EU subastará una extensión del Golfo de México del tamaño de Italia para la extracción de petróleo
Un hombre pesca cerca de las plataformas petroleras ancladas en Port Aransas, Texas. Foto: Eric Gay/AP

Una enorme extensión del Golfo de México, equivalente a la superficie de Italia, será subastada para la extracción de petróleo y gas en la mañana del miércoles, en lo que supone el último golpe a la cada vez más deteriorada reputación del presidente estadounidense, Joe Biden, en su lucha contra la crisis climática.

El Departamento del Interior de Biden ofrece una vasta zona del centro y oeste del Golfo, incluidas zonas de aguas profundas, para proyectos de perforación de pozos que se prolongarán durante décadas, a pesar de las apremiantes advertencias de los científicos de que se debe eliminar rápidamente el uso de combustibles fósiles si el mundo quiere evitar un desastroso calentamiento global.

Las subastas también se llevan a cabo a pesar de la promesa preelectoral del propio Biden de detener todos los proyectos de perforación de pozos en tierras y aguas federales.

En total, se pondrán a disposición de las empresas de perforación de pozos 73.3 millones de acres (30 millones de hectáreas), una superficie aproximadamente del tamaño de Italia, menos de un mes antes del 13º aniversario del desastre del derrame de petróleo de la plataforma Deepwater Horizon. La venta, conocida como arrendamiento 259, tiene potencial suficiente para extraer más de mil millones de barriles de petróleo y 4.4 millones de pies cúbicos de gas durante los próximos 50 años, según indica el gobierno federal estadounidense.

Las subastas se llevan a cabo apenas dos semanas después de que el gobierno de Biden aprobara el polémico proyecto Willow, una iniciativa de perforación de pozos en la remota tundra del ártico de Alaska que extraerá más de 600 millones de barriles de petróleo durante su vida útil, y ambas medidas provocaron una gran alarma entre aquellos que están a favor de un clima habitable, incluidos los aliados habituales de Biden.

“Durante la primera mitad de su presidencia, Joe Biden lideró la lucha contra el cambio climático con una visión transformadora, pero en la segunda mitad parece estar anunciando un desastroso giro de 180 grados“, señaló Ben Jealous, director ejecutivo de la organización ecologista Sierra Club y destacado progresista.

EU subastará una extensión del Golfo de México del tamaño de Italia para la extracción de petróleo - Captura-de-pantalla-2023-03-29-a-las-14.25.30
Se arrendarán 73.3 millones de acres del Golfo de México para perforaciones de pozos petroleros. El arrendamiento 259 podría permitir la extracción de más de mil millones de barriles de petróleo durante los próximos 50 años. Gráfica de The Guardian. Fuente: Oficina de Administración de Energía Oceánica

El verano pasado, Biden promulgó la Ley para la Reducción de la Inflación (o IRA, por sus siglas en inglés), un proyecto de ley sin precedentes que el presidente elogió como “el mayor paso adelante jamás dado en materia climática”. Esta amplia ley incluye ayudas multimillonarias para proyectos de energías renovables y subvenciones para automóviles eléctricos, pero también estipula que se deben destinar grandes zonas del Golfo de México y Alaska a la perforación de pozos de combustibles fósiles, con el fin de tranquilizar a Joe Manchin, senador demócrata partidario de la explotación del carbón y voto decisivo.

La mayoría de los defensores climáticos consideraron que la compensación valía la pena, ya que la reducción de las emisiones resultante seguiría siendo considerable, sin embargo, el nuevo exceso de perforaciones de pozos podría anular gran parte de los beneficios derivados de los proyectos eólicos y solares a lo largo de la próxima década.

Si esto sigue así, todo lo bueno que Biden ha hecho por el futuro quedará anulado por el propio Biden“, señaló Jealous.

“Si está tomando una decisión política, se está equivocando. Está rompiendo una promesa importante sobre la perforación de pozos y, al incumplir su palabra, inspirará a muchos jóvenes a quedarse en casa en lugar de salir a votar en 2024. Sus decisiones parecen estar basadas en el cálculo político y económico del siglo pasado, no de este“.

La Casa Blanca señaló la existencia de varios factores que complican su agenda climática, como la invasión de Rusia contra Ucrania, la cual agilizó la construcción de terminales de exportación de petróleo y gas en Estados Unidos, cuyo destino son los aliados europeos, así como un Congreso profundamente dividido y diversos obstáculos jurídicos.

El viernes, Biden comentó que tenía cierta predisposición a bloquear el proyecto Willow, solo para que los abogados del gobierno le indicaran que ConocoPhillips, la empresa propietaria del contrato de arrendamiento del proyecto, probablemente lo demandaría y ganaría con tal de conseguirlo. “Mi firme intención era desaprobarlo en su totalidad, pero el consejo que recibí de los abogados fue que, de ser así, era muy probable que perdiera“, manifestó el presidente.

La administración también indicó que los términos de la Ley para la Reducción de la Inflación también obligan a vender el Golfo de México, aunque los opositores argumentan que no era necesario poner a la venta una superficie tan grande.

Otra zona del golfo, incluso más extensa, conocida como arrendamiento 257, se encuentra inmersa en una batalla legal y es probable que los últimos bloques de arrendamientos también terminen en los tribunales, debido a que una coalición de grupos ecologistas interpuso una demanda este mes para impedirlo. Tampoco se conoce con certeza el grado de interés que mostrará la industria: en diciembre, una subasta de arrendamientos en la ensenada de Cook, en Alaska, solo recibió una oferta.

“Estos arrendamientos volvieron a la vida gracias a la IRA, pero no había ningún motivo legal para ofrecer casi todo el Golfo de México a la industria del petróleo y el gas”, señaló George Torgun, abogado de la organización Earthjustice, que afirma que las perforaciones de pozos, aparte de sus repercusiones en el clima, supondrán una carga adicional para las comunidades de color que viven junto a refinerías contaminantes a lo largo de la costa y pondrán en peligro a la ballena de Rice, una especie endémica del golfo de la que quedan menos de 50 ejemplares.

Esto es consolidar décadas de uso de combustibles fósiles cuando deberíamos avanzar en otra dirección“, señaló Torgun. “No es acorde con lo que el propio Biden calificó como amenaza existencial del cambio climático”.

La Oficina de Administración de Energía Oceánica del Departamento del Interior, que supervisa la venta de los arrendamientos, no respondió la solicitud de comentarios. La National Ocean Industries Association, un grupo de presión a favor de las empresas de perforación en alta mar, señaló que la autorización de los arrendamientos constituye un “componente clave de una estrategia energética nacional que garantizará que los estadounidenses puedan seguir teniendo acceso a una energía nacional fundamental producida de forma segura, sostenible y responsable”.

No obstante, el sistema climático de la Tierra es inflexible. El reciente informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) advirtió que 3 mil millones de personas de todo el mundo ya están sufriendo graves consecuencias climáticas y que es probable que la temperatura del planeta aumente más de 1.5°C, lo que desataría una miseria mucho más grave, en el plazo de una década si no se reduce radicalmente el uso de combustibles fósiles.

La verdad es que a la Tierra no le importa la política, le importan los gases de efecto invernadero en la atmósfera“, señaló Alex Ruane, científico del clima de la NASA y autor principal del IPCC.

“Incluso desde el último informe del IPCC en 2021 ya introducimos en la atmósfera una parte sustancial del presupuesto de carbono. Tanto la acción como la falta de acción son alternativas, y en la actualidad nos acercamos cada día más a esos niveles de temperatura.

Síguenos en

Google News
Flipboard