Tengo 25 años y no tendré relaciones sexuales hasta el matrimonio. ¿Por qué no puedo conseguir un hombre?
'Me gustaría conocer a un chico amable que no me presione'. (modelo posando). Foto compuesta: Getty

Soy una mujer de 25 años y nunca he tenido relaciones sexuales, ya que siempre quise esperar hasta el matrimonio. Tuve dos novios de corta duración, pero las relaciones nunca fueron más allá porque yo quería esperar. Les expliqué que me parecían muy atractivos y que me gustaban los abrazos y los besos, pero ninguno de los dos se conformó con eso. Se volvieron distantes. Parecía que pensaban que yo no estaba interesada en ellos (lo cual no era el caso, realmente los quería). Les demostré mi amor de todas las maneras posibles, excepto el sexo. Me siento triste y frustrada de no poder conocer a un chico que me aceptará. La respuesta a mi deseo de esperar siempre es el rechazo. ¿Es normal mi comportamiento? Me gustaría poder conocer a un chico amable, que me quiera sin importar si tenemos sexo o no, sin presión para que yo “cumpla”.

Hay muchas personas en el mundo que tienen los mismos valores que tú sobre el sexo antes del matrimonio, pero tendrás que buscarlas en los lugares donde es más probable que las encuentres. Si sigues esperando que los hombres en general cumplan con tu deseo de esperar, seguramente te decepcionarás.

Como ya has descubierto, existe una gran variedad de actitudes ante la idea de posponer el sexo hasta después del matrimonio, y algunos hombres sin duda malinterpretarán tus normas como un rechazo personal. Amplía tu búsqueda de parejas afines. Si tus valores están basados en tu religión, tus creencias o tu cultura, sería sabio buscar hombres pertenecientes a esos grupos o círculos concretos. Y antes de salir con alguien, considera la posibilidad de iniciar una conversación en persona o en internet para hacerles saber tus pensamientos y sentimientos al respecto.

Esto ahuyentará a algunos hombres, y algunos podrían incluso verlo como un reto, pero probablemente te evitará problemas a largo plazo. Es importante que definas para ti –y potencialmente para los demás– lo que entiendes exactamente por sexo. Fuera del matrimonio, ¿estás dispuesta a participar en todos los comportamientos eróticos que puedas disfrutar mutuamente con tu pareja, excepto el coito? Te ayudará tener esto claro.

Todos somos libres de establecer parámetros para nuestras necesidades y expectativas en relación con el noviazgo e, independientemente del tipo de reglas o limitaciones que tenga una persona, ser franco desde el principio le ayudará a protegerse de malentendidos y complicaciones en la relación en el futuro.

Pamela Stephenson Connolly es una psicoterapeuta ubicada en Estados Unidos que se especializa en el tratamiento de desórdenes sexuales.

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