Los republicanos están a un escaño del control de la Cámara de Representantes en las elecciones intermedias de EU
Después de casi una semana de recuento de votos, los republicanos parecen estar a punto de retomar la cámara con una estrecha diferencia.
Después de casi una semana de recuento de votos, los republicanos parecen estar a punto de retomar la cámara con una estrecha diferencia.
Los republicanos estaban a punto de tomar el control de la Cámara de Representantes de Estados Unidos después de que se confirmara una serie de elecciones a su favor el lunes.
El partido esperaba obtener una victoria abrumadora en la cámara baja del Congreso debido a la alta inflación y al descontento con el gobierno de Biden. Sin embargo, se produjo un inesperadamente fuerte apoyo a los demócratas, que controlan la Cámara desde 2019.
Aunque los republicanos reclamen la victoria en la Cámara de Representantes, es probable que tengan la ventaja más estrecha del siglo XXI, rivalizando con la de 2001, cuando disponían de una mayoría de nueve escaños.
Casi una semana después de las elecciones intermedias, el resultado de tres elecciones en California y Nueva York llevó a los republicanos a 217 escaños, uno menos de los 218 necesarios para obtener la mayoría.
En la noche del lunes, Michelle Steel y Ken Calvert fueron reelegidos en California tras unas reñidas elecciones contra sus rivales demócratas. Ambas contiendas se volvieron más competitivas este año gracias a la redistribución de los mapas del Congreso en California.
En Nueva York, los republicanos también lograron conservar un distrito que votó por los demócratas en las dos últimas elecciones presidenciales.
Aún no se han dado a conocer los resultados de 14 elecciones, la mayoría de ellas en California.
Los republicanos de la Cámara de Representantes se reunieron de forma privada a última hora del lunes, en el marco del inicio de la lucha por la presidencia de la Cámara. El líder de la minoría, Kevin McCarthy, pretende conseguir apoyos para el cargo, pero se enfrentará a las objeciones de la derecha de su partido.
Los líderes del partido se enfrentan a una reacción negativa por los decepcionantes resultados en las elecciones intermedias. McCarthy había prometido grandes victorias, contando con la clase más diversa jamás reclutada por los republicanos, sin embargo, los votantes rechazaron a muchos de los candidatos más extremistas y a los negacionistas de las elecciones que estaban en deuda con Trump.
Si los republicanos ganan la Cámara de Representantes, McCarthy se enfrentará a una votación formal para convertirse en el presidente de la cámara cuando el nuevo Congreso se reúna en enero.
Donald Trump apoya a McCarthy como presidente de la Cámara, pero incluso su apoyo no es una garantía. El grupo Freedom Caucus conservador, que suele alinearse con Trump, exige concesiones a McCarthy para poder darle su apoyo. Tienen una larga lista de peticiones, desde puestos principales en los comités de la Cámara hasta garantías de que pueden desempeñar un papel en la redacción de la legislación.
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