo Beltrán Leyva le daba el volumen total para traerlo a México

De 2000 a 2010, “El Conejo” calcula haber traído a México un millón de kilos de cocaína, esto es mil toneladas. “Trabajábamos mucho, la traíamos en barcos, lanchas, contenedores, por donde se pudiera”, expresó. “No dejábamos de producir”