RoboDoc: cómo los robots de India cuidan a los pacientes de Covid
Mitra y el príncipe Eduardo. Robots como Mitra se usan para reducir el riesgo de infección en el personal médico. Foto: Mitra

Kalpana Sunder/The Guardian

Con solo metro y medio de altura, Mitra navega los pasillos del hospital, guiada por tecnología de reconocimiento facial y con una tableta en su pecho que permite que los pacientes y sus seres queridos se vean.

La desarrolló en años recientes la startup de Bengaluru Invento Robotics, Mitra cuesta alrededor de 13,600 dólares y, por el riesgo reducido de infección para los doctores, se volvió muy popular en hospitales indios durante la pandemia. 

Desde que apareció en las noticias en su debut en 2017 en una cumbre internacional, donde saludó a Ivanka Trump e interactuó con el primer ministro de la India Narendra Modi, el uso de Mitra aumenta en hospitales que tratan a pacientes con Covid-19.

“Mitra era originalmente para asilos, pero se adaptó en la pandemia para asistir a doctores y enfermeras con la toma de signos vitales, y para ayudar en consultas”, dice Balaji Viswanathan, director ejecutivo de Invento Robotics, que ahora exporta los robots a cinco países incluídos EU y Australia. 

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India solo tiene tres robots por cada 10,000 trabajadores, pero la industria doméstica crece rápidamente, muy impulsada por la pandemia. 

Las startups exitosas crecen y de acuerdo al último reporte de la Federación Internacional de Robótica (IFR), India está ahora en los primeros 10 países para la instalación anual de robots en las industrias. Las ventas de robots industriales alcanzaron un nuevo récord de 4,771 en 2018, 39% más que el año pasado. 

De acuerdo al diario Business Standard, se espera que el mercado de robótica en India crezca 20% entre 2017 y 2025. Desde la hospitalidad hasta hospitales, varios sectores adoptan la automatización para reducir costos, tiempos o para lograr más precisión y, en algunos casos, salvar vidas. 

Otra startup llamada Genrobotics, del estado del sur Kerala, colaboró con autoridades locales para adaptar su robot con forma de araña Bandicoot para limpiar drenajes y alcantarillas, que antes se limpiaban manualmente, es un trabajo notoriamente y desagradable. 

“Encontramos que pepenar manualmente es un problema global, y que no hay una manera eficiente de limpiar alcantarillas”, dice Rashid K, el director de Genrobotics. 

Ahora más de 11 estados de la India usan el primer robot limpiador de alcantarillas. 

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Babu K Y es el director de Hand to Hand India, una ONG que trata de llevar a Bandicoot a Tamil Nadu. “Aunque la máquina es cara”, él dice, “puede prevenir que se pierdan vidas humanas en esta operación peligrosa y también es muy fácil de operar, ayuda a alcanzar mayores profundidades que de manera manual”. 

Desde 2011 el ejército indio usa robots Daksh equipados con visión de rayos x y mecanismos de detección de amenazas químicas, biológicas, radiológicas y nucleares. GreyOrange de Delhi ahora hace robots para el creciente sector de almacenes y automatización. 

De acuerdo a un reporte de la IFR en 2017, el sector automotriz de India fue el cliente principal para robots industriales, tuvo el 62% del total de los proporcionados. Maruti Suzuki India usó robots en sus plantas de Manesar y Gurgaon y Mahindra tiene una línea de soldadura robótica en su planta en Nashik. Tata Motors usa un robot industrial hecho en India para levantar cargas pesadas. 

Aunque muchos hospitales de la India adoptaron robots durante la pandemia por la escasez de EPP, y porque pueden usarse para desinfectar pisos usando radiación ultravioleta y desinfectantes fuertes, también se usaban antes de la pandemia, para cirugías que requerían altos niveles de precisión. 

El Doctor Venkatesh Munikrishnan, un cirujano colorrectal que trabaja en los Hospitales Apollo en Chennai, opera con Intuitive Surgical’s Da Vinci XI, un sistema robótico a control remoto. 

“Este sistema me ayuda en cirugías difíciles con 10 veces más magnificación, y vistas 3D. La tecnología fluorescente de ‘luciérnaga’ que se usa con el robot Da Vinvi ilumina el suministro de sangre al órgano, y ayuda a diferenciar el tejido canceroso del sano”, él dice. “Aunque estos sistemas son muy caros y tienen que importarse, sus tecnologías avanzadas superiores son invaluables en cirugías complejas”. 

Rajeev Karwal de Milagrow Human Tech vio cómo su compañía se expandió rápidamente. “Empezamos con robots para residencias, desde los que limpiaban pisos hasta los que limpiaban albercas, y después robots industriales para la industria de la hospitalidad. 

“Con la llegada de la pandemia, nos enfocamos en humanoides que pueden usarse para desinfectar pisos de hospitales, checar temperaturas, hacer rondas y organizar llamadas telefónicas con doctores”. 

Sin embargo, la adopción de robots en India es lenta por muchas razones, la principal es que los procesos en India no están muy estandarizados. Otro son los altos costos de aduana para importar la tecnología. 

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También está el temor de que los robots quitarán trabajos en un país en el que el desempleo ya es muy alto. 

“Aunque ya se introdujeron humanoides en hospitales indios durante la pandemia, los doctores y el personal se rehúsan a usar la tecnología y a monitorear los robots, también está el problema de la mala conectividad wifi en muchos lugares, eso puede hacer que la gente regrese a la manera vieja de hacer las cosas”, dice Karwal. “Para la nueva tecnología se tienen que cruzar barreras mentales y físicas”. 

El escalamiento es un problema, pero la automatización parece que está aquí para quedarse. 

Como Karwal dice: “Una vez que adoptas esta tecnología, no hay vuelta atrás. Si tomas ventajas con inteligencia, te pueden poner en el camino para mejores soluciones que faciliten la vida de la gente”. 

Traducido por Sofía Delgado

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