La tasa de natalidad de Corea del Sur cae a mínimo histórico y agrava crisis demográfica

La crisis demográfica de Corea del Sur se agravó después de que nuevos datos mostraran que el número de bebés que nacieron el año pasado alcanzó otro mínimo histórico.

Según las cifras publicadas el miércoles por Statistics Korea, en 2022 nacieron 249 mil bebés, lo que supone una disminución del 4.4% respecto al año anterior y el tercer año consecutivo en el que los fallecimientos superan el número de nacimientos en la cuarta economía más grande de Asia.

La tasa de natalidad también cayó a un mínimo histórico, lo que supuso un duro golpe para los esfuerzos del gobierno de animar a las parejas a tener más hijos.

Una mujer surcoreana ahora puede esperar tener un promedio de 0.78 hijos en su vida –el nivel más bajo desde que se empezaron a llevar los registros en 1970– convirtiendo a Corea del Sur en el único país del mundo con una tasa de natalidad inferior a uno.

Los expertos señalan que la tasa debe ser de al menos 2.1 hijos para mantener estable la población del país en 52 millones de habitantes.

Corea del Sur no es el único país que lucha contra el descenso de la tasa de natalidad –el gobierno japonés advirtió recientemente que el declive demográfico estaba llevando al país “al borde de la disfunción social”–, sin embargo, la tendencia en Corea del Sur es particularmente alarmante para los políticos.

Cada vez son más los jóvenes que deciden retrasar el momento de formar una familia o que renuncian por completo a tener hijos.

Citan el elevado costo de criar a los hijos, las escasas perspectivas laborales en medio de una desaceleración económica y el aumento de los precios inmobiliarios, mientras que algunas mujeres indican que prefieren dar prioridad a su libertad personal y han descartado encontrar pareja para casarse.

Como resultado, el número de matrimonios en Corea del Sur alcanzó un mínimo histórico de 193 mil en 2021.

La edad promedio a la que las mujeres dan a luz fue de 33.5 años en 2022, según muestran los nuevos datos, 0.2 más que un año antes. En promedio, las mujeres dieron a luz a su primer hijo a los 33 años. Solo nacieron 24 bebés por cada mil mujeres que estaban en los años finales de sus 20s –un 3.5% menos que el año anterior– informó la agencia de noticias Yonhap.

Con la tasa de natalidad más baja del mundo y una población que envejece rápidamente, aumenta la preocupación por la presión sobre la economía surcoreana y el sistema de pensiones, que podría agotarse en las próximas décadas.

La población disminuyó por primera vez en la historia en 2021, y se prevé que se reduzca aún más, hasta los 38 millones, en 2070.

Al igual que Japón, los gobiernos locales de Corea del Sur lanzaron programas para animar a la población a tener hijos, que incluyen donaciones en efectivo y ayudas para tratamientos de fertilidad y gastos médicos, medidas que, según dicen los expertos, no abordan de forma adecuada el astronómico costo de la vida y el cambio de actitud respecto a los roles de género y el equilibrio entre la vida laboral y familiar.

En diciembre, el gobierno surcoreano dio a conocer un paquete de medidas destinadas a hacer frente a la baja tasa de natalidad y el envejecimiento de la población, entre ellas acortar el tiempo de interrupción de la carrera profesional de las mujeres después de tener hijos, viviendas más asequibles y mejores oportunidades laborales para los jóvenes. La tasa de desempleo entre las personas de 25 a 29 años alcanzó el 5.6% en enero, una cifra superior al promedio nacional del 3.6%.

El gobierno del presidente Yoon Suk-yeol ofrece 700 mil wones (unos 9 mil pesos) al mes a las familias que tienen un hijo menor de un año, una ayuda que aumentará a un millón de wones (unos 14 mil pesos) a partir del próximo año, informó el periódico especializado en negocios Nikkei.

El gobierno también indicó que intentará flexibilizar las restricciones impuestas a la mano de obra migrante para hacer frente al descenso de la población, una idea a la que se oponen muchos surcoreanos conservadores.